Casi 25 mil personas asistieron durante tres días de fiesta en Valparaíso al Carnaval de los Mil Tambores, actividad que ya cumple 11 años dedicada a la difusión de la cultura latinoamericana y a generar espacios de reflexión.
Pero destrozos a la propiedad pública y privada y enfrentamientos con Carabineros terminaron desviando el foco del evento y motivando fuertes cuestionamientos a la posibilidad de realizar una nueva edición, acusando falta de seguridad de parte de su organizador, el Centro Cultural Playa Ancha.
René Squella, comunicador de Radio Placeres de Valparaíso, quien fue testigo de los hechos señaló que la madrugada del sábado “empiezan a bajar a la gente. No hay diálogo sino ordenes. Es claro que las personas a las 3 de la mañana con alcohol en el cuerpo después de estar bailando desde las 5 de la tarde, algunos responden de una forma más violenta o igual de violenta que la de Carabineros”.
Los daños a tiendas de video, comercio, señalética y supermercados suman cerca de 20 millones de pesos y dejan un saldo de 21 personas detenidas.
“Se cursaron más de 78 infracciones por consumir alcohol en la vía pública, y además intervino personal de Fuerzas Especiales de Carabineros para evitar que se saquearan locales comerciales”, aseguró Hernán Merino, subprefecto de Carabineros de Valparaíso.
Esto ha generado un ambiente contra el evento, la Intendencia Regional, a través de su titular Raúl Celis, no autorizará el evento hasta que haya nuevas medidas de seguridad argumentando que “en el contexto de lo que ha ocurrido esta semana, nosotros no vamos a autorizar los Carnavales Mil Tambores para el próximo año. Si la municipalidad, en cambio, estima que son útiles para la cultura de la región, Carabineros nos señala que no hay riesgo para la seguridad pública y privada, ningún inconveniente en autorizar las actividades culturales, pero lo objetivo es que los daños se produjeron, que la seguridad de las personas estuvo en peligro”.
Incluso una editorial de El Mercurio de Valparaíso de hoy señala que “la solución para no lamentar desmanes luego de las actividades denominadas culturales es simplemente no autorizar este tipo de eventos”, cuestionando la realización.
El Centro Cultural Playa Ancha se defendió argumentando que en las actividades convocadas no se produjeron desórdenes, sino en situaciones posteriores y que no se puede coartar la libertad de expresión negando la realización del Carnaval.
“Esto se ve según los derechos que nos otorga la Constitución para organizar lo que nosotros queramos, no puede haber una prohibición de organizar actividades públicas. En los lugares donde nosotros solicitamos permisos para realizar actividades, no ocurrió ninguna actividad lamentable. El tema de la seguridad pública a las 3:30 de la mañana en un lugar que no tenía convocatoria de parte de los organizadores, es de única y exclusiva responsabilidad de la intendencia”, se indicó desde el centro cultural.
El evento en este versión llevó el slogan “Por la Defensa de la Madre Tierra”, y pretendía profundizar algunos aspectos de la última Cumbre de Cochabamba Bolivia.
Lo ocurrido en las calles de Valparaíso, con serios enfrentamientos, lleva a pensar que ya existen una serie de dificultades para que exista un Carnaval de los Mil Tambores 2011.
Casi 25 mil personas asistieron durante tres días de fiesta en Valparaíso al Carnaval de los Mil Tambores, actividad que ya cumple 11 años dedicada a la difusión de la cultura latinoamericana y a generar espacios de reflexión.
Pero destrozos a la propiedad pública y privada y enfrentamientos con Carabineros terminaron desviando el foco del evento y motivando fuertes cuestionamientos a la posibilidad de realizar una nueva edición, acusando falta de seguridad de parte de su organizador, el Centro Cultural Playa Ancha.
René Squella, comunicador de Radio Placeres de Valparaíso, quien fue testigo de los hechos señaló que la madrugada del sábado “empiezan a bajar a la gente. No hay diálogo sino ordenes. Es claro que las personas a las 3 de la mañana con alcohol en el cuerpo después de estar bailando desde las 5 de la tarde, algunos responden de una forma más violenta o igual de violenta que la de Carabineros”.
Los daños a tiendas de video, comercio, señalética y supermercados suman cerca de 20 millones de pesos y dejan un saldo de 21 personas detenidas.
“Se cursaron más de 78 infracciones por consumir alcohol en la vía pública, y además intervino personal de Fuerzas Especiales de Carabineros para evitar que se saquearan locales comerciales”, aseguró Hernán Merino, subprefecto de Carabineros de Valparaíso.
