El mediodía del lunes, las organizaciones que componen la Mesa Social por la Educación llegaron hasta el Ministerio de Educación para entregarle al ministro una carta con una contrapropuesta al cronograma de trabajo planteado por el Gobierno. No obstante, Felipe Bulnes acusó problemas en su agenda para reunirse con los estudiantes, los que finalmente fueron recibidos por su jefe de gabinete, Germán Subercauseaux.
Según han adelantado la Confech y el Colegio de Profesores, en el encuentro se reiteró la exigencia de garantías para un diálogo fructífero. Por su parte, la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones), anunció que realizará una asamblea para determinar su postura frente a las negociaciones.
En esa línea, uno de los voceros de la Cones comentó que “no se trata poner la pistola en pecho a las autoridades, sino que asegurar condiciones mínimas. En 2006 los estudiantes confiaron en la clase política y finalmente nos decepcionó. Hoy no estamos en las condiciones para cometer ese mismo error y esperamos que en un plazo breve, el Gobierno nos entregue una solución respecto de las garantías que hemos solicitado, que pasan por no tener una doble agenda en los proyectos de ley. Es poco honesto porque, por un lado, tengamos una mesa y por otra el Gobierno avance con el Parlamento”.
Respecto a los alcances de esta reunión, la vocera de la Confech, Camila Vallejo, declaró que “dimos a conocer los cuatro elementos que el gobierno puede dar respuesta rápidamente y queremos que la respuesta esté lo antes posible para que, con esas garantías, empecemos a discutir metodologías”.
La dirigente manifestó su deseo por contar con una respuesta esta misma semana, avanzando así en el diálogo con el ministerio, quien recalcó que “la pregunta ahora es ver si el gobierno estará o no a la altura”.
“Queremos que la respuestas estén lo antes posible para poder, con esa garantía, empezar a discutir las metodologías y la prioridades para los temas más trascendentales. Ojalá esto ocurra de aquí al fin de semana porque sabemos que el tiempo apremia”, cometó la dirigente universitaria.
Entre las condiciones propuestas por el movimiento estudiantil se encuentra el inmediato congelamiento de los proyectos de ley que reforman el sistema de enseñanza, los que el Gobierno envió unilateralmente al Parlamento previo a estas reuniones. También demandan la transparencia en el debate, lo que implica que éste sea público y transmitido por televisión o internet.
Otra solicitud es que se amplíe el plazo para el cierre del semestre académico -fijado por el Gobierno para el próximo 7 de octubre- evitando asi que los alumnos se arriesguen a perder las becas y créditos, junto con la recalendarización del año de los secundarios, sin que éstos pierdan automáticamente el año escolar. La última de las solicitudes guarda relación con la entrega de fondos estatales a universidades que lucran, situación que genera mayores diferencias entre el gobierno y los estudiantes.
En esta línea, los dirigentes sociales señalaron como fundamental que el debate se inicie con los temas de fondo como la gratuidad y el fin al lucro, en desmedro de discusiones por asignación de recursos. El presidente de la FEUC, Giorgio Jackson, manifestó la intención desde la Confech por comenzar a trabajar con el Ejecutivo apenas sean cursadas estas garantías, quien indicó su voluntad por “comenzar a trabajar esta misma semana”.
El mediodía del lunes, las organizaciones que componen la Mesa Social por la Educación llegaron hasta el Ministerio de Educación para entregarle al ministro una carta con una contrapropuesta al cronograma de trabajo planteado por el Gobierno. No obstante, Felipe Bulnes acusó problemas en su agenda para reunirse con los estudiantes, los que finalmente fueron recibidos por su jefe de gabinete, Germán Subercauseaux.
Según han adelantado la Confech y el Colegio de Profesores, en el encuentro se reiteró la exigencia de garantías para un diálogo fructífero. Por su parte, la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones), anunció que realizará una asamblea para determinar su postura frente a las negociaciones.
En esa línea, uno de los voceros de la Cones comentó que “no se trata poner la pistola en pecho a las autoridades, sino que asegurar condiciones mínimas. En 2006 los estudiantes confiaron en la clase política y finalmente nos decepcionó. Hoy no estamos en las condiciones para cometer ese mismo error y esperamos que en un plazo breve, el Gobierno nos entregue una solución respecto de las garantías que hemos solicitado, que pasan por no tener una doble agenda en los proyectos de ley. Es poco honesto porque, por un lado, tengamos una mesa y por otra el Gobierno avance con el Parlamento”.
Respecto a los alcances de esta reunión, la vocera de la Confech, Camila Vallejo, declaró que “dimos a conocer los cuatro elementos que el gobierno puede dar respuesta rápidamente y queremos que la respuesta esté lo antes posible para que, con esas garantías, empecemos a discutir metodologías”.
