Una delegación de organizaciones sociales italianas llegó a nuestro país para examinar en terreno la situación en el sur y anunciar el lanzamiento de la campaña “Patagonia sin Represas” en la nación europea.
El grupo entregó las proyecciones para la iniciativa que se opone a la construcción de la mega central hidroeléctrica Hidroaysén, donde participarán diez organizaciones sociales y ambientales.
La campaña fue presentada por el presidente de Ecosistemas y Coordinador Internacional del Consejo de Defensa por la Patagonia, Juan Pablo Orrego, quien criticó fuertemente el apoyo que el Gobierno le ha dado a la iniciativa.
“Esto es un intervencionismo como pocas veces habíamos visto y estamos profundamente sorprendidos y alarmados. Es algo totalmente inaceptable y estamos estudiando junto con los abogados del Consejo de Defensa de la Patagonia hacer algo porque no se puede tolerar que se desvirtúe y desnaturalice completamente todo el procedimiento de evaluación de impacto ambiental”, sentenció el ecologista.
Orrego apuntó al apoyo del ministro de Energía, Ricardo Rainieri, al declararse “satisfecho” cuando la empresa presentara su segunda Adenda y el respaldo tácito del Presidente Piñera al afirmar “que la pregunta no es si se va a hacer, sino cómo se va a hacer”, recordando que estos respaldos coinciden justamente con la llegada de la delegación italiana a nuestro país.
Paolo Carsetti, secretario del Foro Italiano de los Movimientos del Agua advirtió que, después de su recorrido por la Patagonia, la delegación está sorprendida por la influencia de la empresa sobre las comunidades.
“Hay algo que nos ha dejado muy impresionados en nuestra gira a través de los encuentros que hemos tenido con las comunidades locales, con las municipalidades de Cochrane, Puerto Varas, Tortel y otros lugares y es que finalmente hemos podido palpar el fuerte intervencionismo de la empresa, sobre todo a nivel económico, que está dividiendo fuertemente a las comunidades locales. La compañía está llevando a cabo una obra de convicción hacia la gente, mediante un trabajo de puerta a puerta e inyectando financiamiento para que el proyecto se realice”, describió Carsetti.
La delegación recordó que Hidroaysén está en manos de Endesa y Colbún, la primera de ellas adquirida por la empresa italiana ENEL, que es en un 32 por ciento estatal. Frente a esta estructura, los ciudadanos italianos están preocupados sobre cómo se invertirán sus impuestos y si este proyecto favorece o perjudica a nuestro país y el mundo.
En este sentido, reconocieron que la Patagonia es un bien de la Humanidad, por lo que es muy delicado lo que está ocurriendo. Caterina Amicucci, representante de la Campaña por la Reforma del Banco Mundial, destacó la irregularidad de analizar el proyecto sin contar con el mapa de las líneas de transmisión de la energía.
Por su parte, Hipólito Medina, habitante de la Patagonia afirmó que dentro de este proyecto “la opinión de los pobladores que está contenida dentro de la ley 19.300 nunca ha sido respetada. Aquí lo que piense la gente no es indicativo, sólo es como un saludo a la bandera y ya hay varios ejemplos de eso dentro de Chile”.
La delegación italiana advirtió que este modelo genera la energía desde muy lejos para distribuirla a la zona centro y principalmente al norte de Chile, por lo que resulta muy cara, casi dos veces y medio el costo del promedio de la energía hidroeléctrica el día de hoy.
Además afirmaron que argumentar que la energía hidroeléctrica es barata es una posición parcial que no se sostiene, principalmente, porque no toma en consideración los costos de gestión y las externalidades ambientales que perjudican a los mismos chilenos.
Una delegación de organizaciones sociales italianas llegó a nuestro país para examinar en terreno la situación en el sur y anunciar el lanzamiento de la campaña “Patagonia sin Represas” en la nación europea.
El grupo entregó las proyecciones para la iniciativa que se opone a la construcción de la mega central hidroeléctrica Hidroaysén, donde participarán diez organizaciones sociales y ambientales.
La campaña fue presentada por el presidente de Ecosistemas y Coordinador Internacional del Consejo de Defensa por la Patagonia, Juan Pablo Orrego, quien criticó fuertemente el apoyo que el Gobierno le ha dado a la iniciativa.
“Esto es un intervencionismo como pocas veces habíamos visto y estamos profundamente sorprendidos y alarmados. Es algo totalmente inaceptable y estamos estudiando junto con los abogados del Consejo de Defensa de la Patagonia hacer algo porque no se puede tolerar que se desvirtúe y desnaturalice completamente todo el procedimiento de evaluación de impacto ambiental”, sentenció el ecologista.
Orrego apuntó al apoyo del ministro de Energía, Ricardo Rainieri, al declararse “satisfecho” cuando la empresa presentara su segunda Adenda y el respaldo tácito del Presidente Piñera al afirmar “que la pregunta no es si se va a hacer, sino cómo se va a hacer”, recordando que estos respaldos coinciden justamente con la llegada de la delegación italiana a nuestro país.
Paolo Carsetti, secretario del Foro Italiano de los Movimientos del Agua advirtió que, después de su recorrido por la Patagonia, la delegación está sorprendida por la influencia de la empresa sobre las comunidades.
