Gremios de taxis colectivos adhirieron a la movilización de la Central Unitaria de Trabajadores para este miércoles 24 y jueves 25 de agosto, sumándose a otros gremios del transporte como los choferes del Transantiago y trabajadores el Metro, además de organizaciones ligadas al transporte privado.
Los taxistas mantienen una serie de demandas anteriores a estas movilizaciones. A principios de agosto, miles de choferes coparon distintas calles de Santiago para llamar la atención del ministerio de Transportes, al que le exigen una rebaja en el combustible, inclusión en el diseño del Transantiago y pistas segregadas de circulación.
Héctor Sandoval, presidente de la Confederación Nacional de Taxis Colectivos (Conatacoch) destacó el compromiso de los colectiveros de sumarse al paro, aún cuando enfatizó que existen diferencias entre ambos petitorios. “Esta discriminación que existe hacia los taxis colectivos en todas las políticas gubernamentales es a nivel nacional, por lo tanto esto le afecta a todo el mundo y estamos expectantes. Lo que no queremos es que se confunda nuestro discurso con el planteamiento de la CUT, quienes tienen demandas transversales que afectan a toda la población, no sólo al mundo del transporte”, sostuvo.
Si bien Sandoval reconoció el interés del gremio por la eliminación del impuesto específico a las gasolinas, recalcó que éste no es el objetivo de la movilización, sino acceder a condiciones que emparejen la competencia con otros medios de transporte.
El dirigente explicó que “lo que nosotros queremos es un trato equitativo con respecto a otros medios de transporte. Los camiones, los buses interprovinciales tienen una rebaja focalizada, en el caso del Transantiago sabemos que el Estado aporta mil cien millones de pesos diarios, pero en nuestro caso no tenemos devolución. Queremos tener rebaja focalizada, no estamos peleando porque se termine el impuesto específico, pero necesitamos competir de igual a igual con otros medios y tener tarifas moderadas para nuestros usuarios, y eso tiene mucho que ver con el precio del combustible”.
El diputado socialista Marcelo Díaz, quien ha apoyado a los taxistas, presentó un proyecto de rebaja del combustible a quienes trabajan en el transporte urbano privado. El parlamentario apuntó que debe considerarse el petróleo como un insumo y no como un gasto personal de los taxistas o colectiveros.
“La distinción que hacemos es que los taxis colectivos usan combustible como herramienta de trabajo, no es lo mismo para quien se desplaza de manera particular con múltiples alternativas. El taxista no tiene más alternativa que cargar su estanque y seguir generando ingresos, entonces hay mecanismos que permiten un apoyo directo a ellos cuando el petróleo excede determinado valor, hay fórmulas que deben estudiarse pero no hemos visto voluntad de la autoridad”, declaró Díaz.
Además, los choferes están descontentos con el esquema excluyente del Transantiago, que no los considera en los trasbordos o en el uso de las vías exclusivas. Asimismo, reclaman contra la calificación por puntos en la entrega de licencias de conducir.
Desde los gremios reconocieron que han mantenido conversaciones con distintos ministros de Transporte, pero afirman no tener soluciones a sus demandas.
La paralización de los colectiveros se suma a los choferes del Transantiago quienes disminuirán las frecuencias de los recorridos en los horarios punta, hasta las nueve de la mañana y después de las cinco de la tarde, lo que conllevará problemas en el desplazamiento de los santiaguinos.
Gremios de taxis colectivos adhirieron a la movilización de la Central Unitaria de Trabajadores para este miércoles 24 y jueves 25 de agosto, sumándose a otros gremios del transporte como los choferes del Transantiago y trabajadores el Metro, además de organizaciones ligadas al transporte privado.
Los taxistas mantienen una serie de demandas anteriores a estas movilizaciones. A principios de agosto, miles de choferes coparon distintas calles de Santiago para llamar la atención del ministerio de Transportes, al que le exigen una rebaja en el combustible, inclusión en el diseño del Transantiago y pistas segregadas de circulación.
Héctor Sandoval, presidente de la Confederación Nacional de Taxis Colectivos (Conatacoch) destacó el compromiso de los colectiveros de sumarse al paro, aún cuando enfatizó que existen diferencias entre ambos petitorios. “Esta discriminación que existe hacia los taxis colectivos en todas las políticas gubernamentales es a nivel nacional, por lo tanto esto le afecta a todo el mundo y estamos expectantes. Lo que no queremos es que se confunda nuestro discurso con el planteamiento de la CUT, quienes tienen demandas transversales que afectan a toda la población, no sólo al mundo del transporte”, sostuvo.
Si bien Sandoval reconoció el interés del gremio por la eliminación del impuesto específico a las gasolinas, recalcó que éste no es el objetivo de la movilización, sino acceder a condiciones que emparejen la competencia con otros medios de transporte.
