Vecinos por la defensa del Barrio Yungay, efectuaron una protesta en repudio de la decisión del alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, de demoler la única Escuela Especial para niños y niñas con capacidades distintas.
Se trata de la Escuela Especial E-78 Edmundo de Amicis, que albergaba a cerca de 180 alumnos, que se quedaron sin mayores alternativas para continuar sus estudios.
Rosario Carvajal, vocera del Movimiento por la defensa del Barrio Yungay, cree que esto es una maniobra electoral del edil: “Esto se enmarca en una política sistemática de destrucción del patrimonio por parte alcalde Pablo Zalaquett, donde también se afecta la calidad de vida y atenta contra la voluntad de los vecinos. Supuestamente es para construir un consultorio pero hemos investigado y no hay proyecto asociado, ni recursos, ni proyecto arquitectónico, así que esto más bien parece una maniobra política en el marco de las elecciones municipales para demostrar obras pero a costa de nuestro barrio histórico”, dijo.
La dirigente sostuvo que esta decisión sólo perjudica el desarrollo académico de los niños: “Lo lamentable es que aquí no sólo se destruyó un lugar sino que se cerró un proyecto educativo. El municipio dijo en un primer momento que los niños van a ser reubicados pero sabemos cuáles son las políticas de integración en el resto de las escuelas, donde finalmente los niños están prácticamente abandonado, no tienen el apoyo de profesionales, técnicos, especialistas en el tema y son víctimas de la discriminación, porque sabemos los grados de violencia que hay lamentablemente en nuestras escuelas”, sostuvo.
Si bien esta situación no tiene vuelta atrás, los vecinos del barrio Yungay quieren dejar en evidencia el problema que afecta a los niños con capacidades distintas, dado que desde el año 2002 se han cerrado ocho colegios de este tipo en la comuna.
Vecinos por la defensa del Barrio Yungay, efectuaron una protesta en repudio de la decisión del alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, de demoler la única Escuela Especial para niños y niñas con capacidades distintas.
Se trata de la Escuela Especial E-78 Edmundo de Amicis, que albergaba a cerca de 180 alumnos, que se quedaron sin mayores alternativas para continuar sus estudios.
Rosario Carvajal, vocera del Movimiento por la defensa del Barrio Yungay, cree que esto es una maniobra electoral del edil: “Esto se enmarca en una política sistemática de destrucción del patrimonio por parte alcalde Pablo Zalaquett, donde también se afecta la calidad de vida y atenta contra la voluntad de los vecinos. Supuestamente es para construir un consultorio pero hemos investigado y no hay proyecto asociado, ni recursos, ni proyecto arquitectónico, así que esto más bien parece una maniobra política en el marco de las elecciones municipales para demostrar obras pero a costa de nuestro barrio histórico”, dijo.
La dirigente sostuvo que esta decisión sólo perjudica el desarrollo académico de los niños: “Lo lamentable es que aquí no sólo se destruyó un lugar sino que se cerró un proyecto educativo. El municipio dijo en un primer momento que los niños van a ser reubicados pero sabemos cuáles son las políticas de integración en el resto de las escuelas, donde finalmente los niños están prácticamente abandonado, no tienen el apoyo de profesionales, técnicos, especialistas en el tema y son víctimas de la discriminación, porque sabemos los grados de violencia que hay lamentablemente en nuestras escuelas”, sostuvo.
Si bien esta situación no tiene vuelta atrás, los vecinos del barrio Yungay quieren dejar en evidencia el problema que afecta a los niños con capacidades distintas, dado que desde el año 2002 se han cerrado ocho colegios de este tipo en la comuna.
Vecinos por la defensa del Barrio Yungay, efectuaron una protesta en repudio de la decisión del alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, de demoler la única Escuela Especial para niños y niñas con capacidades distintas.
Se trata de la Escuela Especial E-78 Edmundo de Amicis, que albergaba a cerca de 180 alumnos, que se quedaron sin mayores alternativas para continuar sus estudios.
Rosario Carvajal, vocera del Movimiento por la defensa del Barrio Yungay, cree que esto es una maniobra electoral del edil: “Esto se enmarca en una política sistemática de destrucción del patrimonio por parte alcalde Pablo Zalaquett, donde también se afecta la calidad de vida y atenta contra la voluntad de los vecinos. Supuestamente es para construir un consultorio pero hemos investigado y no hay proyecto asociado, ni recursos, ni proyecto arquitectónico, así que esto más bien parece una maniobra política en el marco de las elecciones municipales para demostrar obras pero a costa de nuestro barrio histórico”, dijo.
La dirigente sostuvo que esta decisión sólo perjudica el desarrollo académico de los niños: “Lo lamentable es que aquí no sólo se destruyó un lugar sino que se cerró un proyecto educativo. El municipio dijo en un primer momento que los niños van a ser reubicados pero sabemos cuáles son las políticas de integración en el resto de las escuelas, donde finalmente los niños están prácticamente abandonado, no tienen el apoyo de profesionales, técnicos, especialistas en el tema y son víctimas de la discriminación, porque sabemos los grados de violencia que hay lamentablemente en nuestras escuelas”, sostuvo.
Si bien esta situación no tiene vuelta atrás, los vecinos del barrio Yungay quieren dejar en evidencia el problema que afecta a los niños con capacidades distintas, dado que desde el año 2002 se han cerrado ocho colegios de este tipo en la comuna.
