Se mantiene la huelga de trabajadores del Metro de Santiago. Con esta decisión cada vez existen más posibilidades de que el domingo no haya servicio de trenes en ninguna de las estaciones.
Y mientras avanzan las movilizaciones, los operarios del servicio insisten en que se está trabajando con personal no calificado y con criterios empresariales discriminatorios, como el cierre total de la línea 4A.
“Es una definición administrativa de Metro que tiene que ver con una segmentación tremendamente cruel que está dejando fuera del uso del metro a barrios y comunas populares y, por ende, muy carenciadas y que ellos prevén que no van a hacer ruido con esto. Jamás se atreverían a dejar parte de la Línea 1 oriente fuera de servicio”, sentenció el presidente del de la Federación de Trabajadores del Metro, Eugenio Valenzuela.
Idea que respalda el máximo dirigente del sindicato N°3 de Trabajadores del Metro, Mario Acuña, quien desestimó las declaraciones de la firma que aseguraban que el servicio está funcionando con “normalidad”.
“Creemos que en la actualidad Metro no está dando las garantías que históricamente ha dado. Se está poniendo en una tómbola y sacando una ficha todos los días. Ayer les resultó. No tuvieron un accidente, ni mayores incidentes y cada día se están arriesgando más. No queremos esperar que uno de estos días la ficha sea negativa”, dijo Acuña
El dirigente llamó a la compañía y al Gobierno a dialogar, pues afirmó que la huelga es “un problema del Estado”.
Emplazamiento que la ministra vocera de Gobierno, Ena Von Baer, desechó al indicar que “las negociaciones se dan dentro una empresa”. “Los santiaguinos están teniendo dentro del difícil contexto que se está viviendo un servicio bastante óptimo. Lo que pase entre la compañía y sus sindicatos es responsabilidad de la firma”, comentó Von Baer.
Es por eso que desde la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) llamaron a la población y a los usuarios a apoyar la movilización.
“Estamos pidiendo a toda la gente que sea solidaria. Veremos en los próximos días cuando empiece el agotamiento cómo nos colocamos en la calle porque el llamado tal vez va a ser a no usar el metro, pero también a no usar la micro”, indicó la dirigente de la CUT, María Rozas.
Los trabajadores exigen beneficios iguales, independiente de la jornada que cumplan, además de negociaciones con la empresa cada dos años y un plan que incentive el retiro de los operarios.
La principal discordancia entre la empresa y los empleados radica en que éstos últimos piden un reajuste de sueldos de un 1,5 por ciento anual por dos años, mientras que al empresa les ofrece un uno por ciento por cuatro años.
Se mantiene la huelga de trabajadores del Metro de Santiago. Con esta decisión cada vez existen más posibilidades de que el domingo no haya servicio de trenes en ninguna de las estaciones.
Y mientras avanzan las movilizaciones, los operarios del servicio insisten en que se está trabajando con personal no calificado y con criterios empresariales discriminatorios, como el cierre total de la línea 4A.
“Es una definición administrativa de Metro que tiene que ver con una segmentación tremendamente cruel que está dejando fuera del uso del metro a barrios y comunas populares y, por ende, muy carenciadas y que ellos prevén que no van a hacer ruido con esto. Jamás se atreverían a dejar parte de la Línea 1 oriente fuera de servicio”, sentenció el presidente del de la Federación de Trabajadores del Metro, Eugenio Valenzuela.
Idea que respalda el máximo dirigente del sindicato N°3 de Trabajadores del Metro, Mario Acuña, quien desestimó las declaraciones de la firma que aseguraban que el servicio está funcionando con “normalidad”.
“Creemos que en la actualidad Metro no está dando las garantías que históricamente ha dado. Se está poniendo en una tómbola y sacando una ficha todos los días. Ayer les resultó. No tuvieron un accidente, ni mayores incidentes y cada día se están arriesgando más. No queremos esperar que uno de estos días la ficha sea negativa”, dijo Acuña
El dirigente llamó a la compañía y al Gobierno a dialogar, pues afirmó que la huelga es “un problema del Estado”.
