Con el fin de dar un alivio tributario, especialmente a los pequeños y medianos empresarios, el Gobierno abrió las puertas a una reforma tributaria. El Presidente Piñera recalcó que esto se planteará “en forma seria, responsable, no improvisada y por eso estamos trabajando hace mucho tiempo en un proyecto de ley que lo vamos a enviar al Congreso más temprano que tarde”.
En reunión con el comité político en La Moneda se acordó un cronograma que comenzará el próximo lunes cuando el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, encabece una serie de reuniones con distintos sectores políticos al respecto. Frente a esto, la oposición ya adelantó que se requerirá recaudar entre seis mil y ocho mil millones de dólares para financiar las demandas sociales.
Frente a esto, el senador de la UDI Hernán Larraín señaló que no van a comenzar a tirar cifras espectaculares por la ventana, porque quieren conocer las consecuencias en el empleo, la educación, la inversión y el desarrollo regional, catalogando de “populista, demagógica y un tanto frívolos los dichos de la Concertación”.
En este sentido, el diputado RN Cristián Monckeberg apuntó a la necesidad de proteger nuestro crecimiento económico y señaló “que tengamos la mayor posibilidad de propuestas y planteamientos, pero actuemos con responsabilidad. Eso significa que tenemos que tener una carga tributaria que permita el desarrollo y crecimiento del país y también la redistribución del ingreso para que los recursos lleguen también a las personas más desposeídas, esa es la clave de una Reforma Tributaria. No podemos echar a perder tampoco el crecimiento del país, porque si a través de una Reforma Tributaria matamos ese desarrollo y el dar mayores cantidades de empleos a las personas, la Reforma Tributaria al final producirá un efecto contrario o negativo”.
Por su parte, el senador PPD, Guido Girardi, indicó que este es el argumento del terror que utilizarán quienes no quieren que se concetreten estos cambios, anunciando también la necesidad de aumentar los impuestos a las grandes empresas alcanzando un 25 por ciento como en los Estados Unidos o Corea.
Para el presidente del Senado es necesario también generar diferenciaciones en los impuestos a las personas y reconsiderar el impuesto que se cobra a las grandes empresas mineras. Criticando con dureza las vergonzosas cifras de desigualdad entregadas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE).
“La única manera de enfrentar la desigualdad es haciendo que las grandes riquezas colaboren al desarrollo del conjunto del país, cosa que no ocurre en Chile. Todos los países, finalmente el ejercicio que han hecho es que los sectores de más altos ingresos aportan más al desarrollo del país. Se ha hecho de Chile una especie de paraíso tributario para los sectores de altos ingresos y para las grandes empresas que tienen utilidades”, señaló el senador PPD.
Girardi indicó que es fundamental modificar el IVA una de las formas en las que se exalta la desigualdad a través de la vía tributaria. En este sentido, el economista socialista Gonzalo Marthner aseguró que a partir de este momento se va a sentir una presión muy fuerte para cosas como igualar los impuestos a las empresas y las personas o que surjan propuestas que no toquen el IVA, afectando a las personas más modestas.
Ambos afirmaron que no quieren acuerdos que perjudiquen a los chilenos, sino un trabajo serio que escuche también a la ciudadanía. Estas son algunas de las reacciones cuando el gobierno ha decidido escuchar a los partidos políticos para elaborar una propuesta que, según adelantan, podría ser presentada en el mes de abril.
Con el fin de dar un alivio tributario, especialmente a los pequeños y medianos empresarios, el Gobierno abrió las puertas a una reforma tributaria. El Presidente Piñera recalcó que esto se planteará “en forma seria, responsable, no improvisada y por eso estamos trabajando hace mucho tiempo en un proyecto de ley que lo vamos a enviar al Congreso más temprano que tarde”.
En reunión con el comité político en La Moneda se acordó un cronograma que comenzará el próximo lunes cuando el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, encabece una serie de reuniones con distintos sectores políticos al respecto. Frente a esto, la oposición ya adelantó que se requerirá recaudar entre seis mil y ocho mil millones de dólares para financiar las demandas sociales.
Frente a esto, el senador de la UDI Hernán Larraín señaló que no van a comenzar a tirar cifras espectaculares por la ventana, porque quieren conocer las consecuencias en el empleo, la educación, la inversión y el desarrollo regional, catalogando de “populista, demagógica y un tanto frívolos los dichos de la Concertación”.
En este sentido, el diputado RN Cristián Monckeberg apuntó a la necesidad de proteger nuestro crecimiento económico y señaló “que tengamos la mayor posibilidad de propuestas y planteamientos, pero actuemos con responsabilidad. Eso significa que tenemos que tener una carga tributaria que permita el desarrollo y crecimiento del país y también la redistribución del ingreso para que los recursos lleguen también a las personas más desposeídas, esa es la clave de una Reforma Tributaria. No podemos echar a perder tampoco el crecimiento del país, porque si a través de una Reforma Tributaria matamos ese desarrollo y el dar mayores cantidades de empleos a las personas, la Reforma Tributaria al final producirá un efecto contrario o negativo”.
