El ministro de Defensa, Andrés Allamand, explicó a los parlamentarios de la comisión de Derechos Humanos de la Cámara Baja, los alcances de los programas de entrenamiento que miembros de las Fuerzas Armadas realizan en el Fuerte Aguayo, en Concón.
Según señaló el personero de Gobierno, se trata de cursos tácticos para ayuda humanitaria, en una base que ha sido financiada por fondos estadounidenses y “cuyo único objetivo, es tener instalaciones adecuadas para proteger a nuestra gente y a países amigos que, eventualmente, tengan que desplegarse en escenarios futuros”, afirmó.
Las explicaciones del ministro, fueron calificadas como “tranquilizadoras” por el diputado Tucapel Jiménez, especialmente en relación a que son “operaciones para fuerzas de paz”, según manifestó.
“Nos enteramos de que Carabineros e Investigaciones estaban como instructores ahí y no como alumnos, lo que marca una diferencia importante y, como sabíamos, todo es costeado por Estados Unidos. Hay militares de todos los países y no tiene ninguna relación con las movilizaciones sociales que se han desarrollado en el último año en Chile. Me quedé tranquilo y conforme con la declaración que hizo”, afirmó el legislador.
El diputado Gabriel Ascencio, por su parte, aseveró que “en una muy buena intervención, el ministro nos aseguró que lo que allí se realiza, es entrenamiento de fuerzas para trabajar por la paz, en momentos que las Naciones Unidas los convoque”.
Como contraparte, el coordinador de la Comisión Ética contra la Tortura, Hervi Lara, dijo que no aceptan las explicaciones y que la instalación de esta base “es una advertencia al movimiento social que se generó el año pasado y los nuevos que se han ido levantando en regiones”, según indicó.
A esto agregó que la represión contra la ciudadanía ha sido demasiado violenta, por lo que resulta “confuso que exista un entrenamiento de este carácter para las policías”, expresó.
Además, argumentó que la instalación del Fuerte Aguayo tiene directa relación con la expansión de la Escuela de las Américas en varios puntos del continente.
“Lo que acontece es que la Escuela de las Américas se está instalando en los distintos países de América Latina, además se le está dando adiestramiento a las policías en el contexto de una guerra interna en contra de la población para reprimir la movilización social y eso también lo señaló el comandante en jefe del Ejército, quien indicó que la institución tenía que estar preparada para los nuevos escenarios. No sabemos qué escenarios son esos”, comentó Lara.
En la misma línea, la presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, Alicia Lira, se mostró disconforme con las explicaciones del ministro Allamand y afirmó que la instalación de Fuerte Aguayo está dirigida a reprimir las movilizaciones que se han desarrollado en el país.
“No estamos conformes. Seguimos rechazando esta intervención. Que el Comando Sur invierta más de 500 millones de dólares, sabemos que eso tiene un fin y que va dirigido a algo. La forma en que Carabineros participó, sabemos que va a reforzar la política del enemigo interno a raíz de las movilizaciones que se han dado en el país”, sostuvo la dirigente.
Por este motivo que Alicia Lira informó que pedirán una entrevista a la comisión de Derechos Humanos de la Cámara para entregar sus argumentos de rechazo a la base militar.