La dirigente manifestó su deseo por contar con una respuesta esta misma semana, avanzando así en el diálogo con el ministerio, quien recalcó que “la pregunta ahora es ver si el gobierno estará o no a la altura”.
“Queremos que la respuestas estén lo antes posible para poder, con esa garantía, empezar a discutir las metodologías y la prioridades para los temas más trascendentales. Ojalá esto ocurra de aquí al fin de semana porque sabemos que el tiempo apremia”, cometó la dirigente universitaria.
Entre las condiciones propuestas por el movimiento estudiantil se encuentra el inmediato congelamiento de los proyectos de ley que reforman el sistema de enseñanza, los que el Gobierno envió unilateralmente al Parlamento previo a estas reuniones. También demandan la transparencia en el debate, lo que implica que éste sea público y transmitido por televisión o internet.
Otra solicitud es que se amplíe el plazo para el cierre del semestre académico -fijado por el Gobierno para el próximo 7 de octubre- evitando asi que los alumnos se arriesguen a perder las becas y créditos, junto con la recalendarización del año de los secundarios, sin que éstos pierdan automáticamente el año escolar. La última de las solicitudes guarda relación con la entrega de fondos estatales a universidades que lucran, situación que genera mayores diferencias entre el gobierno y los estudiantes.
En esta línea, los dirigentes sociales señalaron como fundamental que el debate se inicie con los temas de fondo como la gratuidad y el fin al lucro, en desmedro de discusiones por asignación de recursos. El presidente de la FEUC, Giorgio Jackson, manifestó la intención desde la Confech por comenzar a trabajar con el Ejecutivo apenas sean cursadas estas garantías, quien indicó su voluntad por “comenzar a trabajar esta misma semana”.
El mediodía del lunes, las organizaciones que componen la Mesa Social por la Educación llegaron hasta el Ministerio de Educación para entregarle al ministro una carta con una contrapropuesta al cronograma de trabajo planteado por el Gobierno. No obstante, Felipe Bulnes acusó problemas en su agenda para reunirse con los estudiantes, los que finalmente fueron recibidos por su jefe de gabinete, Germán Subercauseaux.
Según han adelantado la Confech y el Colegio de Profesores, en el encuentro se reiteró la exigencia de garantías para un diálogo fructífero. Por su parte, la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones), anunció que realizará una asamblea para determinar su postura frente a las negociaciones.
En esa línea, uno de los voceros de la Cones comentó que “no se trata poner la pistola en pecho a las autoridades, sino que asegurar condiciones mínimas. En 2006 los estudiantes confiaron en la clase política y finalmente nos decepcionó. Hoy no estamos en las condiciones para cometer ese mismo error y esperamos que en un plazo breve, el Gobierno nos entregue una solución respecto de las garantías que hemos solicitado, que pasan por no tener una doble agenda en los proyectos de ley. Es poco honesto porque, por un lado, tengamos una mesa y por otra el Gobierno avance con el Parlamento”.
Respecto a los alcances de esta reunión, la vocera de la Confech, Camila Vallejo, declaró que “dimos a conocer los cuatro elementos que el gobierno puede dar respuesta rápidamente y queremos que la respuesta esté lo antes posible para que, con esas garantías, empecemos a discutir metodologías”.
La dirigente manifestó su deseo por contar con una respuesta esta misma semana, avanzando así en el diálogo con el ministerio, quien recalcó que “la pregunta ahora es ver si el gobierno estará o no a la altura”.
“Queremos que la respuestas estén lo antes posible para poder, con esa garantía, empezar a discutir las metodologías y la prioridades para los temas más trascendentales. Ojalá esto ocurra de aquí al fin de semana porque sabemos que el tiempo apremia”, cometó la dirigente universitaria.
Entre las condiciones propuestas por el movimiento estudiantil se encuentra el inmediato congelamiento de los proyectos de ley que reforman el sistema de enseñanza, los que el Gobierno envió unilateralmente al Parlamento previo a estas reuniones. También demandan la transparencia en el debate, lo que implica que éste sea público y transmitido por televisión o internet.
Otra solicitud es que se amplíe el plazo para el cierre del semestre académico -fijado por el Gobierno para el próximo 7 de octubre- evitando asi que los alumnos se arriesguen a perder las becas y créditos, junto con la recalendarización del año de los secundarios, sin que éstos pierdan automáticamente el año escolar. La última de las solicitudes guarda relación con la entrega de fondos estatales a universidades que lucran, situación que genera mayores diferencias entre el gobierno y los estudiantes.
En esta línea, los dirigentes sociales señalaron como fundamental que el debate se inicie con los temas de fondo como la gratuidad y el fin al lucro, en desmedro de discusiones por asignación de recursos. El presidente de la FEUC, Giorgio Jackson, manifestó la intención desde la Confech por comenzar a trabajar con el Ejecutivo apenas sean cursadas estas garantías, quien indicó su voluntad por “comenzar a trabajar esta misma semana”.