Por su parte, el senador PPD, Guido Girardi, indicó que este es el argumento del terror que utilizarán quienes no quieren que se concetreten estos cambios, anunciando también la necesidad de aumentar los impuestos a las grandes empresas alcanzando un 25 por ciento como en los Estados Unidos o Corea.
Para el presidente del Senado es necesario también generar diferenciaciones en los impuestos a las personas y reconsiderar el impuesto que se cobra a las grandes empresas mineras. Criticando con dureza las vergonzosas cifras de desigualdad entregadas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE).
“La única manera de enfrentar la desigualdad es haciendo que las grandes riquezas colaboren al desarrollo del conjunto del país, cosa que no ocurre en Chile. Todos los países, finalmente el ejercicio que han hecho es que los sectores de más altos ingresos aportan más al desarrollo del país. Se ha hecho de Chile una especie de paraíso tributario para los sectores de altos ingresos y para las grandes empresas que tienen utilidades”, señaló el senador PPD.
Girardi indicó que es fundamental modificar el IVA una de las formas en las que se exalta la desigualdad a través de la vía tributaria. En este sentido, el economista socialista Gonzalo Marthner aseguró que a partir de este momento se va a sentir una presión muy fuerte para cosas como igualar los impuestos a las empresas y las personas o que surjan propuestas que no toquen el IVA, afectando a las personas más modestas.
Ambos afirmaron que no quieren acuerdos que perjudiquen a los chilenos, sino un trabajo serio que escuche también a la ciudadanía. Estas son algunas de las reacciones cuando el gobierno ha decidido escuchar a los partidos políticos para elaborar una propuesta que, según adelantan, podría ser presentada en el mes de abril.
Con el fin de dar un alivio tributario, especialmente a los pequeños y medianos empresarios, el Gobierno abrió las puertas a una reforma tributaria. El Presidente Piñera recalcó que esto se planteará “en forma seria, responsable, no improvisada y por eso estamos trabajando hace mucho tiempo en un proyecto de ley que lo vamos a enviar al Congreso más temprano que tarde”.
En reunión con el comité político en La Moneda se acordó un cronograma que comenzará el próximo lunes cuando el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, encabece una serie de reuniones con distintos sectores políticos al respecto. Frente a esto, la oposición ya adelantó que se requerirá recaudar entre seis mil y ocho mil millones de dólares para financiar las demandas sociales.
Frente a esto, el senador de la UDI Hernán Larraín señaló que no van a comenzar a tirar cifras espectaculares por la ventana, porque quieren conocer las consecuencias en el empleo, la educación, la inversión y el desarrollo regional, catalogando de “populista, demagógica y un tanto frívolos los dichos de la Concertación”.
En este sentido, el diputado RN Cristián Monckeberg apuntó a la necesidad de proteger nuestro crecimiento económico y señaló “que tengamos la mayor posibilidad de propuestas y planteamientos, pero actuemos con responsabilidad. Eso significa que tenemos que tener una carga tributaria que permita el desarrollo y crecimiento del país y también la redistribución del ingreso para que los recursos lleguen también a las personas más desposeídas, esa es la clave de una Reforma Tributaria. No podemos echar a perder tampoco el crecimiento del país, porque si a través de una Reforma Tributaria matamos ese desarrollo y el dar mayores cantidades de empleos a las personas, la Reforma Tributaria al final producirá un efecto contrario o negativo”.
Por su parte, el senador PPD, Guido Girardi, indicó que este es el argumento del terror que utilizarán quienes no quieren que se concetreten estos cambios, anunciando también la necesidad de aumentar los impuestos a las grandes empresas alcanzando un 25 por ciento como en los Estados Unidos o Corea.
Para el presidente del Senado es necesario también generar diferenciaciones en los impuestos a las personas y reconsiderar el impuesto que se cobra a las grandes empresas mineras. Criticando con dureza las vergonzosas cifras de desigualdad entregadas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE).
“La única manera de enfrentar la desigualdad es haciendo que las grandes riquezas colaboren al desarrollo del conjunto del país, cosa que no ocurre en Chile. Todos los países, finalmente el ejercicio que han hecho es que los sectores de más altos ingresos aportan más al desarrollo del país. Se ha hecho de Chile una especie de paraíso tributario para los sectores de altos ingresos y para las grandes empresas que tienen utilidades”, señaló el senador PPD.
Girardi indicó que es fundamental modificar el IVA una de las formas en las que se exalta la desigualdad a través de la vía tributaria. En este sentido, el economista socialista Gonzalo Marthner aseguró que a partir de este momento se va a sentir una presión muy fuerte para cosas como igualar los impuestos a las empresas y las personas o que surjan propuestas que no toquen el IVA, afectando a las personas más modestas.
Ambos afirmaron que no quieren acuerdos que perjudiquen a los chilenos, sino un trabajo serio que escuche también a la ciudadanía. Estas son algunas de las reacciones cuando el gobierno ha decidido escuchar a los partidos políticos para elaborar una propuesta que, según adelantan, podría ser presentada en el mes de abril.
