La Confederación Nacional de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Conapyme), la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) y la Asociación de Exportadores de Manufacturas y Servicios (Asexma) intervinieron en la sesión especial de la comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, con críticas al proyecto de reforma tributaria ingresado por el Gobierno.
Héctor Tejada, presidente de Conapyme, centró sus comentarios en la necesidad de incorporar una tributación diferenciada, escalonada y progresiva en relación a las grandes empresas.
El dirigente reiteró también el llamado a eliminar el impuesto específico a los combustibles, pensando en el gremio de taxistas, colectivos y transporte escolar.
Peticiones que se agregaron a artículos relacionados con el impuesto de timbres y estampillas y los importes de segunda categoría y global complementario, conducentes a proteger un sector que aporta el 70 por ciento de los puestos laborales en el país.
Tejada señaló que “quienes gobiernan y legislan deben poner en el centro de la discusión la mejora de la situación y la calidad de vida de la inmensa mayoría de los chilenos, es un tema de decisiones políticas, de quienes gobiernan y también de quienes están en la oposición. La inequidad, que es la manifestación económica de la desigualdad, debe terminar”.
Roberto Fantuzzi, presidente de Asexma, puso como punto central de su intervención la premisa de que “a nadie le gusta que le suban los impuestos y a todos nos gustaría pagar menos tributos, sin embargo, son necesarios para hacer una inversión en la paz social”.
Además, evidenció los aspectos negativos que tendría una rebaja en el arancel, ya que pondría en peligro los tratados de libre comercio que el país tiene firmados con otras naciones y amenazaría seriamente el ingreso a nuevos mercados.
Otra crítica esgrimida por Fantuzzi es que la reforma tributaria despachada por el Gobierno es “coja”, ya que no se hace cargo de otra demanda ciudadana: la salud.
En esa línea, Fantuzzi declaró que “a veces los aumentos de impuestos traen como consecuencia que la inversión de uno vale más, porque si seguimos con las movilizaciones no cabe ninguna duda que los bienes de nuestras inversiones van a valer mucho menos. Por lo tanto, tenemos que buscar la paz social, que se debe a dos derechos fundamentales en nuestro país: la educación y la salud”.
“Hay que verlo desde la perspectiva de la inversión y no de gasto, porque siempre se habla de gasto y lamentablemente, desde esa perspectiva, no se ve la rentabilidad social. La educación y la salud rinden mucho”, agregó.
El diputado Carlos Montes (PS) valoró la instancia legislativa y la asistencia de las diversas agrupaciones ligadas a la producción y reiteró la visión de la oposición sobre el proyecto de ley.
Por ello, el parlamentario indicó que la comisión de Hacienda tendrá un rol importante en mejorar el texto ingresado por la administración de Sebastián Piñera: “Las críticas fueron muy significativas, en particular de las pymes, donde todos manifiestan que el proyecto los perjudica y no es como dice el texto, que supuestamente los estaría favoreciendo. Los propios empresarios de pymes dicen que no le sirve. Por otro lado, son importantes -en el caso de algunos expertos tributaristas que estuvieron acá- una serie de críticas a los mecanismos y procedimientos administrativos. Ha habido observaciones muy fuertes. En general, hemos oído casi puras críticas al proyecto”, señaló.
Finalmente, Montes enfatizó en refutar el carácter “consensuado” con que el Gobierno catalogó el proyecto, ya que “todos lo han criticado y quienes no, lo han aceptado como una fatalidad”, expresó.
La Confederación Nacional de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Conapyme), la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) y la Asociación de Exportadores de Manufacturas y Servicios (Asexma) intervinieron en la sesión especial de la comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, con críticas al proyecto de reforma tributaria ingresado por el Gobierno.
Héctor Tejada, presidente de Conapyme, centró sus comentarios en la necesidad de incorporar una tributación diferenciada, escalonada y progresiva en relación a las grandes empresas.
El dirigente reiteró también el llamado a eliminar el impuesto específico a los combustibles, pensando en el gremio de taxistas, colectivos y transporte escolar.
Peticiones que se agregaron a artículos relacionados con el impuesto de timbres y estampillas y los importes de segunda categoría y global complementario, conducentes a proteger un sector que aporta el 70 por ciento de los puestos laborales en el país.
Tejada señaló que “quienes gobiernan y legislan deben poner en el centro de la discusión la mejora de la situación y la calidad de vida de la inmensa mayoría de los chilenos, es un tema de decisiones políticas, de quienes gobiernan y también de quienes están en la oposición. La inequidad, que es la manifestación económica de la desigualdad, debe terminar”.
Roberto Fantuzzi, presidente de Asexma, puso como punto central de su intervención la premisa de que “a nadie le gusta que le suban los impuestos y a todos nos gustaría pagar menos tributos, sin embargo, son necesarios para hacer una inversión en la paz social”.
Además, evidenció los aspectos negativos que tendría una rebaja en el arancel, ya que pondría en peligro los tratados de libre comercio que el país tiene firmados con otras naciones y amenazaría seriamente el ingreso a nuevos mercados.
Otra crítica esgrimida por Fantuzzi es que la reforma tributaria despachada por el Gobierno es “coja”, ya que no se hace cargo de otra demanda ciudadana: la salud.
