El presidente de los ecologistas de la región del Biobío, Félix González, exigió a las autoridades la paralización total de las nuevas instalaciones de Bocamina II mientras no tenga el permiso ambiental que corresponde.

La Tercera Sala de la Corte Suprema acogió un recurso de protección presentado por los pescadores, que ordena a la empresa realizar un estudio de impacto ambiental para su proyecto de optimización de la central Bocamina II, que actualmente se encuentra en etapa de marcha blanca.

Félix González hizo hincapié en que “no existe en la ley lo que ellos llaman “marcha blanca”, eso es un invento para burlar la ley, lo que aquí tenemos es una planta que está operando y matando las especies marinas, arrojando aguas muertas al mar, por lo que debe paralizar”.