El Ministro de Hacienda, Felipe Larraín, entregó su cuenta pública 2011 en el Palacio de la Moneda. La rendición se centró básicamente en el crecimiento económico que ha experimentado el país en el período 2010-2011, indicando un crecimiento del 5,9%, cifra que se sitúa por sobre el nivel mundial de un 4,6%.
Sin embargo, el Secretario de Estado reconoció que “la proyección de un crecimiento al cinco fue hecha en septiembre, ahora, tres meses después, el panorama se ve más complejo”.
“Pero voy a tomar las proyecciones de otros, la FMI hace proyecciones de 4% de crecimiento mundial y de 4,7% para Chile; o sea, a pesar de que hay una desaceleración en el mundo, que vamos a sentir, y es imposible que no seamos parte de este proceso, igual vamos a lograr crecer más que el mundo de acuerdo a las proyecciones de las principales organizaciones”, afirmó Larraín.
El ministro de Hacienda aprovechó la ocasión para defender el Sistema Contribuyente del Impuesto Específico (SIPCO) y, pese a las críticas que existen sobre este fondo, que según la ciudadanía no ayuda en las alzas del petróleo y las bencinas, el Secretario de Estado dijo “estar contento con él” desestimando los cuestionamientos.
Otro tema interesante de abordar es el optimismo en materia de trabajo, en donde Larraín aseguró que “si tomamos como punto de partida el trimestre de enero a marzo del 2010, se han creado en términos acumulados 570 mil empleos, y vamos a terminar con una creación de empleos cercana a 300 mil empleos año contra año”.
Pero las buenas estimaciones de empleabilidad del Secretario de Estado son miradas con recelo por los expertos.
El sociólogo de la Fundación Sol, Alexander Sáez, dijo que “no basta simplemente con decir los números de empleo que se han generado, también hay que decir que tipos de empleo se han creado”, ya que “no es lo mismo hablar de un empleo que puede durar un par de horas a la semana, que puede ser por cuenta propia y que no alcanza para dar el sustento mínimo a una familia, versus una persona que trabaja jornada completa y que tiene protección laboral”.
Respecto del Presupuesto 2012, el ministro destacó la aprobación de esta ley afirmando que “este es un Presupuesto que está mirando hacia el futuro y que permite avanzar sobre todo en materias sociales como educación, seguridad, y salud”. Tampoco quedó fuera de la cuenta el reajuste del sector público del 5% aprobado recientemente, en donde Larraín aseguró que antes de Año Nuevo los empleados públicos recibirán los bonos y aguinaldo.
El titular de Hacienda insistió además en la política de administración de la “billetera pública” de los últimos gobiernos asegurando que Chile no gasta todo lo que le entra en materia económica, sino que se proyecta a largo plazo para mantener una economía estable con una deuda pública bruta de menos del 10 por ciento del PIB.
El Ministro de Hacienda, Felipe Larraín, entregó su cuenta pública 2011 en el Palacio de la Moneda. La rendición se centró básicamente en el crecimiento económico que ha experimentado el país en el período 2010-2011, indicando un crecimiento del 5,9%, cifra que se sitúa por sobre el nivel mundial de un 4,6%.
Sin embargo, el Secretario de Estado reconoció que “la proyección de un crecimiento al cinco fue hecha en septiembre, ahora, tres meses después, el panorama se ve más complejo”.
“Pero voy a tomar las proyecciones de otros, la FMI hace proyecciones de 4% de crecimiento mundial y de 4,7% para Chile; o sea, a pesar de que hay una desaceleración en el mundo, que vamos a sentir, y es imposible que no seamos parte de este proceso, igual vamos a lograr crecer más que el mundo de acuerdo a las proyecciones de las principales organizaciones”, afirmó Larraín.
El ministro de Hacienda aprovechó la ocasión para defender el Sistema Contribuyente del Impuesto Específico (SIPCO) y, pese a las críticas que existen sobre este fondo, que según la ciudadanía no ayuda en las alzas del petróleo y las bencinas, el Secretario de Estado dijo “estar contento con él” desestimando los cuestionamientos.
Otro tema interesante de abordar es el optimismo en materia de trabajo, en donde Larraín aseguró que “si tomamos como punto de partida el trimestre de enero a marzo del 2010, se han creado en términos acumulados 570 mil empleos, y vamos a terminar con una creación de empleos cercana a 300 mil empleos año contra año”.