Esto ha generado un ambiente contra el evento, la Intendencia Regional, a través de su titular Raúl Celis, no autorizará el evento hasta que haya nuevas medidas de seguridad argumentando que “en el contexto de lo que ha ocurrido esta semana, nosotros no vamos a autorizar los Carnavales Mil Tambores para el próximo año. Si la municipalidad, en cambio, estima que son útiles para la cultura de la región, Carabineros nos señala que no hay riesgo para la seguridad pública y privada, ningún inconveniente en autorizar las actividades culturales, pero lo objetivo es que los daños se produjeron, que la seguridad de las personas estuvo en peligro”.
Incluso una editorial de El Mercurio de Valparaíso de hoy señala que “la solución para no lamentar desmanes luego de las actividades denominadas culturales es simplemente no autorizar este tipo de eventos”, cuestionando la realización.
El Centro Cultural Playa Ancha se defendió argumentando que en las actividades convocadas no se produjeron desórdenes, sino en situaciones posteriores y que no se puede coartar la libertad de expresión negando la realización del Carnaval.
“Esto se ve según los derechos que nos otorga la Constitución para organizar lo que nosotros queramos, no puede haber una prohibición de organizar actividades públicas. En los lugares donde nosotros solicitamos permisos para realizar actividades, no ocurrió ninguna actividad lamentable. El tema de la seguridad pública a las 3:30 de la mañana en un lugar que no tenía convocatoria de parte de los organizadores, es de única y exclusiva responsabilidad de la intendencia”, se indicó desde el centro cultural.
El evento en este versión llevó el slogan “Por la Defensa de la Madre Tierra”, y pretendía profundizar algunos aspectos de la última Cumbre de Cochabamba Bolivia.
Lo ocurrido en las calles de Valparaíso, con serios enfrentamientos, lleva a pensar que ya existen una serie de dificultades para que exista un Carnaval de los Mil Tambores 2011.
Casi 25 mil personas asistieron durante tres días de fiesta en Valparaíso al Carnaval de los Mil Tambores, actividad que ya cumple 11 años dedicada a la difusión de la cultura latinoamericana y a generar espacios de reflexión.
Pero destrozos a la propiedad pública y privada y enfrentamientos con Carabineros terminaron desviando el foco del evento y motivando fuertes cuestionamientos a la posibilidad de realizar una nueva edición, acusando falta de seguridad de parte de su organizador, el Centro Cultural Playa Ancha.
René Squella, comunicador de Radio Placeres de Valparaíso, quien fue testigo de los hechos señaló que la madrugada del sábado “empiezan a bajar a la gente. No hay diálogo sino ordenes. Es claro que las personas a las 3 de la mañana con alcohol en el cuerpo después de estar bailando desde las 5 de la tarde, algunos responden de una forma más violenta o igual de violenta que la de Carabineros”.
Los daños a tiendas de video, comercio, señalética y supermercados suman cerca de 20 millones de pesos y dejan un saldo de 21 personas detenidas.
“Se cursaron más de 78 infracciones por consumir alcohol en la vía pública, y además intervino personal de Fuerzas Especiales de Carabineros para evitar que se saquearan locales comerciales”, aseguró Hernán Merino, subprefecto de Carabineros de Valparaíso.
Esto ha generado un ambiente contra el evento, la Intendencia Regional, a través de su titular Raúl Celis, no autorizará el evento hasta que haya nuevas medidas de seguridad argumentando que “en el contexto de lo que ha ocurrido esta semana, nosotros no vamos a autorizar los Carnavales Mil Tambores para el próximo año. Si la municipalidad, en cambio, estima que son útiles para la cultura de la región, Carabineros nos señala que no hay riesgo para la seguridad pública y privada, ningún inconveniente en autorizar las actividades culturales, pero lo objetivo es que los daños se produjeron, que la seguridad de las personas estuvo en peligro”.
Incluso una editorial de El Mercurio de Valparaíso de hoy señala que “la solución para no lamentar desmanes luego de las actividades denominadas culturales es simplemente no autorizar este tipo de eventos”, cuestionando la realización.
El Centro Cultural Playa Ancha se defendió argumentando que en las actividades convocadas no se produjeron desórdenes, sino en situaciones posteriores y que no se puede coartar la libertad de expresión negando la realización del Carnaval.
“Esto se ve según los derechos que nos otorga la Constitución para organizar lo que nosotros queramos, no puede haber una prohibición de organizar actividades públicas. En los lugares donde nosotros solicitamos permisos para realizar actividades, no ocurrió ninguna actividad lamentable. El tema de la seguridad pública a las 3:30 de la mañana en un lugar que no tenía convocatoria de parte de los organizadores, es de única y exclusiva responsabilidad de la intendencia”, se indicó desde el centro cultural.
El evento en este versión llevó el slogan “Por la Defensa de la Madre Tierra”, y pretendía profundizar algunos aspectos de la última Cumbre de Cochabamba Bolivia.
Lo ocurrido en las calles de Valparaíso, con serios enfrentamientos, lleva a pensar que ya existen una serie de dificultades para que exista un Carnaval de los Mil Tambores 2011.
