El Gobierno reaccionó este domingo a la decisión de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) de interrumpir las conversaciones con el Mineduc, y apuntó a “los sectores más ultras e ideologizados”, que enfocarán el movimiento no en la educación sino en la violencia y la agitación.
Primero, el Presidente Sebastián Piñera declaró brevemente que “hay que garantizar educación de calidad para todos” y que “ojalá la Confech recapacite y regrese al diálogo”, cuando salía a misa desde su casa en Bahía Coique, adonde viajó para tomar unos días de descanso.
Más tarde, el ministro Secretario General de Gobierno, Andrés Chadwick, entregó la posición oficial del Ejecutivo al señalar que en la Confech primaron las posturas de “los más duros entre los duros”.
“Ha quedado claro que la Confech ha pasado a ser tomada, cooptada y dirigida absolutamente por los sectores más ultras, más radicalizados, mas intransigentes e ideologizados, lo que traerá como consecuencia un movimiento que no se ocupe de la educación sino de la agitación y de generar situaciones de violencia que no ayudan al camino de las soluciones. Lo lamentamos enormemente, porque terminará perjudicando a miles de estudiantes que quieren terminar el semestre”, dijo el vocero.
Desde La Moneda, Chadwick cuestionó que los estudiantes movilizados, “por medio de tomas, les impidan comenzar el semestre” a esos alumnos. “Los dirigentes ultras y extremos no se harán cargo de las dificultades ni de lo caro de los gastos de pensiones y el perder las vacaciones”, criticó.
En esa línea, el portavoz dijo que el Ejecutivo continuará enviando proyectos de ley al Parlamento y que esta semana formará una comisión de expertos que colaboren en la reforma a la educación. “Por el camino del diálogo vamos a lograr mucho más que por el camino de las piedras e intransigencia”, aseguró.
“Vamos a lograr el compromiso que el Presidente ha asumido para Chile: gratuidad para aquellos que lo necesiten y calidad para todos”, añadió.
Además, Chadwick afirmó que el Gobierno mantiene abiertas las puertas para las conversaciones, aunque mantuvo los cuestionamientos a la Confech: “Lamentablemente a esa mesa concurren dirigentes que tienen posiciones ultras y solo quieren el todo o nada, pese a los esfuerzos. Se hace imposible continuar, porque ellos no quieren continuar. Y no podemos esperar, porque hay familias de sectores vulnerables que pagan todos los meses la universidad”, señaló.
Las declaraciones de Chadwick encontraron rápida respuesta en las cuentas de Twitter de algunos dirigentes. El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago (FEUSACH), Camilo Ballesteros respondió que “la ultra derecha se tomó La Moneda”.
Mientras, el vocero de la Federación de Estudiantes Mapuches, José Ancalao, escribió en su cuenta que “La Moneda ha sido tomada por los sectores más ultras y más duros de los ultra derecha, la demanda hoy es transversal en los sectores sociales”.
El Gobierno reaccionó este domingo a la decisión de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) de interrumpir las conversaciones con el Mineduc, y apuntó a “los sectores más ultras e ideologizados”, que enfocarán el movimiento no en la educación sino en la violencia y la agitación.
Primero, el Presidente Sebastián Piñera declaró brevemente que “hay que garantizar educación de calidad para todos” y que “ojalá la Confech recapacite y regrese al diálogo”, cuando salía a misa desde su casa en Bahía Coique, adonde viajó para tomar unos días de descanso.
Más tarde, el ministro Secretario General de Gobierno, Andrés Chadwick, entregó la posición oficial del Ejecutivo al señalar que en la Confech primaron las posturas de “los más duros entre los duros”.
“Ha quedado claro que la Confech ha pasado a ser tomada, cooptada y dirigida absolutamente por los sectores más ultras, más radicalizados, mas intransigentes e ideologizados, lo que traerá como consecuencia un movimiento que no se ocupe de la educación sino de la agitación y de generar situaciones de violencia que no ayudan al camino de las soluciones. Lo lamentamos enormemente, porque terminará perjudicando a miles de estudiantes que quieren terminar el semestre”, dijo el vocero.
Desde La Moneda, Chadwick cuestionó que los estudiantes movilizados, “por medio de tomas, les impidan comenzar el semestre” a esos alumnos. “Los dirigentes ultras y extremos no se harán cargo de las dificultades ni de lo caro de los gastos de pensiones y el perder las vacaciones”, criticó.
