Un recurso de protección presentarán algunos alumnos de la Universidad Metropolitana de las Ciencias de la Educación, ya que algunos llevan casi cuatro meses sin recibir las becas y los beneficios que les fueron designados por el Gobierno.
Carolina Jara es estudiante de educación parvularia y afirma que “desde agosto no hemos recibido la beca de alimentación y mantención, las que yo ocupo para comer y para movilizarme”.
Además, Carolina, quien tiene la Beca Bicentenario, dice que “las platas llegaron, pero en la Universidad nos dicen que el Gobierno las tendrá retenidas mientras no se levanta el paro, por lo que yo debería pagar el arancel de noviembre y diciembre para seguir estudiando, lo que es imposible para mí”.
Mariana Rubio vino a estudiar Educación Diferencial a la UMCE desde la VI región y tiene las becas Presidente de la República y Bicentenario. Debido a que a que no recibe la primera desde agosto ha tenido serias dificultades para pagar el arriendo de su pensión y se ha visto obligada a buscar trabajos esporádicos para poder mantenerse en la capital.
“El gobierno está tergiversando el concepto de estudiante regular para quitar los beneficios, porque dice que nosotros, al estar movilizados, ya no somos estudiantes regulares, como si hubiésemos dejado la carrera, lo que no es cierto, porque nosotros nos encontramos en una movilización que responde al contexto nacional y de ninguna manera hemos dejado de asistir a la universidad”, afirma la estudiante provinciana.
Dolor de cabeza
La UMCE ha sido la universidad más “castigada” por el Gobierno en el marco de las movilizaciones de este año, ya que aunque diversos planteles han estado movilizados ninguna había dejado de percibir las becas, incluso las de alimentación, por tanto tiempo. Y es precisamente esta casa de estudios donde cerca de un 80 por ciento de los alumnos estudia gracias a becas.
Los estudiantes barajan la hipótesis de que el “Peda” es un dolor de cabeza para el Gobierno debido a sus históricas reivindicaciones políticas y a sus paros y que, a pesar de esto, sigue siendo el plantel preferido por los alumnos con los mejores puntajes que deciden estudiar pedagogía.
Un ejemplo de esto es que este año los alumnos que obtuvieron altos puntajes en la PSU y que fueron beneficiados por la Beca Vocación de Profesor escogieron por gran mayoría a la Universidad Metropolitana de las Ciencias de la Educación.
Este episodio va de la mano con una abundante oferta de nuevas carreras de pedagogía en las universidades privadas, por lo que la idea del Gobierno de desmantelar la formación de docentes en el sistema público es una hipótesis que cobra sentido entre los estudiantes.
El rector de la UMCE, Jaime Espinoza, ya había declarado que el plantel estaba sufriendo una discriminación por parte del Gobierno cuando se le informó que no recibirían las becas por no recalendarizar el segundo semestre.
“Me parece discriminatorio y una presión indebida que a nuestra universidad se la deje sin los recursos para las becas de alimentación por el sólo hecho de no haber expresado oficialmente un calendario académico para inicio del segundo semestre, que no lo puedo confirmar. He dicho que esto es injusto porque es cosa de ver la realidad en todo el país, donde hay muchas universidades tomadas y en paro, donde es muy difícil prever que la normalización del segundo semestre puede llevarse a cabo. Por qué hacen está discriminación con la UMCE, hemos sido honestos. No podía hacer una declaración certera ante tanta incertidumbre”, afirmó Espinoza.
Claudio Ojeda, vicepresidente de la Federación de Estudiantes de la UMCE, cuenta que los afectados se encuentran trabajando con un grupo de abogadas de la Universidad de Chile para analizar la situación legal en la que se encuentran actualmente y la viabilidad del recurso de protección.
Además, aclara que en el reciente pleno de la universidad “se decidió volver a clases si se cumplen ciertas garantías, para poder seguir movilizados y avanzando con el movimiento, pero salir de las amenazas con que nos tiene el Gobierno de quitar las becas si no volvemos a clases”.
Mientras tanto, la rectoría y el estudiantado se encuentran discutiendo cuáles serán estas garantías y los estudiantes analizando el recurso de protección que presentarán por no recibir sus becas desde agosto.
