La golpiza y posterior detención sufrida por el reportero radial Esteban Sánchez cuando defendía al documentalista Rodrigo Casanova, mientras era arrestado el lunes pasado en la funa al homenaje al agente de la DINA Miguel Krassnoff, visibilizó una situación que hace meses vienen denunciando periodistas, reporteros gráficos, camarógrafos y trabajadores de medios alternativos.
Se trata de agresiones por parte de Carabineros a comunicadores sociales cuando ejercen su trabajo en movilizaciones. Reporteros, fotógrafos y camarógrafos reciben golpizas, son objeto de detenciones arbitrarias o de la apropiación del material visual que evidencia actos de violencia contra los manifestantes.
Las organizaciones de los trabajadores de la prensa se han puesto en alerta y trabajan en varias líneas de acción para denunciar estos hechos.
En el terreno legal el camino es muy difícil. En nuestra legislación, cuando un carabinero agrede a un civil la jurisdicción es de la justicia militar, lo que implica grandes posibilidades de parcialidad en los fallos, como denuncia el fotógrafo Víctor Salas, quien hace algunos años fue agredido por un carabinero a caballo, lo que le costó la visión de uno de sus ojos. Un caso que aún no es sancionado
Marcelo Garay, dirigente metropolitano del Colegio de Periodistas, explicó que han recopilado durante estos meses 29 casos de violencia policial contra trabajadores de la prensa que denunciarán ante instancias internacionales, al Poder Legislativo y al Poder Judicial
“A partir de eso se ha hecho una recopilación. En el Colegio de Periodistas, la Unión de Reporteros Gráficos y distintas organizaciones de trabajadores de las comunicaciones se está trabajando en la recopilación de antecedentes que van a ser entregados a organismos internacionales como Amnistía Internacional para esta política sistemática que lo que busca es silenciar lo que está ocurriendo como la violencia policial contra la gente, los abusos policiales, las golpizas a menores de edad, a mujeres y ancianos”, explicó el dirigente de la prensa.
Entre las gestiones que realizarán se cuenta una reunión con el Fiscal Nacional, Sabas Chahuan, lo que según Marcelo Garay persigue sensibilizar al mundo judicial y presionar al Gobierno.
“Lo que se pretende con eso es dejar en evidencia que es una política sistemática y que el gobierno de Sebastián Piñera se hagan cargo de establecer sanciones y de frenar esa actitud que tiene los policías en la calle en el contexto de las movilizaciones”, aseguró Garay.
Los trabajadores de las comunicaciones de nuestro país han recibido el apoyo de organizaciones hermanas de todo el mundo , como las Asociaciones de Reporteros Gráficos de Paraguay, Perú y Argentina.
En el caso particular del periodista radial Esteban Sánchez, dada su connotación pública, el ministro Secretario General de Gobierno, Andrés Chadwick, se contactó con él y con la empresa transnacional para la que trabaja y los recibirá este martes al mediodía en La Moneda.
Sin embargo, la lista de casos es larga. Se pueden consignar la detención arbitraria del fotógrafo Fernando Fiedler, cuyo equipo fue incautado y manipulado -le borraron las fotografías guardadas en la memoria-; la agresión a Rodrigo Cisternas, fotoperiodista del diaro La Tercera en la V Región, golpeado con el chorro de un carro lanza aguas en una manifestación hace un mes; la detención del periodista Luis Narváez de Chilevisión, que fue agredido por un efectivo de Fuerzas Especiales y posteriormente detenido sin mediar provocación alguna.
También están los casos del fotógrafo Cristian Opazo, de la V Región, quien fue golpeado con un proyectil lacrimógeno en su rostro, la detención ilegal del reportero grafico Héctor Retamal Correa de AFP, el 18 de octubre, mientras desempeñaba su tarea profesional fotografiando el arresto de un estudiante dentro de la Universidad Central.
La golpiza y posterior detención sufrida por el reportero radial Esteban Sánchez cuando defendía al documentalista Rodrigo Casanova, mientras era arrestado el lunes pasado en la funa al homenaje al agente de la DINA Miguel Krassnoff, visibilizó una situación que hace meses vienen denunciando periodistas, reporteros gráficos, camarógrafos y trabajadores de medios alternativos.
Se trata de agresiones por parte de Carabineros a comunicadores sociales cuando ejercen su trabajo en movilizaciones. Reporteros, fotógrafos y camarógrafos reciben golpizas, son objeto de detenciones arbitrarias o de la apropiación del material visual que evidencia actos de violencia contra los manifestantes.
Las organizaciones de los trabajadores de la prensa se han puesto en alerta y trabajan en varias líneas de acción para denunciar estos hechos.
En el terreno legal el camino es muy difícil. En nuestra legislación, cuando un carabinero agrede a un civil la jurisdicción es de la justicia militar, lo que implica grandes posibilidades de parcialidad en los fallos, como denuncia el fotógrafo Víctor Salas, quien hace algunos años fue agredido por un carabinero a caballo, lo que le costó la visión de uno de sus ojos. Un caso que aún no es sancionado
Marcelo Garay, dirigente metropolitano del Colegio de Periodistas, explicó que han recopilado durante estos meses 29 casos de violencia policial contra trabajadores de la prensa que denunciarán ante instancias internacionales, al Poder Legislativo y al Poder Judicial
“A partir de eso se ha hecho una recopilación. En el Colegio de Periodistas, la Unión de Reporteros Gráficos y distintas organizaciones de trabajadores de las comunicaciones se está trabajando en la recopilación de antecedentes que van a ser entregados a organismos internacionales como Amnistía Internacional para esta política sistemática que lo que busca es silenciar lo que está ocurriendo como la violencia policial contra la gente, los abusos policiales, las golpizas a menores de edad, a mujeres y ancianos”, explicó el dirigente de la prensa.
