Trabajadores contratistas de Minera Escondida levantaron los bloqueos que mantenían desde la madrugada del jueves en los accesos al yacimiento, el de mayor producción de cobre en el mundo.
Los trabajadores sostuvieron conversaciones durante el jueves con gerentes de la empresa, controlada por la angloaustraliana BHP Billiton, y decidieron deponer las tomas mientras negocian sus demandas.
Éstas se refieren principalmente a un reajuste de las remuneraciones según un sistema de escalafones, mejoras en el bono MEL y un bono de término de conflicto de 8,5 millones de pesos.
El presidente de la Federación de Trabajadores Contratistas de Minera Escondida, Jorge Marín había señalado que existen muchas diferencias entre los trabajadores contratistas y los que pertenecen a la minera: “Los contratistas trabajan en malas condiciones, no hay los implementos de seguridad como corresponde y la manera de vivir aquí arriba no es la más adecuada. Los de Minera Escondida duermen uno por turno y los contratistas duermen cuatro y tienen un baño para ocho personas”, explicó.
Según los trabajadores, la movilización había paralizado completamente la faena e impedía la salida y entrada de funcionarios que debían cumplir turno, mientras que la compañía había afirmado que la producción no sufrió perjuicios.