Un recurso de protección presentarán algunos alumnos de la Universidad Metropolitana de las Ciencias de la Educación, ya que algunos llevan casi cuatro meses sin recibir las becas y los beneficios que les fueron designados por el Gobierno.
Carolina Jara es estudiante de educación parvularia y afirma que “desde agosto no hemos recibido la beca de alimentación y mantención, las que yo ocupo para comer y para movilizarme”.
Además, Carolina, quien tiene la Beca Bicentenario, dice que “las platas llegaron, pero en la Universidad nos dicen que el Gobierno las tendrá retenidas mientras no se levanta el paro, por lo que yo debería pagar el arancel de noviembre y diciembre para seguir estudiando, lo que es imposible para mí”.
Mariana Rubio vino a estudiar Educación Diferencial a la UMCE desde la VI región y tiene las becas Presidente de la República y Bicentenario. Debido a que a que no recibe la primera desde agosto ha tenido serias dificultades para pagar el arriendo de su pensión y se ha visto obligada a buscar trabajos esporádicos para poder mantenerse en la capital.
“El gobierno está tergiversando el concepto de estudiante regular para quitar los beneficios, porque dice que nosotros, al estar movilizados, ya no somos estudiantes regulares, como si hubiésemos dejado la carrera, lo que no es cierto, porque nosotros nos encontramos en una movilización que responde al contexto nacional y de ninguna manera hemos dejado de asistir a la universidad”, afirma la estudiante provinciana.
Dolor de cabeza
La UMCE ha sido la universidad más “castigada” por el Gobierno en el marco de las movilizaciones de este año, ya que aunque diversos planteles han estado movilizados ninguna había dejado de percibir las becas, incluso las de alimentación, por tanto tiempo. Y es precisamente esta casa de estudios donde cerca de un 80 por ciento de los alumnos estudia gracias a becas.
Los estudiantes barajan la hipótesis de que el “Peda” es un dolor de cabeza para el Gobierno debido a sus históricas reivindicaciones políticas y a sus paros y que, a pesar de esto, sigue siendo el plantel preferido por los alumnos con los mejores puntajes que deciden estudiar pedagogía.
Un ejemplo de esto es que este año los alumnos que obtuvieron altos puntajes en la PSU y que fueron beneficiados por la Beca Vocación de Profesor escogieron por gran mayoría a la Universidad Metropolitana de las Ciencias de la Educación.
Este episodio va de la mano con una abundante oferta de nuevas carreras de pedagogía en las universidades privadas, por lo que la idea del Gobierno de desmantelar la formación de docentes en el sistema público es una hipótesis que cobra sentido entre los estudiantes.
El rector de la UMCE, Jaime Espinoza, ya había declarado que el plantel estaba sufriendo una discriminación por parte del Gobierno cuando se le informó que no recibirían las becas por no recalendarizar el segundo semestre.
“Me parece discriminatorio y una presión indebida que a nuestra universidad se la deje sin los recursos para las becas de alimentación por el sólo hecho de no haber expresado oficialmente un calendario académico para inicio del segundo semestre, que no lo puedo confirmar. He dicho que esto es injusto porque es cosa de ver la realidad en todo el país, donde hay muchas universidades tomadas y en paro, donde es muy difícil prever que la normalización del segundo semestre puede llevarse a cabo. Por qué hacen está discriminación con la UMCE, hemos sido honestos. No podía hacer una declaración certera ante tanta incertidumbre”, afirmó Espinoza.
Claudio Ojeda, vicepresidente de la Federación de Estudiantes de la UMCE, cuenta que los afectados se encuentran trabajando con un grupo de abogadas de la Universidad de Chile para analizar la situación legal en la que se encuentran actualmente y la viabilidad del recurso de protección.
Además, aclara que en el reciente pleno de la universidad “se decidió volver a clases si se cumplen ciertas garantías, para poder seguir movilizados y avanzando con el movimiento, pero salir de las amenazas con que nos tiene el Gobierno de quitar las becas si no volvemos a clases”.
Mientras tanto, la rectoría y el estudiantado se encuentran discutiendo cuáles serán estas garantías y los estudiantes analizando el recurso de protección que presentarán por no recibir sus becas desde agosto.
