Una querella criminal contra quienes resulten responsables por violencia sexual presentó la Corporación Humanas, ante la agresión cometida por Carabineros contra una estudiante de 14 años del Liceo Darío Salas, en el marco de las movilizaciones estudiantiles.
La menor fue detenida el 28 de octubre del 2011 cuando un grupo de estudiantes secundarios de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES) instaló un campamento en el río Mapocho, hecho que fue impedido por efectivos de la policía uniformada.
“Ella en el fondo está con sus compañeros tratando de quedarse en el lecho del río Mapocho y en ese contexto forcejeando con los funcionarios de las Fuerzas Especiales de Carabineros. A ella la arrastran hacia un sector, se cae -es una niña pequeña de contextura- La agarran cuatro carabineros uno por cada extremidad y en un momento la tiran al suelo y le propinan un par de patadas, una de ellas en la vagina, que le produce una contusión de mayor gravedad y sangramiento por lo que tuvo que quedarse en observación en el hospital y varias patadas en la zona abdominal”, detalló la abogada de Humanas, Patricia Rada.
La abogada detalló que, según el relato de la joven, los uniformados la insultaron por los quejidos que emitió instándola a “comportarse como una adulta”. Incluso, la menor perdió por minutos el conocimiento, por lo que debió ser trasladada desde la comisaría de Ñuñoa al Hospital Calvo Mackenna, donde también ocurrieron irregularidades.
Según indicó la jurista, Carabineros estuvo presente todo el tiempo mientras la joven fue inspeccionada por el médico tratante, y no pudo decir libremente quién la agredió. “Los abusos policiales que se han generado en las movilizaciones, en el caso de las mujeres, tienen una marcada connotación sexual, constitutiva de una violación a los Derechos Humanos de las mujeres consagrados en tratados internacionales”, afirmó Patricia Rada.
Una querella criminal contra quienes resulten responsables por violencia sexual presentó la Corporación Humanas, ante la agresión cometida por Carabineros contra una estudiante de 14 años del Liceo Darío Salas, en el marco de las movilizaciones estudiantiles.
La menor fue detenida el 28 de octubre del 2011 cuando un grupo de estudiantes secundarios de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES) instaló un campamento en el río Mapocho, hecho que fue impedido por efectivos de la policía uniformada.
“Ella en el fondo está con sus compañeros tratando de quedarse en el lecho del río Mapocho y en ese contexto forcejeando con los funcionarios de las Fuerzas Especiales de Carabineros. A ella la arrastran hacia un sector, se cae -es una niña pequeña de contextura- La agarran cuatro carabineros uno por cada extremidad y en un momento la tiran al suelo y le propinan un par de patadas, una de ellas en la vagina, que le produce una contusión de mayor gravedad y sangramiento por lo que tuvo que quedarse en observación en el hospital y varias patadas en la zona abdominal”, detalló la abogada de Humanas, Patricia Rada.
La abogada detalló que, según el relato de la joven, los uniformados la insultaron por los quejidos que emitió instándola a “comportarse como una adulta”. Incluso, la menor perdió por minutos el conocimiento, por lo que debió ser trasladada desde la comisaría de Ñuñoa al Hospital Calvo Mackenna, donde también ocurrieron irregularidades.
Según indicó la jurista, Carabineros estuvo presente todo el tiempo mientras la joven fue inspeccionada por el médico tratante, y no pudo decir libremente quién la agredió. “Los abusos policiales que se han generado en las movilizaciones, en el caso de las mujeres, tienen una marcada connotación sexual, constitutiva de una violación a los Derechos Humanos de las mujeres consagrados en tratados internacionales”, afirmó Patricia Rada.
Una querella criminal contra quienes resulten responsables por violencia sexual presentó la Corporación Humanas, ante la agresión cometida por Carabineros contra una estudiante de 14 años del Liceo Darío Salas, en el marco de las movilizaciones estudiantiles.
La menor fue detenida el 28 de octubre del 2011 cuando un grupo de estudiantes secundarios de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES) instaló un campamento en el río Mapocho, hecho que fue impedido por efectivos de la policía uniformada.
“Ella en el fondo está con sus compañeros tratando de quedarse en el lecho del río Mapocho y en ese contexto forcejeando con los funcionarios de las Fuerzas Especiales de Carabineros. A ella la arrastran hacia un sector, se cae -es una niña pequeña de contextura- La agarran cuatro carabineros uno por cada extremidad y en un momento la tiran al suelo y le propinan un par de patadas, una de ellas en la vagina, que le produce una contusión de mayor gravedad y sangramiento por lo que tuvo que quedarse en observación en el hospital y varias patadas en la zona abdominal”, detalló la abogada de Humanas, Patricia Rada.
La abogada detalló que, según el relato de la joven, los uniformados la insultaron por los quejidos que emitió instándola a “comportarse como una adulta”. Incluso, la menor perdió por minutos el conocimiento, por lo que debió ser trasladada desde la comisaría de Ñuñoa al Hospital Calvo Mackenna, donde también ocurrieron irregularidades.
Según indicó la jurista, Carabineros estuvo presente todo el tiempo mientras la joven fue inspeccionada por el médico tratante, y no pudo decir libremente quién la agredió. “Los abusos policiales que se han generado en las movilizaciones, en el caso de las mujeres, tienen una marcada connotación sexual, constitutiva de una violación a los Derechos Humanos de las mujeres consagrados en tratados internacionales”, afirmó Patricia Rada.
