Diario y Radio Universidad Chile

Año XVI, 19 de abril de 2024


Escritorio

Indignados globales: Una lucha por más democracia y el fin de los abusos económicos

Más de 40 países en los cinco continentes han respondido al llamado del movimiento de los “Indignados” para exigir una mayor democratización y modificaciones urgentes al sistema económico. Respuestas globales para problemas globales parece ser la consigna de los habitantes del mundo, que están exigiendo a sus políticos volver a escuchar la voz de la ciudadanía.

Loreto Soto

  Jueves 13 de octubre 2011 20:11 hrs. 
indignados

Compartir en

Gran expectación ha generado el llamado que realizó el movimiento de  “Indignados” españoles para realizar una gran marcha mundial este 15 de octubre, que ha sido bautizada como “World Revolution 15.O: Unidos por el cambio global”.

Y es que las expresiones de descontento con el modelo imperante que se han registrado durante este año en diversas partes del mundo, desde el Medio Oriente a Europa pasando por Estados Unidos e incluso Chile con las demandas estudiantiles, serán sintetizadas en una jornada de protesta mundial emulando la internacionalización de un sistema económico que enriquece a una minoría y tiende a precarizar al resto de la población.

Si bien, las exigencias varían de acuerdo a la realidad de cada país, las demandas que cruzan a los indignados globales están relacionadas con una mayor democratización y una modificación al modelo económico.

“Los españoles pusieron en la palestra asuntos que son generales, por lo mismo es fácil que se repliquen y se puedan ver en otros países. Básicamente son estos dos temas, que son representativos de los alegatos que hay en Chile y que acogemos. Pero nosotros además tenemos los problemas medio ambientales, de género y la educación”, explicó el vocero del movimiento Indignados Chile, Basthian Carrasco.

Por su parte, el académico del departamento de Sociología de la Universidad de Chile, Víctor Muñoz, indicó que todos estos movimientos habrían surgido del distanciamiento entre la actividad política, “sin mayor conexión con los mundos sociales, con la heterogeneidad de demandas y de sentires que hay en la sociedad civil”.

Además, Muñoz destacó la utilización de las redes sociales como elemento de convocatoria, pero precisó que, de todas formas, estas protestas estarían inspiradas en los ideales modernos de igualdad y libertad.

“Puede ser novedoso que los llamados a las marchas partan por internet, en un grupo de Facebook o que las personas decidan juntarse en alguna parte a través de mensaje de texto. No obstante, la acción colectiva de estos movimientos tiene elementos de lo viejo y de recuperación de la antigua ciudadanía, de aquel ideal moderno de la igualdad, la fraternidad y la libertad. Apunta a eso, a una ciudadanía que quiere ser parte constructora de un orden social que cada vez se está viendo más ajeno”, indicó el profesor.

Precisamente, serían estas consignas las que intentarían llamar la atención de una clase política que ha privilegiado los intereses de los grandes grupos económicos y que ha  desatendido los intereses del resto de la sociedad, tal como lo expresó en un discurso Patrick Brunner, uno de los voceros del “Occupy Wall Street” en Nueva York.

“Que se escuche la voz del 99 por ciento del país y no la del 1 por ciento que sigue enriqueciéndose”, vociferaban por primera vez los indignados norteamericanos el 17 de septiembre en el Parque Zuccotti,  siguiendo la huella  de los ciudadanos españoles que, un par de meses antes, el 15 de Mayo, ocupaban las principales plazas de Madrid y Barcelona para reclamar por el desempleo, la corrupción política y para exigir mayor democracia.

En esa línea, Basthian Carrasco, señaló que las marchas de este sábado constituyen “un tirón de oreja” a los políticos que, a su juicio, han olvidado que su trabajo es representar los intereses de la gente.

“Lo que hoy tienen que entender los políticos y sobre todo ahora con este despertar social, es que tienen que estar al servicio de la gente. Si las demandas generales y las particulares de cada lugar se están juntando en un gran discurso y un movimiento, son los políticos los que tienen que acercarse y cumplir con el mandato de la ciudadanía popular. Ahí tiene que haber un cambio y una renovación. Tienen que entender cuál es su función, que es ser representantes de las demandas populares”, dijo.

La protesta de este sábado no sólo pretende replicarse en las capitales de cerca de 40 países en los cinco continentes, sino que también busca llegar a las provincias más remotas, donde ya se han programado actividades.

En tanto, los expertos no dudan en aventurar que hay un cambio cultural que está en marcha y que requiere de transformaciones institucionales, pero al mismo tiempo advierten que hay actores que tienen que hacerse cargo del problema y que, hasta el momento, no lo han hecho.

Síguenos en