Entre las gestiones que realizarán se cuenta una reunión con el Fiscal Nacional, Sabas Chahuan, lo que según Marcelo Garay persigue sensibilizar al mundo judicial y presionar al Gobierno.
“Lo que se pretende con eso es dejar en evidencia que es una política sistemática y que el gobierno de Sebastián Piñera se hagan cargo de establecer sanciones y de frenar esa actitud que tiene los policías en la calle en el contexto de las movilizaciones”, aseguró Garay.
Los trabajadores de las comunicaciones de nuestro país han recibido el apoyo de organizaciones hermanas de todo el mundo , como las Asociaciones de Reporteros Gráficos de Paraguay, Perú y Argentina.
En el caso particular del periodista radial Esteban Sánchez, dada su connotación pública, el ministro Secretario General de Gobierno, Andrés Chadwick, se contactó con él y con la empresa transnacional para la que trabaja y los recibirá este martes al mediodía en La Moneda.
Sin embargo, la lista de casos es larga. Se pueden consignar la detención arbitraria del fotógrafo Fernando Fiedler, cuyo equipo fue incautado y manipulado -le borraron las fotografías guardadas en la memoria-; la agresión a Rodrigo Cisternas, fotoperiodista del diaro La Tercera en la V Región, golpeado con el chorro de un carro lanza aguas en una manifestación hace un mes; la detención del periodista Luis Narváez de Chilevisión, que fue agredido por un efectivo de Fuerzas Especiales y posteriormente detenido sin mediar provocación alguna.
También están los casos del fotógrafo Cristian Opazo, de la V Región, quien fue golpeado con un proyectil lacrimógeno en su rostro, la detención ilegal del reportero grafico Héctor Retamal Correa de AFP, el 18 de octubre, mientras desempeñaba su tarea profesional fotografiando el arresto de un estudiante dentro de la Universidad Central.
La golpiza y posterior detención sufrida por el reportero radial Esteban Sánchez cuando defendía al documentalista Rodrigo Casanova, mientras era arrestado el lunes pasado en la funa al homenaje al agente de la DINA Miguel Krassnoff, visibilizó una situación que hace meses vienen denunciando periodistas, reporteros gráficos, camarógrafos y trabajadores de medios alternativos.
Se trata de agresiones por parte de Carabineros a comunicadores sociales cuando ejercen su trabajo en movilizaciones. Reporteros, fotógrafos y camarógrafos reciben golpizas, son objeto de detenciones arbitrarias o de la apropiación del material visual que evidencia actos de violencia contra los manifestantes.
Las organizaciones de los trabajadores de la prensa se han puesto en alerta y trabajan en varias líneas de acción para denunciar estos hechos.
En el terreno legal el camino es muy difícil. En nuestra legislación, cuando un carabinero agrede a un civil la jurisdicción es de la justicia militar, lo que implica grandes posibilidades de parcialidad en los fallos, como denuncia el fotógrafo Víctor Salas, quien hace algunos años fue agredido por un carabinero a caballo, lo que le costó la visión de uno de sus ojos. Un caso que aún no es sancionado
Marcelo Garay, dirigente metropolitano del Colegio de Periodistas, explicó que han recopilado durante estos meses 29 casos de violencia policial contra trabajadores de la prensa que denunciarán ante instancias internacionales, al Poder Legislativo y al Poder Judicial
“A partir de eso se ha hecho una recopilación. En el Colegio de Periodistas, la Unión de Reporteros Gráficos y distintas organizaciones de trabajadores de las comunicaciones se está trabajando en la recopilación de antecedentes que van a ser entregados a organismos internacionales como Amnistía Internacional para esta política sistemática que lo que busca es silenciar lo que está ocurriendo como la violencia policial contra la gente, los abusos policiales, las golpizas a menores de edad, a mujeres y ancianos”, explicó el dirigente de la prensa.
Entre las gestiones que realizarán se cuenta una reunión con el Fiscal Nacional, Sabas Chahuan, lo que según Marcelo Garay persigue sensibilizar al mundo judicial y presionar al Gobierno.
“Lo que se pretende con eso es dejar en evidencia que es una política sistemática y que el gobierno de Sebastián Piñera se hagan cargo de establecer sanciones y de frenar esa actitud que tiene los policías en la calle en el contexto de las movilizaciones”, aseguró Garay.
Los trabajadores de las comunicaciones de nuestro país han recibido el apoyo de organizaciones hermanas de todo el mundo , como las Asociaciones de Reporteros Gráficos de Paraguay, Perú y Argentina.
En el caso particular del periodista radial Esteban Sánchez, dada su connotación pública, el ministro Secretario General de Gobierno, Andrés Chadwick, se contactó con él y con la empresa transnacional para la que trabaja y los recibirá este martes al mediodía en La Moneda.
Sin embargo, la lista de casos es larga. Se pueden consignar la detención arbitraria del fotógrafo Fernando Fiedler, cuyo equipo fue incautado y manipulado -le borraron las fotografías guardadas en la memoria-; la agresión a Rodrigo Cisternas, fotoperiodista del diaro La Tercera en la V Región, golpeado con el chorro de un carro lanza aguas en una manifestación hace un mes; la detención del periodista Luis Narváez de Chilevisión, que fue agredido por un efectivo de Fuerzas Especiales y posteriormente detenido sin mediar provocación alguna.
También están los casos del fotógrafo Cristian Opazo, de la V Región, quien fue golpeado con un proyectil lacrimógeno en su rostro, la detención ilegal del reportero grafico Héctor Retamal Correa de AFP, el 18 de octubre, mientras desempeñaba su tarea profesional fotografiando el arresto de un estudiante dentro de la Universidad Central.
