Los socialistas y sus más fieles aliados, radicales y soberanistas, obtendrían en la Asamblea Nacional un número de escaños muy superior al mínimo requerido para la mayoría absoluta: entre 312 y 326 escaños, según las primeras estimaciones.
La cifra mínima para la mayoría absoluta en la Cámara Baja del parlamento francés es 289 (de un total de 577).
Esta mayoría absoluta permitirá al presidente Hollande aplicar su programa de gobierno, que preconiza la reforma de las pensiones, el fortalecimiento de la educación y el aumento del salario mínimo, en un momento en que Europa atraviesa una de sus más graves crisis económicas en más de medio siglo.
La Asamblea Nacional quedará compuesta de la siguiente manera, según estas estimaciones:
El Partido Socialista (PS) del presidente Hollande y sus más fieles aliados, radicales, diversas izquierdas y soberanistas, entre 312 y 326 escaños.
La derechista Unión para una Mayoría Presidencial (UMP) del ex presidente Sarkozy y el Nuevo Centro, entre 212 y 234. Los ecologistas de Europa Ecología y los Verdes (EEYV), entre 18 y 24.
El partido de extrema derecha Frente Nacional liderado por Marine Le Pen, entre uno y cuatro. Los comunistas y la ultra izquierda del Frente de Izquierda de Jean-Luc Mélenchon, entre nueve y once. El Modem entre uno y dos.
El Presidente y la Asamblea Nacional tendrán el mismo color político
Los resultados de esta consulta se inscriben en la tradición, ya que desde 1958 todas las elecciones legislativas han dado al presidente elegido o reelegido una mayoría para poner en marcha su programa.
El socialista Hollande fue elegido al Elíseo el pasado 6 de mayo con 51,6% de los votos y podrá contar con una mayoría absoluta en la Asamblea Nacional. Queda por tanto descartada la temible “cohabitación” institucional, es decir, que el recién elegido presidente socialista Hollande tuviera que gobernar con un primer ministro y un gabinete de derecha.
Tal situación se ha producido ya tres veces en el país: dos con un presidente de izquierda (François Mitterrand) y una mayoría parlamentaria de derecha, de 1986 a 1988 y de 1993 a 1995; y una con un presidente de derecha (Jacques Chirac) y una mayoría parlamentaria de izquierda, entre 1997 y 2002.
Resultado histórico para los ecologistas
En caso de que los socialistas y sus más fieles aliados no obtuvieran la mayoría absoluta por sí solos, el Partido Socialista hubiera tenido que gobernar con los ecologistas. Éste no es el caso, lo cual es un motivo adicional de complacencia para los socialistas.
A pesar de que el PS había firmado acuerdos electorales con los ecologistas a finales de 2011, no tener que negociar con ellos dará una mayor libertad al presidente Hollande.
Los ecologistas, por su lado, también tienen un motivo de regocijo, pues al parecer tendrán los diputados necesarios para conformar un “grupo parlamentario”. Para ello, se requieren 15 diputados. Al parecer, los verdes podrían tener hasta 20 diputados. El grupo parlamentario es clave para obtener tiempo de palabra y aspirar a cargos de responsabilidad en las comisiones.
El hecho de tener el “primer grupo parlamentario verde” fue saludado por Cécile Duflot, ministra de Vivienda y secretaria nacional de Europa Ecología-Los Verdes, como una “gran y bella fecha en la historia de los verdes”.
Los socialistas y sus más fieles aliados, radicales y soberanistas, obtendrían en la Asamblea Nacional un número de escaños muy superior al mínimo requerido para la mayoría absoluta: entre 312 y 326 escaños, según las primeras estimaciones.
La cifra mínima para la mayoría absoluta en la Cámara Baja del parlamento francés es 289 (de un total de 577).
Esta mayoría absoluta permitirá al presidente Hollande aplicar su programa de gobierno, que preconiza la reforma de las pensiones, el fortalecimiento de la educación y el aumento del salario mínimo, en un momento en que Europa atraviesa una de sus más graves crisis económicas en más de medio siglo.
La Asamblea Nacional quedará compuesta de la siguiente manera, según estas estimaciones:
El Partido Socialista (PS) del presidente Hollande y sus más fieles aliados, radicales, diversas izquierdas y soberanistas, entre 312 y 326 escaños.
La derechista Unión para una Mayoría Presidencial (UMP) del ex presidente Sarkozy y el Nuevo Centro, entre 212 y 234. Los ecologistas de Europa Ecología y los Verdes (EEYV), entre 18 y 24.
El partido de extrema derecha Frente Nacional liderado por Marine Le Pen, entre uno y cuatro. Los comunistas y la ultra izquierda del Frente de Izquierda de Jean-Luc Mélenchon, entre nueve y once. El Modem entre uno y dos.
El Presidente y la Asamblea Nacional tendrán el mismo color político
Los resultados de esta consulta se inscriben en la tradición, ya que desde 1958 todas las elecciones legislativas han dado al presidente elegido o reelegido una mayoría para poner en marcha su programa.