En esa línea, el portavoz dijo que el Ejecutivo continuará enviando proyectos de ley al Parlamento y que esta semana formará una comisión de expertos que colaboren en la reforma a la educación. “Por el camino del diálogo vamos a lograr mucho más que por el camino de las piedras e intransigencia”, aseguró.
“Vamos a lograr el compromiso que el Presidente ha asumido para Chile: gratuidad para aquellos que lo necesiten y calidad para todos”, añadió.
Además, Chadwick afirmó que el Gobierno mantiene abiertas las puertas para las conversaciones, aunque mantuvo los cuestionamientos a la Confech: “Lamentablemente a esa mesa concurren dirigentes que tienen posiciones ultras y solo quieren el todo o nada, pese a los esfuerzos. Se hace imposible continuar, porque ellos no quieren continuar. Y no podemos esperar, porque hay familias de sectores vulnerables que pagan todos los meses la universidad”, señaló.
Las declaraciones de Chadwick encontraron rápida respuesta en las cuentas de Twitter de algunos dirigentes. El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago (FEUSACH), Camilo Ballesteros respondió que “la ultra derecha se tomó La Moneda”.
Mientras, el vocero de la Federación de Estudiantes Mapuches, José Ancalao, escribió en su cuenta que “La Moneda ha sido tomada por los sectores más ultras y más duros de los ultra derecha, la demanda hoy es transversal en los sectores sociales”.
El Gobierno reaccionó este domingo a la decisión de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) de interrumpir las conversaciones con el Mineduc, y apuntó a “los sectores más ultras e ideologizados”, que enfocarán el movimiento no en la educación sino en la violencia y la agitación.
Primero, el Presidente Sebastián Piñera declaró brevemente que “hay que garantizar educación de calidad para todos” y que “ojalá la Confech recapacite y regrese al diálogo”, cuando salía a misa desde su casa en Bahía Coique, adonde viajó para tomar unos días de descanso.
Más tarde, el ministro Secretario General de Gobierno, Andrés Chadwick, entregó la posición oficial del Ejecutivo al señalar que en la Confech primaron las posturas de “los más duros entre los duros”.
“Ha quedado claro que la Confech ha pasado a ser tomada, cooptada y dirigida absolutamente por los sectores más ultras, más radicalizados, mas intransigentes e ideologizados, lo que traerá como consecuencia un movimiento que no se ocupe de la educación sino de la agitación y de generar situaciones de violencia que no ayudan al camino de las soluciones. Lo lamentamos enormemente, porque terminará perjudicando a miles de estudiantes que quieren terminar el semestre”, dijo el vocero.
Desde La Moneda, Chadwick cuestionó que los estudiantes movilizados, “por medio de tomas, les impidan comenzar el semestre” a esos alumnos. “Los dirigentes ultras y extremos no se harán cargo de las dificultades ni de lo caro de los gastos de pensiones y el perder las vacaciones”, criticó.
En esa línea, el portavoz dijo que el Ejecutivo continuará enviando proyectos de ley al Parlamento y que esta semana formará una comisión de expertos que colaboren en la reforma a la educación. “Por el camino del diálogo vamos a lograr mucho más que por el camino de las piedras e intransigencia”, aseguró.
“Vamos a lograr el compromiso que el Presidente ha asumido para Chile: gratuidad para aquellos que lo necesiten y calidad para todos”, añadió.
Además, Chadwick afirmó que el Gobierno mantiene abiertas las puertas para las conversaciones, aunque mantuvo los cuestionamientos a la Confech: “Lamentablemente a esa mesa concurren dirigentes que tienen posiciones ultras y solo quieren el todo o nada, pese a los esfuerzos. Se hace imposible continuar, porque ellos no quieren continuar. Y no podemos esperar, porque hay familias de sectores vulnerables que pagan todos los meses la universidad”, señaló.
Las declaraciones de Chadwick encontraron rápida respuesta en las cuentas de Twitter de algunos dirigentes. El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago (FEUSACH), Camilo Ballesteros respondió que “la ultra derecha se tomó La Moneda”.
Mientras, el vocero de la Federación de Estudiantes Mapuches, José Ancalao, escribió en su cuenta que “La Moneda ha sido tomada por los sectores más ultras y más duros de los ultra derecha, la demanda hoy es transversal en los sectores sociales”.
