El ministro de Transporte y Telecomunicaciones, Pedro Errázuriz, descartó tomar medidas frente a “la crisis laboral más grande de la historia” en Metro, como la calificó la Federación de Sindicatos de Trabajadores de la empresa.
La organización se agrupó para hacer llegar sus demandas a las comisiones de Trabajo, Transporte y hasta DD.HH. de la Cámara de Diputados.
En el marco de la presentación de la Encuesta Origen y Destino 2012, el ministro Errázuriz y la subsecretaria de la cartera, Gloria Hutt, señalaron que es una materia que le compete al ministerio del Trabajo y a la Dirección del Trabajo, no a su cartera.
“Es una consulta que tiene que hacerle a Metro, son ellos los que están gestionando su empresa y ellos tienen que responder”, dijo Errázuriz.
Gloria Hutt, por su parte, indicó que “nosotros vemos los temas operacionales de los servicios, el tema laboral, no. El tema laboral es de la empresa con sus trabajadores”.
La preocupación manifestada por Eugenio Valenzuela, presidente de la Federación, se centra en el aumento de patologías de salud mental por parte los funcionarios de tren subterráneo.
Tras mantener conversaciones infértiles con la empresa, el dirigente consideró “lamentable” que las autoridades no tomen cartas en el asunto: “Nos hemos sentado a conversar con Metro, pero vemos que no hay acciones concretas, especialmente en lo que tiene que ver con los despidos injustificados. Lamentamos profundamente que (el ministro) pueda dar esa opinión, porque el transporte debe ser considerado como un servicio público, por tanto, un personero de tan alto rango debería tener, entre sus prioridades máximas, el transporte de personas”, dijo.
Eugenio Valenzuela señaló además que no se le está tomando el peso a la crisis de los trabajadores, lo que podría resultar peligroso, pues las demandas laborales podrían agudizarse y gestar nuevos y graves accidentes y heridos.
Por esto, dijo el dirigente, pretenden llegar al Congreso en todas las instancias: Transporte, Trabajo y Derechos Humanos: “Sentimos que están en juego los DD.HH. tanto de los trabajadores como de los pasajeros, porque si esto no tiene atajo, podríamos estar larvando accidentes muy graves para el futuro”, advirtió.
Cabe recordar que este debate se produce paralelamente mientras se discute el aumento del salario mínimo en el Parlamento, el que persigue justamente mejorar las condiciones laborales de los trabajadores chilenos.
El ministro de Transporte y Telecomunicaciones, Pedro Errázuriz, descartó tomar medidas frente a “la crisis laboral más grande de la historia” en Metro, como la calificó la Federación de Sindicatos de Trabajadores de la empresa.
La organización se agrupó para hacer llegar sus demandas a las comisiones de Trabajo, Transporte y hasta DD.HH. de la Cámara de Diputados.
En el marco de la presentación de la Encuesta Origen y Destino 2012, el ministro Errázuriz y la subsecretaria de la cartera, Gloria Hutt, señalaron que es una materia que le compete al ministerio del Trabajo y a la Dirección del Trabajo, no a su cartera.
“Es una consulta que tiene que hacerle a Metro, son ellos los que están gestionando su empresa y ellos tienen que responder”, dijo Errázuriz.
Gloria Hutt, por su parte, indicó que “nosotros vemos los temas operacionales de los servicios, el tema laboral, no. El tema laboral es de la empresa con sus trabajadores”.
La preocupación manifestada por Eugenio Valenzuela, presidente de la Federación, se centra en el aumento de patologías de salud mental por parte los funcionarios de tren subterráneo.
Tras mantener conversaciones infértiles con la empresa, el dirigente consideró “lamentable” que las autoridades no tomen cartas en el asunto: “Nos hemos sentado a conversar con Metro, pero vemos que no hay acciones concretas, especialmente en lo que tiene que ver con los despidos injustificados. Lamentamos profundamente que (el ministro) pueda dar esa opinión, porque el transporte debe ser considerado como un servicio público, por tanto, un personero de tan alto rango debería tener, entre sus prioridades máximas, el transporte de personas”, dijo.
Eugenio Valenzuela señaló además que no se le está tomando el peso a la crisis de los trabajadores, lo que podría resultar peligroso, pues las demandas laborales podrían agudizarse y gestar nuevos y graves accidentes y heridos.
Por esto, dijo el dirigente, pretenden llegar al Congreso en todas las instancias: Transporte, Trabajo y Derechos Humanos: “Sentimos que están en juego los DD.HH. tanto de los trabajadores como de los pasajeros, porque si esto no tiene atajo, podríamos estar larvando accidentes muy graves para el futuro”, advirtió.
Cabe recordar que este debate se produce paralelamente mientras se discute el aumento del salario mínimo en el Parlamento, el que persigue justamente mejorar las condiciones laborales de los trabajadores chilenos.
El ministro de Transporte y Telecomunicaciones, Pedro Errázuriz, descartó tomar medidas frente a “la crisis laboral más grande de la historia” en Metro, como la calificó la Federación de Sindicatos de Trabajadores de la empresa.
La organización se agrupó para hacer llegar sus demandas a las comisiones de Trabajo, Transporte y hasta DD.HH. de la Cámara de Diputados.
En el marco de la presentación de la Encuesta Origen y Destino 2012, el ministro Errázuriz y la subsecretaria de la cartera, Gloria Hutt, señalaron que es una materia que le compete al ministerio del Trabajo y a la Dirección del Trabajo, no a su cartera.
“Es una consulta que tiene que hacerle a Metro, son ellos los que están gestionando su empresa y ellos tienen que responder”, dijo Errázuriz.
Gloria Hutt, por su parte, indicó que “nosotros vemos los temas operacionales de los servicios, el tema laboral, no. El tema laboral es de la empresa con sus trabajadores”.
La preocupación manifestada por Eugenio Valenzuela, presidente de la Federación, se centra en el aumento de patologías de salud mental por parte los funcionarios de tren subterráneo.
Tras mantener conversaciones infértiles con la empresa, el dirigente consideró “lamentable” que las autoridades no tomen cartas en el asunto: “Nos hemos sentado a conversar con Metro, pero vemos que no hay acciones concretas, especialmente en lo que tiene que ver con los despidos injustificados. Lamentamos profundamente que (el ministro) pueda dar esa opinión, porque el transporte debe ser considerado como un servicio público, por tanto, un personero de tan alto rango debería tener, entre sus prioridades máximas, el transporte de personas”, dijo.
Eugenio Valenzuela señaló además que no se le está tomando el peso a la crisis de los trabajadores, lo que podría resultar peligroso, pues las demandas laborales podrían agudizarse y gestar nuevos y graves accidentes y heridos.
Por esto, dijo el dirigente, pretenden llegar al Congreso en todas las instancias: Transporte, Trabajo y Derechos Humanos: “Sentimos que están en juego los DD.HH. tanto de los trabajadores como de los pasajeros, porque si esto no tiene atajo, podríamos estar larvando accidentes muy graves para el futuro”, advirtió.
Cabe recordar que este debate se produce paralelamente mientras se discute el aumento del salario mínimo en el Parlamento, el que persigue justamente mejorar las condiciones laborales de los trabajadores chilenos.