Pero las buenas estimaciones de empleabilidad del Secretario de Estado son miradas con recelo por los expertos.
El sociólogo de la Fundación Sol, Alexander Sáez, dijo que “no basta simplemente con decir los números de empleo que se han generado, también hay que decir que tipos de empleo se han creado”, ya que “no es lo mismo hablar de un empleo que puede durar un par de horas a la semana, que puede ser por cuenta propia y que no alcanza para dar el sustento mínimo a una familia, versus una persona que trabaja jornada completa y que tiene protección laboral”.
Respecto del Presupuesto 2012, el ministro destacó la aprobación de esta ley afirmando que “este es un Presupuesto que está mirando hacia el futuro y que permite avanzar sobre todo en materias sociales como educación, seguridad, y salud”. Tampoco quedó fuera de la cuenta el reajuste del sector público del 5% aprobado recientemente, en donde Larraín aseguró que antes de Año Nuevo los empleados públicos recibirán los bonos y aguinaldo.
El titular de Hacienda insistió además en la política de administración de la “billetera pública” de los últimos gobiernos asegurando que Chile no gasta todo lo que le entra en materia económica, sino que se proyecta a largo plazo para mantener una economía estable con una deuda pública bruta de menos del 10 por ciento del PIB.
El Ministro de Hacienda, Felipe Larraín, entregó su cuenta pública 2011 en el Palacio de la Moneda. La rendición se centró básicamente en el crecimiento económico que ha experimentado el país en el período 2010-2011, indicando un crecimiento del 5,9%, cifra que se sitúa por sobre el nivel mundial de un 4,6%.
Sin embargo, el Secretario de Estado reconoció que “la proyección de un crecimiento al cinco fue hecha en septiembre, ahora, tres meses después, el panorama se ve más complejo”.
“Pero voy a tomar las proyecciones de otros, la FMI hace proyecciones de 4% de crecimiento mundial y de 4,7% para Chile; o sea, a pesar de que hay una desaceleración en el mundo, que vamos a sentir, y es imposible que no seamos parte de este proceso, igual vamos a lograr crecer más que el mundo de acuerdo a las proyecciones de las principales organizaciones”, afirmó Larraín.
El ministro de Hacienda aprovechó la ocasión para defender el Sistema Contribuyente del Impuesto Específico (SIPCO) y, pese a las críticas que existen sobre este fondo, que según la ciudadanía no ayuda en las alzas del petróleo y las bencinas, el Secretario de Estado dijo “estar contento con él” desestimando los cuestionamientos.
Otro tema interesante de abordar es el optimismo en materia de trabajo, en donde Larraín aseguró que “si tomamos como punto de partida el trimestre de enero a marzo del 2010, se han creado en términos acumulados 570 mil empleos, y vamos a terminar con una creación de empleos cercana a 300 mil empleos año contra año”.
Pero las buenas estimaciones de empleabilidad del Secretario de Estado son miradas con recelo por los expertos.
El sociólogo de la Fundación Sol, Alexander Sáez, dijo que “no basta simplemente con decir los números de empleo que se han generado, también hay que decir que tipos de empleo se han creado”, ya que “no es lo mismo hablar de un empleo que puede durar un par de horas a la semana, que puede ser por cuenta propia y que no alcanza para dar el sustento mínimo a una familia, versus una persona que trabaja jornada completa y que tiene protección laboral”.
Respecto del Presupuesto 2012, el ministro destacó la aprobación de esta ley afirmando que “este es un Presupuesto que está mirando hacia el futuro y que permite avanzar sobre todo en materias sociales como educación, seguridad, y salud”. Tampoco quedó fuera de la cuenta el reajuste del sector público del 5% aprobado recientemente, en donde Larraín aseguró que antes de Año Nuevo los empleados públicos recibirán los bonos y aguinaldo.
El titular de Hacienda insistió además en la política de administración de la “billetera pública” de los últimos gobiernos asegurando que Chile no gasta todo lo que le entra en materia económica, sino que se proyecta a largo plazo para mantener una economía estable con una deuda pública bruta de menos del 10 por ciento del PIB.