El dirigente explicó que “lo que nosotros queremos es un trato equitativo con respecto a otros medios de transporte. Los camiones, los buses interprovinciales tienen una rebaja focalizada, en el caso del Transantiago sabemos que el Estado aporta mil cien millones de pesos diarios, pero en nuestro caso no tenemos devolución. Queremos tener rebaja focalizada, no estamos peleando porque se termine el impuesto específico, pero necesitamos competir de igual a igual con otros medios y tener tarifas moderadas para nuestros usuarios, y eso tiene mucho que ver con el precio del combustible”.
El diputado socialista Marcelo Díaz, quien ha apoyado a los taxistas, presentó un proyecto de rebaja del combustible a quienes trabajan en el transporte urbano privado. El parlamentario apuntó que debe considerarse el petróleo como un insumo y no como un gasto personal de los taxistas o colectiveros.
“La distinción que hacemos es que los taxis colectivos usan combustible como herramienta de trabajo, no es lo mismo para quien se desplaza de manera particular con múltiples alternativas. El taxista no tiene más alternativa que cargar su estanque y seguir generando ingresos, entonces hay mecanismos que permiten un apoyo directo a ellos cuando el petróleo excede determinado valor, hay fórmulas que deben estudiarse pero no hemos visto voluntad de la autoridad”, declaró Díaz.
Además, los choferes están descontentos con el esquema excluyente del Transantiago, que no los considera en los trasbordos o en el uso de las vías exclusivas. Asimismo, reclaman contra la calificación por puntos en la entrega de licencias de conducir.
Desde los gremios reconocieron que han mantenido conversaciones con distintos ministros de Transporte, pero afirman no tener soluciones a sus demandas.
La paralización de los colectiveros se suma a los choferes del Transantiago quienes disminuirán las frecuencias de los recorridos en los horarios punta, hasta las nueve de la mañana y después de las cinco de la tarde, lo que conllevará problemas en el desplazamiento de los santiaguinos.
Gremios de taxis colectivos adhirieron a la movilización de la Central Unitaria de Trabajadores para este miércoles 24 y jueves 25 de agosto, sumándose a otros gremios del transporte como los choferes del Transantiago y trabajadores el Metro, además de organizaciones ligadas al transporte privado.
Los taxistas mantienen una serie de demandas anteriores a estas movilizaciones. A principios de agosto, miles de choferes coparon distintas calles de Santiago para llamar la atención del ministerio de Transportes, al que le exigen una rebaja en el combustible, inclusión en el diseño del Transantiago y pistas segregadas de circulación.
Héctor Sandoval, presidente de la Confederación Nacional de Taxis Colectivos (Conatacoch) destacó el compromiso de los colectiveros de sumarse al paro, aún cuando enfatizó que existen diferencias entre ambos petitorios. “Esta discriminación que existe hacia los taxis colectivos en todas las políticas gubernamentales es a nivel nacional, por lo tanto esto le afecta a todo el mundo y estamos expectantes. Lo que no queremos es que se confunda nuestro discurso con el planteamiento de la CUT, quienes tienen demandas transversales que afectan a toda la población, no sólo al mundo del transporte”, sostuvo.
Si bien Sandoval reconoció el interés del gremio por la eliminación del impuesto específico a las gasolinas, recalcó que éste no es el objetivo de la movilización, sino acceder a condiciones que emparejen la competencia con otros medios de transporte.
El dirigente explicó que “lo que nosotros queremos es un trato equitativo con respecto a otros medios de transporte. Los camiones, los buses interprovinciales tienen una rebaja focalizada, en el caso del Transantiago sabemos que el Estado aporta mil cien millones de pesos diarios, pero en nuestro caso no tenemos devolución. Queremos tener rebaja focalizada, no estamos peleando porque se termine el impuesto específico, pero necesitamos competir de igual a igual con otros medios y tener tarifas moderadas para nuestros usuarios, y eso tiene mucho que ver con el precio del combustible”.
El diputado socialista Marcelo Díaz, quien ha apoyado a los taxistas, presentó un proyecto de rebaja del combustible a quienes trabajan en el transporte urbano privado. El parlamentario apuntó que debe considerarse el petróleo como un insumo y no como un gasto personal de los taxistas o colectiveros.
“La distinción que hacemos es que los taxis colectivos usan combustible como herramienta de trabajo, no es lo mismo para quien se desplaza de manera particular con múltiples alternativas. El taxista no tiene más alternativa que cargar su estanque y seguir generando ingresos, entonces hay mecanismos que permiten un apoyo directo a ellos cuando el petróleo excede determinado valor, hay fórmulas que deben estudiarse pero no hemos visto voluntad de la autoridad”, declaró Díaz.
Además, los choferes están descontentos con el esquema excluyente del Transantiago, que no los considera en los trasbordos o en el uso de las vías exclusivas. Asimismo, reclaman contra la calificación por puntos en la entrega de licencias de conducir.
Desde los gremios reconocieron que han mantenido conversaciones con distintos ministros de Transporte, pero afirman no tener soluciones a sus demandas.
La paralización de los colectiveros se suma a los choferes del Transantiago quienes disminuirán las frecuencias de los recorridos en los horarios punta, hasta las nueve de la mañana y después de las cinco de la tarde, lo que conllevará problemas en el desplazamiento de los santiaguinos.