“Hay algo que nos ha dejado muy impresionados en nuestra gira a través de los encuentros que hemos tenido con las comunidades locales, con las municipalidades de Cochrane, Puerto Varas, Tortel y otros lugares y es que finalmente hemos podido palpar el fuerte intervencionismo de la empresa, sobre todo a nivel económico, que está dividiendo fuertemente a las comunidades locales. La compañía está llevando a cabo una obra de convicción hacia la gente, mediante un trabajo de puerta a puerta e inyectando financiamiento para que el proyecto se realice”, describió Carsetti.
La delegación recordó que Hidroaysén está en manos de Endesa y Colbún, la primera de ellas adquirida por la empresa italiana ENEL, que es en un 32 por ciento estatal. Frente a esta estructura, los ciudadanos italianos están preocupados sobre cómo se invertirán sus impuestos y si este proyecto favorece o perjudica a nuestro país y el mundo.
En este sentido, reconocieron que la Patagonia es un bien de la Humanidad, por lo que es muy delicado lo que está ocurriendo. Caterina Amicucci, representante de la Campaña por la Reforma del Banco Mundial, destacó la irregularidad de analizar el proyecto sin contar con el mapa de las líneas de transmisión de la energía.
Por su parte, Hipólito Medina, habitante de la Patagonia afirmó que dentro de este proyecto “la opinión de los pobladores que está contenida dentro de la ley 19.300 nunca ha sido respetada. Aquí lo que piense la gente no es indicativo, sólo es como un saludo a la bandera y ya hay varios ejemplos de eso dentro de Chile”.
La delegación italiana advirtió que este modelo genera la energía desde muy lejos para distribuirla a la zona centro y principalmente al norte de Chile, por lo que resulta muy cara, casi dos veces y medio el costo del promedio de la energía hidroeléctrica el día de hoy.
Además afirmaron que argumentar que la energía hidroeléctrica es barata es una posición parcial que no se sostiene, principalmente, porque no toma en consideración los costos de gestión y las externalidades ambientales que perjudican a los mismos chilenos.
Una delegación de organizaciones sociales italianas llegó a nuestro país para examinar en terreno la situación en el sur y anunciar el lanzamiento de la campaña “Patagonia sin Represas” en la nación europea.
El grupo entregó las proyecciones para la iniciativa que se opone a la construcción de la mega central hidroeléctrica Hidroaysén, donde participarán diez organizaciones sociales y ambientales.
La campaña fue presentada por el presidente de Ecosistemas y Coordinador Internacional del Consejo de Defensa por la Patagonia, Juan Pablo Orrego, quien criticó fuertemente el apoyo que el Gobierno le ha dado a la iniciativa.
“Esto es un intervencionismo como pocas veces habíamos visto y estamos profundamente sorprendidos y alarmados. Es algo totalmente inaceptable y estamos estudiando junto con los abogados del Consejo de Defensa de la Patagonia hacer algo porque no se puede tolerar que se desvirtúe y desnaturalice completamente todo el procedimiento de evaluación de impacto ambiental”, sentenció el ecologista.
Orrego apuntó al apoyo del ministro de Energía, Ricardo Rainieri, al declararse “satisfecho” cuando la empresa presentara su segunda Adenda y el respaldo tácito del Presidente Piñera al afirmar “que la pregunta no es si se va a hacer, sino cómo se va a hacer”, recordando que estos respaldos coinciden justamente con la llegada de la delegación italiana a nuestro país.
Paolo Carsetti, secretario del Foro Italiano de los Movimientos del Agua advirtió que, después de su recorrido por la Patagonia, la delegación está sorprendida por la influencia de la empresa sobre las comunidades.
“Hay algo que nos ha dejado muy impresionados en nuestra gira a través de los encuentros que hemos tenido con las comunidades locales, con las municipalidades de Cochrane, Puerto Varas, Tortel y otros lugares y es que finalmente hemos podido palpar el fuerte intervencionismo de la empresa, sobre todo a nivel económico, que está dividiendo fuertemente a las comunidades locales. La compañía está llevando a cabo una obra de convicción hacia la gente, mediante un trabajo de puerta a puerta e inyectando financiamiento para que el proyecto se realice”, describió Carsetti.
La delegación recordó que Hidroaysén está en manos de Endesa y Colbún, la primera de ellas adquirida por la empresa italiana ENEL, que es en un 32 por ciento estatal. Frente a esta estructura, los ciudadanos italianos están preocupados sobre cómo se invertirán sus impuestos y si este proyecto favorece o perjudica a nuestro país y el mundo.
En este sentido, reconocieron que la Patagonia es un bien de la Humanidad, por lo que es muy delicado lo que está ocurriendo. Caterina Amicucci, representante de la Campaña por la Reforma del Banco Mundial, destacó la irregularidad de analizar el proyecto sin contar con el mapa de las líneas de transmisión de la energía.
Por su parte, Hipólito Medina, habitante de la Patagonia afirmó que dentro de este proyecto “la opinión de los pobladores que está contenida dentro de la ley 19.300 nunca ha sido respetada. Aquí lo que piense la gente no es indicativo, sólo es como un saludo a la bandera y ya hay varios ejemplos de eso dentro de Chile”.
La delegación italiana advirtió que este modelo genera la energía desde muy lejos para distribuirla a la zona centro y principalmente al norte de Chile, por lo que resulta muy cara, casi dos veces y medio el costo del promedio de la energía hidroeléctrica el día de hoy.
Además afirmaron que argumentar que la energía hidroeléctrica es barata es una posición parcial que no se sostiene, principalmente, porque no toma en consideración los costos de gestión y las externalidades ambientales que perjudican a los mismos chilenos.
