Pese a que se especuló con que la Fiscalía Metropolitana Sur había decidido no recurrir de nulidad a la sentencia que absolvió a los seis imputados del “Caso Bombas”, finalmente, presentó el recurso solicitando la repetición del juicio.
Anteriormente, la sentencia del Tercer Tribunal en Lo Penal indicó que “todas las pruebas son especulativas y ninguna ubica a los acusados en los lugares donde detonaron los artefactos explosivos”.
No obstante, luego de reuniones de última hora y llamados desde la Fiscalía Nacional, el fiscal jefe metropolitano sur, Raúl Guzmán decidió presentar el recurso que ya se encontraba redactado.
Dentro de sus fundamentos destaca que “no hubo una correcta explicación de la valoración que se hizo de algunos medios de prueba, por ejemplo, de algunas pruebas testimoniales”.
Para uno de los abogados defensores en este caso, Miguel Soto Piñeiro, no existen antecedentes que permitan reabrir el caso: “Es la confirmación de la audacia y tozudez con que el Ministerio Público ha enfrentado la tramitación de esta investigación. Sin antecedentes formalizó, acusó, persistió en la realización del juicio oral, sin antecedentes realizó el juicio oral y ahora sin fundamentos recurre de nulidad”, aseguró.
Similar opinión tiene otro de los abogados defensores, Mauricio Daza quien indicó que “resulta inexplicable y bastante desafortunado que se pretenda justificar algo que a simple vista resulta injustificable, toda vez que el fallo es lapidario y contundente y no existe una razón técnica ni jurídica que permita sostener seriamente un recurso de nulidad en este caso”, sostuvo.
Con respecto a la negativa del ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, de dar a conocer los correos electrónicos intercambiados con el ex fiscal Alejandro Peña, Daza dijo que el secretario de Estado se arriesga a cometer delito de perjurio.
“Cuando se le solicitan los correos electrónicos, oficios y demás documentos que darían cuenta de comunicaciones entre el señor Hinzpeter y el señor Peña, precisamente para que éste ultimo ingresara a dicha cartera, lo que señala el señor Hinzpeter es que esta información sería secreta o reservada, no negando su existencia. Desde esa perspectiva, si se establece que el señor Hinzpeter le faltó en la verdad a un tribunal oral en lo penal, juramentado de decir verdad, estaríamos frente a indicios que darían cuenta que probablemente se cometió un delito de perjurio”, explicó el abogado.
Ahora será la sala penal de la Corte Suprema la que deberá pronunciarse con respecto a la admisibilidad del recurso, resolución que dada la cantidad de antecedentes en el caso, podría recién conocerse en el mes de noviembre.
Pese a que se especuló con que la Fiscalía Metropolitana Sur había decidido no recurrir de nulidad a la sentencia que absolvió a los seis imputados del “Caso Bombas”, finalmente, presentó el recurso solicitando la repetición del juicio.
Anteriormente, la sentencia del Tercer Tribunal en Lo Penal indicó que “todas las pruebas son especulativas y ninguna ubica a los acusados en los lugares donde detonaron los artefactos explosivos”.
No obstante, luego de reuniones de última hora y llamados desde la Fiscalía Nacional, el fiscal jefe metropolitano sur, Raúl Guzmán decidió presentar el recurso que ya se encontraba redactado.
Dentro de sus fundamentos destaca que “no hubo una correcta explicación de la valoración que se hizo de algunos medios de prueba, por ejemplo, de algunas pruebas testimoniales”.
Para uno de los abogados defensores en este caso, Miguel Soto Piñeiro, no existen antecedentes que permitan reabrir el caso: “Es la confirmación de la audacia y tozudez con que el Ministerio Público ha enfrentado la tramitación de esta investigación. Sin antecedentes formalizó, acusó, persistió en la realización del juicio oral, sin antecedentes realizó el juicio oral y ahora sin fundamentos recurre de nulidad”, aseguró.
