Después de la solicitud de distintas organizaciones del Valle del Huasco y de la instrucción de Horacio Valenzuela Abarca, obispo de Talca, de quien depende jurídicamente la Congregación del Buen Samaritano, la superiora general, Madre Irene, y el obispo de Copiapó, Gaspar Quintana, confirmaron el rechazo a los 800 millones de pesos que ofrecía la empresa candiense Barrick Gold.
Estos fondos tenían como finalidad la construcción de un recinto de acogida para enfermos y desvalidos en la provincia. Los ciudadanos hicieron un llamado al Estado chileno a hacerse cargo de la situación de los adultos mayores, sobre todo en comunas pobres como ésta.
En este sentido la hermana Ana María de la Pastoral de la Salvaguarda de la Creación sostuvo que “le corresponde al Estado hacerse cargo de todas las situaciones sociales marginales, de toda la pobreza, pero francamente sabemos que él no llega y llegan las instituciones religiosas como las hermanas del Buen Samaritano y otras que cubren muchas necesidades que debiera cubrir. Eso no quiere decir que no puede tener la religión una mirada crítica”.
La religiosa añadió que, pese a la necesidad, los recursos no pueden provenir de una empresa como Barrick, responsable de un proyecto que ha generado tanto daño a las comunidades y al medioambiente como Pascua Lama, que tiene como práctica frecuente ofrecer dinero a sus opositores, como lo ha hecho la Iglesia Católica.
En este sentido, más de 50 organizaciones destacaron la decisión de las hermanas de anteponerse a los sobornos de Barrick y llamaron a todas las agrupaciones a mantener esta postura.
Andrea Cisternas, dirigenta del Movimiento Socioambiental Valle del Huasco, señaló que “al fin y al cabo Barrick está haciendo las cosas debajo de la mesa, las está haciendo mal. Ya todos lo saben, porque esta compra de conciencia quizás no es sólo la conciencia sino también la vida la que se está vendiendo. Esperemos que todas las organizaciones sigan el ejemplo de las hermanas, no aceptando esos dineros y trabajando en conjunto para sustentarnos autónomamente, haciendo actividades culturales que puedan generar más dinero para salir adelante en este gran paso que estamos dando”.
Andrea Cisternas, una de las figuras principales de la lucha contra Agrosuper en Freirina, afirmó que en su localidad todos los jardines infantiles y escuelas adoptaron la medida de rechazar los capitales que está ofreciendo esta empresa criadora de cerdos.
Además, instó a los ciudadanos a mantener activas las distintas demandas sociales y ambientales en la región de Atacama, para impedir así que ésta se convierta en una zona de sacrificio.
Después de la solicitud de distintas organizaciones del Valle del Huasco y de la instrucción de Horacio Valenzuela Abarca, obispo de Talca, de quien depende jurídicamente la Congregación del Buen Samaritano, la superiora general, Madre Irene, y el obispo de Copiapó, Gaspar Quintana, confirmaron el rechazo a los 800 millones de pesos que ofrecía la empresa candiense Barrick Gold.
Estos fondos tenían como finalidad la construcción de un recinto de acogida para enfermos y desvalidos en la provincia. Los ciudadanos hicieron un llamado al Estado chileno a hacerse cargo de la situación de los adultos mayores, sobre todo en comunas pobres como ésta.
En este sentido la hermana Ana María de la Pastoral de la Salvaguarda de la Creación sostuvo que “le corresponde al Estado hacerse cargo de todas las situaciones sociales marginales, de toda la pobreza, pero francamente sabemos que él no llega y llegan las instituciones religiosas como las hermanas del Buen Samaritano y otras que cubren muchas necesidades que debiera cubrir. Eso no quiere decir que no puede tener la religión una mirada crítica”.
La religiosa añadió que, pese a la necesidad, los recursos no pueden provenir de una empresa como Barrick, responsable de un proyecto que ha generado tanto daño a las comunidades y al medioambiente como Pascua Lama, que tiene como práctica frecuente ofrecer dinero a sus opositores, como lo ha hecho la Iglesia Católica.