El socialista Hollande fue elegido al Elíseo el pasado 6 de mayo con 51,6% de los votos y podrá contar con una mayoría absoluta en la Asamblea Nacional. Queda por tanto descartada la temible “cohabitación” institucional, es decir, que el recién elegido presidente socialista Hollande tuviera que gobernar con un primer ministro y un gabinete de derecha.
Tal situación se ha producido ya tres veces en el país: dos con un presidente de izquierda (François Mitterrand) y una mayoría parlamentaria de derecha, de 1986 a 1988 y de 1993 a 1995; y una con un presidente de derecha (Jacques Chirac) y una mayoría parlamentaria de izquierda, entre 1997 y 2002.
Resultado histórico para los ecologistas
En caso de que los socialistas y sus más fieles aliados no obtuvieran la mayoría absoluta por sí solos, el Partido Socialista hubiera tenido que gobernar con los ecologistas. Éste no es el caso, lo cual es un motivo adicional de complacencia para los socialistas.
A pesar de que el PS había firmado acuerdos electorales con los ecologistas a finales de 2011, no tener que negociar con ellos dará una mayor libertad al presidente Hollande.
Los ecologistas, por su lado, también tienen un motivo de regocijo, pues al parecer tendrán los diputados necesarios para conformar un “grupo parlamentario”. Para ello, se requieren 15 diputados. Al parecer, los verdes podrían tener hasta 20 diputados. El grupo parlamentario es clave para obtener tiempo de palabra y aspirar a cargos de responsabilidad en las comisiones.
El hecho de tener el “primer grupo parlamentario verde” fue saludado por Cécile Duflot, ministra de Vivienda y secretaria nacional de Europa Ecología-Los Verdes, como una “gran y bella fecha en la historia de los verdes”.
Los socialistas y sus más fieles aliados, radicales y soberanistas, obtendrían en la Asamblea Nacional un número de escaños muy superior al mínimo requerido para la mayoría absoluta: entre 312 y 326 escaños, según las primeras estimaciones.
La cifra mínima para la mayoría absoluta en la Cámara Baja del parlamento francés es 289 (de un total de 577).
Esta mayoría absoluta permitirá al presidente Hollande aplicar su programa de gobierno, que preconiza la reforma de las pensiones, el fortalecimiento de la educación y el aumento del salario mínimo, en un momento en que Europa atraviesa una de sus más graves crisis económicas en más de medio siglo.
La Asamblea Nacional quedará compuesta de la siguiente manera, según estas estimaciones:
El Partido Socialista (PS) del presidente Hollande y sus más fieles aliados, radicales, diversas izquierdas y soberanistas, entre 312 y 326 escaños.
La derechista Unión para una Mayoría Presidencial (UMP) del ex presidente Sarkozy y el Nuevo Centro, entre 212 y 234. Los ecologistas de Europa Ecología y los Verdes (EEYV), entre 18 y 24.
El partido de extrema derecha Frente Nacional liderado por Marine Le Pen, entre uno y cuatro. Los comunistas y la ultra izquierda del Frente de Izquierda de Jean-Luc Mélenchon, entre nueve y once. El Modem entre uno y dos.
El Presidente y la Asamblea Nacional tendrán el mismo color político
Los resultados de esta consulta se inscriben en la tradición, ya que desde 1958 todas las elecciones legislativas han dado al presidente elegido o reelegido una mayoría para poner en marcha su programa.
El socialista Hollande fue elegido al Elíseo el pasado 6 de mayo con 51,6% de los votos y podrá contar con una mayoría absoluta en la Asamblea Nacional. Queda por tanto descartada la temible “cohabitación” institucional, es decir, que el recién elegido presidente socialista Hollande tuviera que gobernar con un primer ministro y un gabinete de derecha.
Tal situación se ha producido ya tres veces en el país: dos con un presidente de izquierda (François Mitterrand) y una mayoría parlamentaria de derecha, de 1986 a 1988 y de 1993 a 1995; y una con un presidente de derecha (Jacques Chirac) y una mayoría parlamentaria de izquierda, entre 1997 y 2002.
Resultado histórico para los ecologistas
En caso de que los socialistas y sus más fieles aliados no obtuvieran la mayoría absoluta por sí solos, el Partido Socialista hubiera tenido que gobernar con los ecologistas. Éste no es el caso, lo cual es un motivo adicional de complacencia para los socialistas.
A pesar de que el PS había firmado acuerdos electorales con los ecologistas a finales de 2011, no tener que negociar con ellos dará una mayor libertad al presidente Hollande.
Los ecologistas, por su lado, también tienen un motivo de regocijo, pues al parecer tendrán los diputados necesarios para conformar un “grupo parlamentario”. Para ello, se requieren 15 diputados. Al parecer, los verdes podrían tener hasta 20 diputados. El grupo parlamentario es clave para obtener tiempo de palabra y aspirar a cargos de responsabilidad en las comisiones.
El hecho de tener el “primer grupo parlamentario verde” fue saludado por Cécile Duflot, ministra de Vivienda y secretaria nacional de Europa Ecología-Los Verdes, como una “gran y bella fecha en la historia de los verdes”.