Similar opinión tiene otro de los abogados defensores, Mauricio Daza quien indicó que “resulta inexplicable y bastante desafortunado que se pretenda justificar algo que a simple vista resulta injustificable, toda vez que el fallo es lapidario y contundente y no existe una razón técnica ni jurídica que permita sostener seriamente un recurso de nulidad en este caso”, sostuvo.
Con respecto a la negativa del ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, de dar a conocer los correos electrónicos intercambiados con el ex fiscal Alejandro Peña, Daza dijo que el secretario de Estado se arriesga a cometer delito de perjurio.
“Cuando se le solicitan los correos electrónicos, oficios y demás documentos que darían cuenta de comunicaciones entre el señor Hinzpeter y el señor Peña, precisamente para que éste ultimo ingresara a dicha cartera, lo que señala el señor Hinzpeter es que esta información sería secreta o reservada, no negando su existencia. Desde esa perspectiva, si se establece que el señor Hinzpeter le faltó en la verdad a un tribunal oral en lo penal, juramentado de decir verdad, estaríamos frente a indicios que darían cuenta que probablemente se cometió un delito de perjurio”, explicó el abogado.
Ahora será la sala penal de la Corte Suprema la que deberá pronunciarse con respecto a la admisibilidad del recurso, resolución que dada la cantidad de antecedentes en el caso, podría recién conocerse en el mes de noviembre.
Pese a que se especuló con que la Fiscalía Metropolitana Sur había decidido no recurrir de nulidad a la sentencia que absolvió a los seis imputados del “Caso Bombas”, finalmente, presentó el recurso solicitando la repetición del juicio.
Anteriormente, la sentencia del Tercer Tribunal en Lo Penal indicó que “todas las pruebas son especulativas y ninguna ubica a los acusados en los lugares donde detonaron los artefactos explosivos”.
No obstante, luego de reuniones de última hora y llamados desde la Fiscalía Nacional, el fiscal jefe metropolitano sur, Raúl Guzmán decidió presentar el recurso que ya se encontraba redactado.
Dentro de sus fundamentos destaca que “no hubo una correcta explicación de la valoración que se hizo de algunos medios de prueba, por ejemplo, de algunas pruebas testimoniales”.
Para uno de los abogados defensores en este caso, Miguel Soto Piñeiro, no existen antecedentes que permitan reabrir el caso: “Es la confirmación de la audacia y tozudez con que el Ministerio Público ha enfrentado la tramitación de esta investigación. Sin antecedentes formalizó, acusó, persistió en la realización del juicio oral, sin antecedentes realizó el juicio oral y ahora sin fundamentos recurre de nulidad”, aseguró.
Similar opinión tiene otro de los abogados defensores, Mauricio Daza quien indicó que “resulta inexplicable y bastante desafortunado que se pretenda justificar algo que a simple vista resulta injustificable, toda vez que el fallo es lapidario y contundente y no existe una razón técnica ni jurídica que permita sostener seriamente un recurso de nulidad en este caso”, sostuvo.
Con respecto a la negativa del ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, de dar a conocer los correos electrónicos intercambiados con el ex fiscal Alejandro Peña, Daza dijo que el secretario de Estado se arriesga a cometer delito de perjurio.
“Cuando se le solicitan los correos electrónicos, oficios y demás documentos que darían cuenta de comunicaciones entre el señor Hinzpeter y el señor Peña, precisamente para que éste ultimo ingresara a dicha cartera, lo que señala el señor Hinzpeter es que esta información sería secreta o reservada, no negando su existencia. Desde esa perspectiva, si se establece que el señor Hinzpeter le faltó en la verdad a un tribunal oral en lo penal, juramentado de decir verdad, estaríamos frente a indicios que darían cuenta que probablemente se cometió un delito de perjurio”, explicó el abogado.
Ahora será la sala penal de la Corte Suprema la que deberá pronunciarse con respecto a la admisibilidad del recurso, resolución que dada la cantidad de antecedentes en el caso, podría recién conocerse en el mes de noviembre.
