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Debate por reforma al binominal: ¿Qué es un sistema proporcional corregido?

Aunque con poca recepción en el Ejecutivo, los partidos políticos han presentado distintas propuestas para reformar el binominal, en las que se habla de sistemas “corregidos” o “moderados”. Líderes de partidos y especialistas explican en qué consisten.

Rodrigo Alarcón López

  Viernes 27 de enero 2012 13:00 hrs. 
reformabinominal

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Primero fue el acuerdo entre Renovación Nacional y la Democracia Cristiana. Luego, la propuesta de la Concertación. Ambas apuntan a sustituir el actual sistema electoral binominal por uno “corregido” o “moderado”, respectivamente.  Y aunque el tema ha estado en primera plana del debate político, pocos saben qué significan estas iniciativas.

El presidente de la DC, Ignacio Walker, dijo que “corregido” o moderado” apunta a evitar la excesiva fragmentación del sistema político: “Tenemos que conciliar, por un lado, la representación y proporcionalidad, porque hay una crisis de representación; y por otro lado, la estabilidad y gobernabilidad. Ese es el arte de la política y el equilibrio que tenemos que lograr. Esto se hace evitando la excesiva proliferación de partidos políticos”, señaló.

El senador agregó que “nadie quiere una excesiva proliferación de partidos, pero el sistema binominal se ha transformado en una camisa de fuerza, que conduce a una democracia empatada, donde la mayoría vale lo mismo que la minoría”.

El documento elaborado entre RN y la DC solo se refiere a un “sistema electoral proporcional corregido”, sin profundizar en una explicación. El objetivo, dice, es “ampliar sustancialmente la representatividad” y añade que ambos partidos alentarán “el estudio de la fórmula que resulte más adecuada para dichos fines”.

Respecto a ese punto, el presidente de RN, Carlos Larraín, dejó abiertas las opciones: “Hay muchos sistemas proporcionales. Por ejemplo, hoy tienes un sistema que deja fuera a las facciones chicas y se podría establecer que esas facciones, si se suman en plan nacional, tuvieran un cupo compensatorio. Otra idea es quiénes acceden: ¿basta con tener un uno, tres o cinco por ciento de votos? ¿Qué grado de fraccionamiento se va a aceptar?”, explica.

Tanto la propuesta de la Concertación como también la que presentó el Partido Progresista implican reorganizar el actual sistema de 19 circunscripciones senatoriales y 60 distritos electorales de diputados, para corregir la disparidad en el poder del voto.

Hoy, por ejemplo, el distrito que incluye las comunas de Cerrillos, Estación Central y Maipú elige los mismos dos diputados que la región de Magallanes, que tiene mucha menos población. De este modo, Pepe Auth (PPD) fue electo con casi 50 mil votos y Mónica Zalaquett (UDI) superó los 56 mil, mientras a los diputados de Magallanes, Carolina Goic (DC) y Miodrag Marinovic (IND), les bastó alcanzar 22 y 17 mil sufragios, respectivamente, para obtener los mismos cupos en el Congreso.

Las propuestas de la Concertación y del PRO implican que los distritos y circunscripciones tengan un número de representantes de acuerdo al tamaño de su población, añadiendo una “cifra repartidora”, que hoy se usa en la elección de concejales y significa escoger a los candidatos más votados de las listas mayoritarias (ver detalle en artículo 122 y 123 de la Ley de Municipalidades).

Esto se traduciría en un aumento en el número de parlamentarios, lo que para la cientista política, Marcela Ríos, es la única vía para solucionar la actual desproporción entre distritos: “Es un tema complejo. El sentido común de la gente es ponerse en contra, porque lo encuentran un gasto de dinero innecesario. Pero la alternativa es decirle a Coyhaique, Punta Arenas y Arica, por ejemplo, que ahí vive muy poca gente y no tienen derecho a tener parlamentarios. Y por otro lado, tampoco es justo que el voto de la gente que vive en Maipú hoy valga 150 veces menos que el de la persona que vive en Coyhaique. La única manera de resolverlo es aumentar la cantidad de parlamentarios y entregarle a las regiones donde se concentra la mayor parte de la población una cantidad más razonable de representantes”, explicó.

De todos modos, el académico del Instituto de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile, Jaime Baeza, subrayó que la reforma al sistema electoral no es suficiente: “También tiene que haber un cambio en las atribuciones del Congreso. Por eso, la propuesta de RN y la DC alude más que al sistema electoral. Puedes cambiar el sistema electoral, hacerlo proporcional y con las correcciones para evitar fraccionamiento, pero si no tienen atribuciones, sigue siendo un tema retórico”, afirmó.

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