Un recurso de protección presentarán algunos alumnos de la Universidad Metropolitana de las Ciencias de la Educación, ya que algunos llevan casi cuatro meses sin recibir las becas y los beneficios que les fueron designados por el Gobierno.
Carolina Jara es estudiante de educación parvularia y afirma que “desde agosto no hemos recibido la beca de alimentación y mantención, las que yo ocupo para comer y para movilizarme”.
Además, Carolina, quien tiene la Beca Bicentenario, dice que “las platas llegaron, pero en la Universidad nos dicen que el Gobierno las tendrá retenidas mientras no se levanta el paro, por lo que yo debería pagar el arancel de noviembre y diciembre para seguir estudiando, lo que es imposible para mí”.
Mariana Rubio vino a estudiar Educación Diferencial a la UMCE desde la VI región y tiene las becas Presidente de la República y Bicentenario. Debido a que a que no recibe la primera desde agosto ha tenido serias dificultades para pagar el arriendo de su pensión y se ha visto obligada a buscar trabajos esporádicos para poder mantenerse en la capital.
“El gobierno está tergiversando el concepto de estudiante regular para quitar los beneficios, porque dice que nosotros, al estar movilizados, ya no somos estudiantes regulares, como si hubiésemos dejado la carrera, lo que no es cierto, porque nosotros nos encontramos en una movilización que responde al contexto nacional y de ninguna manera hemos dejado de asistir a la universidad”, afirma la estudiante provinciana.
Dolor de cabeza
La UMCE ha sido la universidad más “castigada” por el Gobierno en el marco de las movilizaciones de este año, ya que aunque diversos planteles han estado movilizados ninguna había dejado de percibir las becas, incluso las de alimentación, por tanto tiempo. Y es precisamente esta casa de estudios donde cerca de un 80 por ciento de los alumnos estudia gracias a becas.
Los estudiantes barajan la hipótesis de que el “Peda” es un dolor de cabeza para el Gobierno debido a sus históricas reivindicaciones políticas y a sus paros y que, a pesar de esto, sigue siendo el plantel preferido por los alumnos con los mejores puntajes que deciden estudiar pedagogía.
Un ejemplo de esto es que este año los alumnos que obtuvieron altos puntajes en la PSU y que fueron beneficiados por la Beca Vocación de Profesor escogieron por gran mayoría a la Universidad Metropolitana de las Ciencias de la Educación.
Este episodio va de la mano con una abundante oferta de nuevas carreras de pedagogía en las universidades privadas, por lo que la idea del Gobierno de desmantelar la formación de docentes en el sistema público es una hipótesis que cobra sentido entre los estudiantes.
El rector de la UMCE, Jaime Espinoza, ya había declarado que el plantel estaba sufriendo una discriminación por parte del Gobierno cuando se le informó que no recibirían las becas por no recalendarizar el segundo semestre.
“Me parece discriminatorio y una presión indebida que a nuestra universidad se la deje sin los recursos para las becas de alimentación por el sólo hecho de no haber expresado oficialmente un calendario académico para inicio del segundo semestre, que no lo puedo confirmar. He dicho que esto es injusto porque es cosa de ver la realidad en todo el país, donde hay muchas universidades tomadas y en paro, donde es muy difícil prever que la normalización del segundo semestre puede llevarse a cabo. Por qué hacen está discriminación con la UMCE, hemos sido honestos. No podía hacer una declaración certera ante tanta incertidumbre”, afirmó Espinoza.
Claudio Ojeda, vicepresidente de la Federación de Estudiantes de la UMCE, cuenta que los afectados se encuentran trabajando con un grupo de abogadas de la Universidad de Chile para analizar la situación legal en la que se encuentran actualmente y la viabilidad del recurso de protección.
Además, aclara que en el reciente pleno de la universidad “se decidió volver a clases si se cumplen ciertas garantías, para poder seguir movilizados y avanzando con el movimiento, pero salir de las amenazas con que nos tiene el Gobierno de quitar las becas si no volvemos a clases”.
Mientras tanto, la rectoría y el estudiantado se encuentran discutiendo cuáles serán estas garantías y los estudiantes analizando el recurso de protección que presentarán por no recibir sus becas desde agosto.
