Por los delitos de cohecho – recepción de coimas – y lavado de dinero fueron formalizados los ex oficiales de la Armada Patricio Basili Esbry y Juan Tapia Villalón, quienes trabajaban en la empresa Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar), en el marco del “Caso Fragatas”. También fue formalizado el empresario ligado a la venta de material bélico Guillermo Ibieta.
Durante la audiencia, el fiscal que lidera la investigación, Carlos Gajardo, aseguró que Basili entregó información privilegiada a Ibieta para que sus compañías se adjudicaran las licitaciones de Asmar en el proyecto de reacondicionamiento de cuatro fragatas que fueron compradas a Holanda en 2004. Posteriormente, se procedía al pago de supuestas comisiones que eran depositadas en cuentas abiertas al extranjero por Tapia, quien es socio de Basili.
Con estas operaciones, los ex marinos se habrían adjudicado cerca de un millón de dólares de forma presuntamente ilícita, aunque en la instancia los acusaron negaron cualquier tipo de participación en pagos ilegales.
Esta investigación comenzó en 2007 y se ha basado en el seguimiento de los movimientos financieros de los implicados, pero además en escuchas telefónicas que confirman las relaciones entre los tres imputados.
Al término de la audiencia, que se realizó el viernes, el juez Luis Avilés decidió dejar en prisión preventiva en la Cárcel de Alta Seguridad ( CAS) de Santiago a los tres formalizados.
Por los delitos de cohecho – recepción de coimas – y lavado de dinero fueron formalizados los ex oficiales de la Armada Patricio Basili Esbry y Juan Tapia Villalón, quienes trabajaban en la empresa Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar), en el marco del “Caso Fragatas”. También fue formalizado el empresario ligado a la venta de material bélico Guillermo Ibieta.
Durante la audiencia, el fiscal que lidera la investigación, Carlos Gajardo, aseguró que Basili entregó información privilegiada a Ibieta para que sus compañías se adjudicaran las licitaciones de Asmar en el proyecto de reacondicionamiento de cuatro fragatas que fueron compradas a Holanda en 2004. Posteriormente, se procedía al pago de supuestas comisiones que eran depositadas en cuentas abiertas al extranjero por Tapia, quien es socio de Basili.
Con estas operaciones, los ex marinos se habrían adjudicado cerca de un millón de dólares de forma presuntamente ilícita, aunque en la instancia los acusaron negaron cualquier tipo de participación en pagos ilegales.
Esta investigación comenzó en 2007 y se ha basado en el seguimiento de los movimientos financieros de los implicados, pero además en escuchas telefónicas que confirman las relaciones entre los tres imputados.
Al término de la audiencia, que se realizó el viernes, el juez Luis Avilés decidió dejar en prisión preventiva en la Cárcel de Alta Seguridad ( CAS) de Santiago a los tres formalizados.
Por los delitos de cohecho – recepción de coimas – y lavado de dinero fueron formalizados los ex oficiales de la Armada Patricio Basili Esbry y Juan Tapia Villalón, quienes trabajaban en la empresa Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar), en el marco del “Caso Fragatas”. También fue formalizado el empresario ligado a la venta de material bélico Guillermo Ibieta.
Durante la audiencia, el fiscal que lidera la investigación, Carlos Gajardo, aseguró que Basili entregó información privilegiada a Ibieta para que sus compañías se adjudicaran las licitaciones de Asmar en el proyecto de reacondicionamiento de cuatro fragatas que fueron compradas a Holanda en 2004. Posteriormente, se procedía al pago de supuestas comisiones que eran depositadas en cuentas abiertas al extranjero por Tapia, quien es socio de Basili.
Con estas operaciones, los ex marinos se habrían adjudicado cerca de un millón de dólares de forma presuntamente ilícita, aunque en la instancia los acusaron negaron cualquier tipo de participación en pagos ilegales.
Esta investigación comenzó en 2007 y se ha basado en el seguimiento de los movimientos financieros de los implicados, pero además en escuchas telefónicas que confirman las relaciones entre los tres imputados.
Al término de la audiencia, que se realizó el viernes, el juez Luis Avilés decidió dejar en prisión preventiva en la Cárcel de Alta Seguridad ( CAS) de Santiago a los tres formalizados.
