Alarma causaron las últimas investigaciones realizadas por el Ministerio de Salud que develaron niveles de mercurio por sobre los permitidos legalmente en varias de las especies analizadas, principalmente en atunes y albacoras. Información que sólo fue difundida gracias a la ONG Oceana, que la solicitó a través de la Ley de Transparencia.

Frente a esto, el presidente del Senado, Guido Girardi, sostuvo que en Chile existe una fuerte contaminación de los alimentos provocada por plaguicidas y nitratos, por exceso de fertilizantes en frutas y verduras, y por metales pesados en el caso de pescados y mariscos, generando un serio problema de seguridad alimentaria.

“Tenemos un grave problema de seguridad alimentaria. No hay una política seria de regulación de emisiones. En nuestro país se ha permitido la instalación indiscriminada de termoeléctricas, de cementeras, que son muy contaminantes a lo largo del país y de actividades mineras que no cumplen con estándares mínimos de emisiones y eso ha ido generando un proceso sistemático de polución de las napas de agua y de las plataformas marinas”, precisó el parlamentario.

El senador criticó duramente el que el ministerio de Salud y la Seremi del ramo no hayan informado los resultados del estudio. “El Minsal no tiene derecho a no informar, esto es producto de una lógica donde se busca proteger a las empresas contaminantes”, afirmó y añadió que “hay que entender que se está poniendo en riesgo la salud de la población y la posibilidad de que Chile sea potencia alimentaria”.

En esa línea, el experto mundial en nutrición y director del Instituto de Nutrición y Tecnología de Alimentos de la Universidad de Chile, doctor Ricardo Uauy, afirmó que está comprobado que el arsénico y el plomo genera daños neuronales y cánceres. Además aclaró que los pescados más grandes, justamente los más grasos, son los que acumulan mayores porcentajes de metales pesados.

El especialista advirtió que el daño no es algo inmediato y que eso hace la situación más compleja, por lo que instó a monitorear de forma permanente estos productos y manifestó su preocupación.

“En estos momentos Salud está entregando toda la supervisión de esto a Agricultura y la pregunta es si esta cartera está preparada para hacer estos seguimientos y para servir a estos principios. En general la agricultura ha estado más preocupada de cómo se exporta que de la inocuidad. Tenemos una agencia impulsada por la Presidenta Bachelet y ellos deberían estar reportando mensualmente cuál es la carga de mercurio que hay en el mar”, dijo el experto.

Para controlar este tema solicitaron que el mismo Presidente se involucre en el asunto, formando un Consejo Nacional de Alimentación Saludable, además de que el Ministerio de Salud realice un monitoreo permanente, generando una política real de inocuidad alimentaria y protegiendo así a la población.