El Servicio de Evaluación Ambiental determinó que la empresa Gesterra no puede garantizar que cumplirá con las observaciones que se le hicieron para el proyecto inmobiliario que pretendía desarrollar en el bosque El Panul de La Florida.
La firma pretendía construir 1.302 viviendas en cerca de 93 hectáreas al interior del fundo, pero la resolución del SEA paraliza la iniciativa.
La entidad señaló que “la ausencia de información básica no resulta subsanable mediante adenda” y añadió que “corresponde poner término al procedimiento de evaluación de impacto ambiental del proyecto y hacer devolución de los antecedentes al titular”.
Para la Red por la Defensa de la Precordillera, la determinación “es un triunfo de la comunidad organizada”.
“Durante años hemos construido la argumentación técnica, ambiental y social para la defensa y recuperación del Panul. Agradecemos que esta vez haya sido recogida por los servicios públicos”, indicó la organización.
La Red precisó, sin embargo, que su triunfo será definitivo cuando el Estado compre el terreno para levantar un parque público que proteja la flora y fauna nativa que habita el lugar.
Por su parte, el director del Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (Olca), Lucio Cuenca, explicó que la ley permite que el director regional del SEA ponga término al proceso de evaluación si es que el estudio de impacto ambiental carece de información esencial: “Creo que es la primera vez que se usa este instrumento dentro del proceso de evaluación ambiental y, sin dudas, el caso del bosque El Panul ameritaba una medida como esta. El estudio omite información relevante respecto a especies que están declaradas vulnerables, casi en peligro de extinción”, dijo.