En este sentido, más de 50 organizaciones destacaron la decisión de las hermanas de anteponerse a los sobornos de Barrick y llamaron a todas las agrupaciones a mantener esta postura.
Andrea Cisternas, dirigenta del Movimiento Socioambiental Valle del Huasco, señaló que “al fin y al cabo Barrick está haciendo las cosas debajo de la mesa, las está haciendo mal. Ya todos lo saben, porque esta compra de conciencia quizás no es sólo la conciencia sino también la vida la que se está vendiendo. Esperemos que todas las organizaciones sigan el ejemplo de las hermanas, no aceptando esos dineros y trabajando en conjunto para sustentarnos autónomamente, haciendo actividades culturales que puedan generar más dinero para salir adelante en este gran paso que estamos dando”.
Andrea Cisternas, una de las figuras principales de la lucha contra Agrosuper en Freirina, afirmó que en su localidad todos los jardines infantiles y escuelas adoptaron la medida de rechazar los capitales que está ofreciendo esta empresa criadora de cerdos.
Además, instó a los ciudadanos a mantener activas las distintas demandas sociales y ambientales en la región de Atacama, para impedir así que ésta se convierta en una zona de sacrificio.
Después de la solicitud de distintas organizaciones del Valle del Huasco y de la instrucción de Horacio Valenzuela Abarca, obispo de Talca, de quien depende jurídicamente la Congregación del Buen Samaritano, la superiora general, Madre Irene, y el obispo de Copiapó, Gaspar Quintana, confirmaron el rechazo a los 800 millones de pesos que ofrecía la empresa candiense Barrick Gold.
Estos fondos tenían como finalidad la construcción de un recinto de acogida para enfermos y desvalidos en la provincia. Los ciudadanos hicieron un llamado al Estado chileno a hacerse cargo de la situación de los adultos mayores, sobre todo en comunas pobres como ésta.
En este sentido la hermana Ana María de la Pastoral de la Salvaguarda de la Creación sostuvo que “le corresponde al Estado hacerse cargo de todas las situaciones sociales marginales, de toda la pobreza, pero francamente sabemos que él no llega y llegan las instituciones religiosas como las hermanas del Buen Samaritano y otras que cubren muchas necesidades que debiera cubrir. Eso no quiere decir que no puede tener la religión una mirada crítica”.
La religiosa añadió que, pese a la necesidad, los recursos no pueden provenir de una empresa como Barrick, responsable de un proyecto que ha generado tanto daño a las comunidades y al medioambiente como Pascua Lama, que tiene como práctica frecuente ofrecer dinero a sus opositores, como lo ha hecho la Iglesia Católica.
En este sentido, más de 50 organizaciones destacaron la decisión de las hermanas de anteponerse a los sobornos de Barrick y llamaron a todas las agrupaciones a mantener esta postura.
Andrea Cisternas, dirigenta del Movimiento Socioambiental Valle del Huasco, señaló que “al fin y al cabo Barrick está haciendo las cosas debajo de la mesa, las está haciendo mal. Ya todos lo saben, porque esta compra de conciencia quizás no es sólo la conciencia sino también la vida la que se está vendiendo. Esperemos que todas las organizaciones sigan el ejemplo de las hermanas, no aceptando esos dineros y trabajando en conjunto para sustentarnos autónomamente, haciendo actividades culturales que puedan generar más dinero para salir adelante en este gran paso que estamos dando”.
Andrea Cisternas, una de las figuras principales de la lucha contra Agrosuper en Freirina, afirmó que en su localidad todos los jardines infantiles y escuelas adoptaron la medida de rechazar los capitales que está ofreciendo esta empresa criadora de cerdos.
Además, instó a los ciudadanos a mantener activas las distintas demandas sociales y ambientales en la región de Atacama, para impedir así que ésta se convierta en una zona de sacrificio.
