Unión Europea impone sanciones a familia del Presidente sirio
La esposa de Bashar al Asad, su madre y su cuñada, fueron incluidas en una lista de personas que recibirán sanciones económicas y de movimiento por parte de la Unión Europea (UE). La representante de la diplomacia europea Catherine Ashton, ha declarado que para la Unión Europea es una prioridad detener la violencia en Siria.
Viernes 23 de marzo 2012 17:03 hrs.
La congelación de sus activos en Europa y la imposibilidad de viajar en territorio comunitario son las sanciones a las que serán sometidas 12 personalidades vinculadas al gobierno sirio por parte de la Unión Europea. Se trata de una nueva lista de nombres, pero esta vez llama la atención que se incluya a tres miembros femeninos de la familia de Bachar Al Assad: su madre, su cuñada y su mujer, Hasma.
Destaca sobre todo la inclusión de la primera dama, Hasma, hija de un eminente cardiólogo de Londres, y de una diplomática jubilada, Sahar Otri, que ha sido durante mucho tiempo percibida como el “lado suave” de la dictadura pero que sin embargo, ha sido fuertemente criticada por sus caros y refinados gustos, que satisface visitando las capitales de la moda europea. Aunque en un primer momento los sirios vieron en la primera dama una promesa de modernidad en un país durante mucho tiempo aislado, ahora es duramente criticada por su silencio frente a la represión contra los opositores al régimen que lidera su marido.
En la lista se incluyen además dos entidades por apoyar la violencia del gobierno contra los civiles.
Según la jefa de la diplomacia comunitaria, Catherine Ashton, estas sanciones son importantes porque impiden a ciertos individuos y entidades seguir actuando como acostumbraban y porque envían un “claro mensaje político”.
El ministro de relaciones exteriores Británicos, William Hague, coincide en la importancia de estas medidas y expresó su deseo de “convencer a otros países fuera de la UE para que aumenten sus sanciones”. Por su parte el canciller holandés Uri Rosenthal dijo que Europa busca “animar a la gente que quiere desvincularse del régimen” e impulsar las deserciones.
Ashton destacó la preocupación de la UE por la situación en Siria y dijo que para los europeos “es prioritario detener la violencia” que segón datos de Naciones Unidas deja más de 9 mil víctimas.
La congelación de sus activos en Europa y la imposibilidad de viajar en territorio comunitario son las sanciones a las que serán sometidas 12 personalidades vinculadas al gobierno sirio por parte de la Unión Europea. Se trata de una nueva lista de nombres, pero esta vez llama la atención que se incluya a tres miembros femeninos de la familia de Bachar Al Assad: su madre, su cuñada y su mujer, Hasma.
Destaca sobre todo la inclusión de la primera dama, Hasma, hija de un eminente cardiólogo de Londres, y de una diplomática jubilada, Sahar Otri, que ha sido durante mucho tiempo percibida como el “lado suave” de la dictadura pero que sin embargo, ha sido fuertemente criticada por sus caros y refinados gustos, que satisface visitando las capitales de la moda europea. Aunque en un primer momento los sirios vieron en la primera dama una promesa de modernidad en un país durante mucho tiempo aislado, ahora es duramente criticada por su silencio frente a la represión contra los opositores al régimen que lidera su marido.
En la lista se incluyen además dos entidades por apoyar la violencia del gobierno contra los civiles.
Según la jefa de la diplomacia comunitaria, Catherine Ashton, estas sanciones son importantes porque impiden a ciertos individuos y entidades seguir actuando como acostumbraban y porque envían un “claro mensaje político”.
El ministro de relaciones exteriores Británicos, William Hague, coincide en la importancia de estas medidas y expresó su deseo de “convencer a otros países fuera de la UE para que aumenten sus sanciones”. Por su parte el canciller holandés Uri Rosenthal dijo que Europa busca “animar a la gente que quiere desvincularse del régimen” e impulsar las deserciones.
Ashton destacó la preocupación de la UE por la situación en Siria y dijo que para los europeos “es prioritario detener la violencia” que segón datos de Naciones Unidas deja más de 9 mil víctimas.
La congelación de sus activos en Europa y la imposibilidad de viajar en territorio comunitario son las sanciones a las que serán sometidas 12 personalidades vinculadas al gobierno sirio por parte de la Unión Europea. Se trata de una nueva lista de nombres, pero esta vez llama la atención que se incluya a tres miembros femeninos de la familia de Bachar Al Assad: su madre, su cuñada y su mujer, Hasma.
Destaca sobre todo la inclusión de la primera dama, Hasma, hija de un eminente cardiólogo de Londres, y de una diplomática jubilada, Sahar Otri, que ha sido durante mucho tiempo percibida como el “lado suave” de la dictadura pero que sin embargo, ha sido fuertemente criticada por sus caros y refinados gustos, que satisface visitando las capitales de la moda europea. Aunque en un primer momento los sirios vieron en la primera dama una promesa de modernidad en un país durante mucho tiempo aislado, ahora es duramente criticada por su silencio frente a la represión contra los opositores al régimen que lidera su marido.
En la lista se incluyen además dos entidades por apoyar la violencia del gobierno contra los civiles.
Según la jefa de la diplomacia comunitaria, Catherine Ashton, estas sanciones son importantes porque impiden a ciertos individuos y entidades seguir actuando como acostumbraban y porque envían un “claro mensaje político”.
El ministro de relaciones exteriores Británicos, William Hague, coincide en la importancia de estas medidas y expresó su deseo de “convencer a otros países fuera de la UE para que aumenten sus sanciones”. Por su parte el canciller holandés Uri Rosenthal dijo que Europa busca “animar a la gente que quiere desvincularse del régimen” e impulsar las deserciones.
Ashton destacó la preocupación de la UE por la situación en Siria y dijo que para los europeos “es prioritario detener la violencia” que segón datos de Naciones Unidas deja más de 9 mil víctimas.