Emplazamiento que la ministra vocera de Gobierno, Ena Von Baer, desechó al indicar que “las negociaciones se dan dentro una empresa”. “Los santiaguinos están teniendo dentro del difícil contexto que se está viviendo un servicio bastante óptimo. Lo que pase entre la compañía y sus sindicatos es responsabilidad de la firma”, comentó Von Baer.
Es por eso que desde la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) llamaron a la población y a los usuarios a apoyar la movilización.
“Estamos pidiendo a toda la gente que sea solidaria. Veremos en los próximos días cuando empiece el agotamiento cómo nos colocamos en la calle porque el llamado tal vez va a ser a no usar el metro, pero también a no usar la micro”, indicó la dirigente de la CUT, María Rozas.
Los trabajadores exigen beneficios iguales, independiente de la jornada que cumplan, además de negociaciones con la empresa cada dos años y un plan que incentive el retiro de los operarios.
La principal discordancia entre la empresa y los empleados radica en que éstos últimos piden un reajuste de sueldos de un 1,5 por ciento anual por dos años, mientras que al empresa les ofrece un uno por ciento por cuatro años.
Se mantiene la huelga de trabajadores del Metro de Santiago. Con esta decisión cada vez existen más posibilidades de que el domingo no haya servicio de trenes en ninguna de las estaciones.
Y mientras avanzan las movilizaciones, los operarios del servicio insisten en que se está trabajando con personal no calificado y con criterios empresariales discriminatorios, como el cierre total de la línea 4A.
“Es una definición administrativa de Metro que tiene que ver con una segmentación tremendamente cruel que está dejando fuera del uso del metro a barrios y comunas populares y, por ende, muy carenciadas y que ellos prevén que no van a hacer ruido con esto. Jamás se atreverían a dejar parte de la Línea 1 oriente fuera de servicio”, sentenció el presidente del de la Federación de Trabajadores del Metro, Eugenio Valenzuela.
Idea que respalda el máximo dirigente del sindicato N°3 de Trabajadores del Metro, Mario Acuña, quien desestimó las declaraciones de la firma que aseguraban que el servicio está funcionando con “normalidad”.
“Creemos que en la actualidad Metro no está dando las garantías que históricamente ha dado. Se está poniendo en una tómbola y sacando una ficha todos los días. Ayer les resultó. No tuvieron un accidente, ni mayores incidentes y cada día se están arriesgando más. No queremos esperar que uno de estos días la ficha sea negativa”, dijo Acuña
El dirigente llamó a la compañía y al Gobierno a dialogar, pues afirmó que la huelga es “un problema del Estado”.
Emplazamiento que la ministra vocera de Gobierno, Ena Von Baer, desechó al indicar que “las negociaciones se dan dentro una empresa”. “Los santiaguinos están teniendo dentro del difícil contexto que se está viviendo un servicio bastante óptimo. Lo que pase entre la compañía y sus sindicatos es responsabilidad de la firma”, comentó Von Baer.
Es por eso que desde la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) llamaron a la población y a los usuarios a apoyar la movilización.
“Estamos pidiendo a toda la gente que sea solidaria. Veremos en los próximos días cuando empiece el agotamiento cómo nos colocamos en la calle porque el llamado tal vez va a ser a no usar el metro, pero también a no usar la micro”, indicó la dirigente de la CUT, María Rozas.
Los trabajadores exigen beneficios iguales, independiente de la jornada que cumplan, además de negociaciones con la empresa cada dos años y un plan que incentive el retiro de los operarios.
La principal discordancia entre la empresa y los empleados radica en que éstos últimos piden un reajuste de sueldos de un 1,5 por ciento anual por dos años, mientras que al empresa les ofrece un uno por ciento por cuatro años.