En esa línea, Fantuzzi declaró que “a veces los aumentos de impuestos traen como consecuencia que la inversión de uno vale más, porque si seguimos con las movilizaciones no cabe ninguna duda que los bienes de nuestras inversiones van a valer mucho menos. Por lo tanto, tenemos que buscar la paz social, que se debe a dos derechos fundamentales en nuestro país: la educación y la salud”.
“Hay que verlo desde la perspectiva de la inversión y no de gasto, porque siempre se habla de gasto y lamentablemente, desde esa perspectiva, no se ve la rentabilidad social. La educación y la salud rinden mucho”, agregó.
El diputado Carlos Montes (PS) valoró la instancia legislativa y la asistencia de las diversas agrupaciones ligadas a la producción y reiteró la visión de la oposición sobre el proyecto de ley.
Por ello, el parlamentario indicó que la comisión de Hacienda tendrá un rol importante en mejorar el texto ingresado por la administración de Sebastián Piñera: “Las críticas fueron muy significativas, en particular de las pymes, donde todos manifiestan que el proyecto los perjudica y no es como dice el texto, que supuestamente los estaría favoreciendo. Los propios empresarios de pymes dicen que no le sirve. Por otro lado, son importantes -en el caso de algunos expertos tributaristas que estuvieron acá- una serie de críticas a los mecanismos y procedimientos administrativos. Ha habido observaciones muy fuertes. En general, hemos oído casi puras críticas al proyecto”, señaló.
Finalmente, Montes enfatizó en refutar el carácter “consensuado” con que el Gobierno catalogó el proyecto, ya que “todos lo han criticado y quienes no, lo han aceptado como una fatalidad”, expresó.
La Confederación Nacional de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Conapyme), la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) y la Asociación de Exportadores de Manufacturas y Servicios (Asexma) intervinieron en la sesión especial de la comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, con críticas al proyecto de reforma tributaria ingresado por el Gobierno.
Héctor Tejada, presidente de Conapyme, centró sus comentarios en la necesidad de incorporar una tributación diferenciada, escalonada y progresiva en relación a las grandes empresas.
El dirigente reiteró también el llamado a eliminar el impuesto específico a los combustibles, pensando en el gremio de taxistas, colectivos y transporte escolar.
Peticiones que se agregaron a artículos relacionados con el impuesto de timbres y estampillas y los importes de segunda categoría y global complementario, conducentes a proteger un sector que aporta el 70 por ciento de los puestos laborales en el país.
Tejada señaló que “quienes gobiernan y legislan deben poner en el centro de la discusión la mejora de la situación y la calidad de vida de la inmensa mayoría de los chilenos, es un tema de decisiones políticas, de quienes gobiernan y también de quienes están en la oposición. La inequidad, que es la manifestación económica de la desigualdad, debe terminar”.
Roberto Fantuzzi, presidente de Asexma, puso como punto central de su intervención la premisa de que “a nadie le gusta que le suban los impuestos y a todos nos gustaría pagar menos tributos, sin embargo, son necesarios para hacer una inversión en la paz social”.
Además, evidenció los aspectos negativos que tendría una rebaja en el arancel, ya que pondría en peligro los tratados de libre comercio que el país tiene firmados con otras naciones y amenazaría seriamente el ingreso a nuevos mercados.
Otra crítica esgrimida por Fantuzzi es que la reforma tributaria despachada por el Gobierno es “coja”, ya que no se hace cargo de otra demanda ciudadana: la salud.
En esa línea, Fantuzzi declaró que “a veces los aumentos de impuestos traen como consecuencia que la inversión de uno vale más, porque si seguimos con las movilizaciones no cabe ninguna duda que los bienes de nuestras inversiones van a valer mucho menos. Por lo tanto, tenemos que buscar la paz social, que se debe a dos derechos fundamentales en nuestro país: la educación y la salud”.
“Hay que verlo desde la perspectiva de la inversión y no de gasto, porque siempre se habla de gasto y lamentablemente, desde esa perspectiva, no se ve la rentabilidad social. La educación y la salud rinden mucho”, agregó.
El diputado Carlos Montes (PS) valoró la instancia legislativa y la asistencia de las diversas agrupaciones ligadas a la producción y reiteró la visión de la oposición sobre el proyecto de ley.
Por ello, el parlamentario indicó que la comisión de Hacienda tendrá un rol importante en mejorar el texto ingresado por la administración de Sebastián Piñera: “Las críticas fueron muy significativas, en particular de las pymes, donde todos manifiestan que el proyecto los perjudica y no es como dice el texto, que supuestamente los estaría favoreciendo. Los propios empresarios de pymes dicen que no le sirve. Por otro lado, son importantes -en el caso de algunos expertos tributaristas que estuvieron acá- una serie de críticas a los mecanismos y procedimientos administrativos. Ha habido observaciones muy fuertes. En general, hemos oído casi puras críticas al proyecto”, señaló.
Finalmente, Montes enfatizó en refutar el carácter “consensuado” con que el Gobierno catalogó el proyecto, ya que “todos lo han criticado y quienes no, lo han aceptado como una fatalidad”, expresó.
