El Gobierno ingresó al inicio de esta semana dos paquetes de indicaciones al proyecto de modificación a la Ley General de Pesca, en materia de sustentabilidad de los recursos hidrobiológicos, acceso a la actividad pesquera industrial y artesanal y regulación relativa a la investigación y fiscalización, iniciativa que fue aprobada en general el pasado miércoles.

La diputada independiente Marta Isasi manifestó sus dudas debido a que estas modificaciones facilitarían las licitaciones y la entrada de privados, perjudicando al sector artesanal, además de no prestar resguardos sociales a los trabajadores que podrían perder su fuente laboral con la nueva legislación.

Por otra parte, la diputada del PS Clemira Pacheco acusó que los avances en la tramitación legislativa y los acuerdos conseguidos con la mesa de la pesca artesanal sólo se debe a fraccionamientos al interior de éstos y a que el Gobierno sólo ha negociado con una parte, acordando “a espaldas de los trabajadores” y sin abordar sus principales demandas.

“No hay una acogida real de todos los temas planteados de parte de los trabajadores, de parte de los artesanales, por lo tanto, creo que el ministro quiere sacar una ley a espaldas del sentir del sector pesquero”, aseguró Pacheco.

Cosme Caracciolo, vocero de la Comisión Nacional de Defensa del Patrimonio Pesquero, de todas maneras se opuso a cualquier cambio o aporte a la iniciativa, ya que todo aporte es una agudización de un proyecto que favorece sólo a la gran industria.

Además, acusó al ministro de Economía, Pablo Longueira, de complicar la discusión, ocultando el traspaso del patrimonio pesquero a grupos empresariales.

“Toda indicación, las cosas que está haciendo, por más que adornen, la dirección es la misma respecto de los trabajadores de la industria. Ahí hay una relación entre los privados empleados de la industria y la gran industria pesquera, y el Gobierno al parecer se quiere hacer cargo de los trabajadores con el dinero de todos los chilenos. El ministro Longueira lo que intenta es enredar  la cosa para que la gente no la entienda, pero el tema de fondo es que le están traspasando el patrimonio pesquero de todos los chilenos a un grupo de empresarios de este país”, sostuvo el dirigente.

Las indicaciones incluyen modificaciones a las deducciones que se podrán realizar sobre la cuota global de captura, en lo que se propone un 2 por ciento, tanto para investigación científica y otra cifra igual para imprevistos; y fortalece al Servicio Nacional de Pesca, creando tres nuevas subdirecciones de comercio exterior, pesquería administrativa y jurídica, entre otras indicaciones.

Aún así, Caracciolo aseguró que el proyecto debe ser retirado en su totalidad, ya que no apunta a la sustentabilidad del recurso. “Pedimos que este proyecto sea retirado y haya un proyecto que realmente sea consensuado con los ciudadanos chilenos, con los pescadores artesanales, que se encargue de la sustentabilidad de los recursos pesqueros, porque este proyecto no dice nada en su articulado respecto a hacer sustentable los recursos pesqueros, las especies. Lo que necesitamos es asegurar que hayan peces para futuro, si no hay peces de futuro, la gran industria pesquera y nosotros los pescadores artesanales vamos a desaparecer”, dijo.

El dirigente, finalmente, criticó al ministro Longueira, acusándolo de actuar con desesperación en su apoyo al mundo empresarial pesquero, mientras que respecto a la Concertación, dijo que éstos no debieran “rasgar vestiduras” frente a estas indicaciones si ya respaldaron los acuerdos de la mesa de negociación y aprobaron proyecto en general y la idea de legislar.