La llegada de Joaquín Lavín como ministro de Educación movilizó a los estudiantes durante todo el año. Según la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), los dichos del jefe de la División de Educación Superior, Juan José Ugarte, confirman la intención del Gobierno de avanzar en una serie de políticas que benefician abiertamente al sector privado, lo cual fue califican como una “agenda privatizadora”.

Para los dirigentes de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), aún no se resuelve el problema de la reconstrucción de universidades y la protección de estudiantes damnificados por el terremoto. Tampoco se ha ofrecido un espacio formal para recoger la opinión de los distintos actores sobre las políticas propuestas, ni se ha entregado información oficial sobre los reales alcances de éstas.

La FECH, por acuerdo de su pleno, ha hecho un llamado a estar alerta frente a la expresión que esta agenda pueda tener en el presupuesto de Educación que se presenta a fin de mes, y a movilizarse en caso de que existan cambios que favorezcan la privatización.

“Entendiendo que es un año de terremoto, que estamos damnificados y una serie de cosas, es importante que el Estado se ponga la camiseta por sus universidades, por su sistema de educación. Si esto no pasa, sino que se expresa este conflicto de interés que tiene el ministerio, vamos a convocar a una jornada de protesta para la semana subsiguiente”, advirtió el presidente de la federación, Julio Sarmiento.

Para los estudiantes, sería un fuerte golpe a la educación pública que se aumentaran los recursos para el crédito con aval del Estado y no del Fondo Solidario, que se diera mayor relevancia a los recursos entregados por convenios de desempeño en lugar del Aporte Fiscal Directo, y que el financiamiento de la reconstrucción se plantee a través de deudas.

La FECH y otras federaciones estudiantiles están discutiendo un llamado a paro en protesta nacional para la semana del 4 de octubre, lo que sería apoyado por toda la Confech.

Camilo Ballesteros, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago, detalló el ánimo que ronda en las reuniones: “Tenemos bastante miedo por la información que tenemos, si es que el Gobierno va a apuntar a bajar el presupuesto de la educación superior y la educación en general. Hemos estado trabajando con gente de distintos sectores públicos, como los trabajadores de las universidades e incluso los rectores, y estamos esperando cuál va a ser la postura del Gobierno. Apuntamos a que el próximo año deberían inyectarse recursos a las universidades afectadas por el terremoto y también hacer modificaciones que tienen que ver con el presupuesto”, explicó.

Este sábado se realizará una nueva reunión de la Confech para determinar el camino conjunto que trabajarán para determinar sus pasos de movilización.