Con molestia respondieron parlamentarios de oposición al emplazamiento del oficialismo a respaldar el reciente proyecto de reforma tributaria ingresado al Congreso.
En un comité político extraordinario, el día sábado, el presidente de la UDI, Patricio Melero llamó a la Concertación a dejar, una vez al año, el obstruccionismo y respaldar la iniciativa que pretende financiar la reforma educacional.
La bancada del PPD decidió entregar sus votos para la idea de legislar, con la esperanza de incorporar algunas modificaciones en aras de atenuar la injusticia del actual sistema impositivo.
Sin embargo, el diputado Enrique Acorsi explicó a Radio Universidad de Chile que mantendrán su rechazo en particular al contenido de la iniciativa tal como está, sobre todo a las indicaciones que favorecen a los sectores con mayor poder adquisitivo.
“Nosotros estamos diciendo que no vamos a negar la sal y el agua, vamos a apoyar la idea de legislar, pero tampoco vamos a votar a favor porque consideramos que este proyecto es malo. Esto está absolutamente claro y creemos que ha sido el Ejecutivo el que ha entrabado la discusión y no la oposición”, dijo.
Entre las indicaciones que el PPD espera incorporar está la liberación del pago de impuesto a la renta de quienes reciben ingresos entre 500 mil y un millón y medio de pesos, como una forma efectiva de respaldar a la clase media.
En el Partido Socialista son más tajantes al señalar que rechazarán el proyecto porque no es más que un mero maquillaje.
El presidente de esa colectividad y diputado, Osvaldo Andrade, dijo que en este tema el Gobierno vuelve a demostrar que está subordinado a los poderosos.
“El Gobierno le está negando la sal y el agua a los más pobres en Chile, le da sal y agua permanentemente a los empresarios, todo el mundo lo entiende, es un Gobierno de los empresarios. En este país la oposición está en disposición permanente de conversar con el Gobierno, y el Ejecutivo, que es quien más debería interesarle un esfuerzo de esa naturaleza, se niega sistemáticamente a esto. No estamos en condiciones de respaldar una iniciativa así por un tema básico de fondo, no podemos seguir en este país sólo respaldando a los más ricos”, señaló.
Por su parte, Carlos Montes, integrante de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, aseveró que las autoridades crearon la ilusión de una reforma histórica que no es tal.
“Hizo mucho ruido y pocas nueces. Aquí se abrió un debate que supuestamente iba a ser muy significativo pero al final no lo fue. Efectivamente aquí se abre un debate, central para el futuro del país, que tiene que ver con la elección presidencial porque tiene que ver con la desigualdad”, recalcó.
Los parlamentarios socialistas fueron respaldados por el economista, Hernán Frigolet, quien recordó que este ajuste tributario sólo recaudará un monto equivalente al 0,3 por ciento del Producto Interno Bruto y mejora solamente algunos mecanismos para evitar la elusión.
Este lunes está citada la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, para iniciar el debate sobre el proyecto. El martes la discusión debería pasar a la Sala y luego al Senado.
Con molestia respondieron parlamentarios de oposición al emplazamiento del oficialismo a respaldar el reciente proyecto de reforma tributaria ingresado al Congreso.
En un comité político extraordinario, el día sábado, el presidente de la UDI, Patricio Melero llamó a la Concertación a dejar, una vez al año, el obstruccionismo y respaldar la iniciativa que pretende financiar la reforma educacional.
La bancada del PPD decidió entregar sus votos para la idea de legislar, con la esperanza de incorporar algunas modificaciones en aras de atenuar la injusticia del actual sistema impositivo.
Sin embargo, el diputado Enrique Acorsi explicó a Radio Universidad de Chile que mantendrán su rechazo en particular al contenido de la iniciativa tal como está, sobre todo a las indicaciones que favorecen a los sectores con mayor poder adquisitivo.
“Nosotros estamos diciendo que no vamos a negar la sal y el agua, vamos a apoyar la idea de legislar, pero tampoco vamos a votar a favor porque consideramos que este proyecto es malo. Esto está absolutamente claro y creemos que ha sido el Ejecutivo el que ha entrabado la discusión y no la oposición”, dijo.
Entre las indicaciones que el PPD espera incorporar está la liberación del pago de impuesto a la renta de quienes reciben ingresos entre 500 mil y un millón y medio de pesos, como una forma efectiva de respaldar a la clase media.
En el Partido Socialista son más tajantes al señalar que rechazarán el proyecto porque no es más que un mero maquillaje.
El presidente de esa colectividad y diputado, Osvaldo Andrade, dijo que en este tema el Gobierno vuelve a demostrar que está subordinado a los poderosos.
“El Gobierno le está negando la sal y el agua a los más pobres en Chile, le da sal y agua permanentemente a los empresarios, todo el mundo lo entiende, es un Gobierno de los empresarios. En este país la oposición está en disposición permanente de conversar con el Gobierno, y el Ejecutivo, que es quien más debería interesarle un esfuerzo de esa naturaleza, se niega sistemáticamente a esto. No estamos en condiciones de respaldar una iniciativa así por un tema básico de fondo, no podemos seguir en este país sólo respaldando a los más ricos”, señaló.
Por su parte, Carlos Montes, integrante de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, aseveró que las autoridades crearon la ilusión de una reforma histórica que no es tal.
“Hizo mucho ruido y pocas nueces. Aquí se abrió un debate que supuestamente iba a ser muy significativo pero al final no lo fue. Efectivamente aquí se abre un debate, central para el futuro del país, que tiene que ver con la elección presidencial porque tiene que ver con la desigualdad”, recalcó.
Los parlamentarios socialistas fueron respaldados por el economista, Hernán Frigolet, quien recordó que este ajuste tributario sólo recaudará un monto equivalente al 0,3 por ciento del Producto Interno Bruto y mejora solamente algunos mecanismos para evitar la elusión.
Este lunes está citada la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, para iniciar el debate sobre el proyecto. El martes la discusión debería pasar a la Sala y luego al Senado.
Con molestia respondieron parlamentarios de oposición al emplazamiento del oficialismo a respaldar el reciente proyecto de reforma tributaria ingresado al Congreso.
En un comité político extraordinario, el día sábado, el presidente de la UDI, Patricio Melero llamó a la Concertación a dejar, una vez al año, el obstruccionismo y respaldar la iniciativa que pretende financiar la reforma educacional.
La bancada del PPD decidió entregar sus votos para la idea de legislar, con la esperanza de incorporar algunas modificaciones en aras de atenuar la injusticia del actual sistema impositivo.
Sin embargo, el diputado Enrique Acorsi explicó a Radio Universidad de Chile que mantendrán su rechazo en particular al contenido de la iniciativa tal como está, sobre todo a las indicaciones que favorecen a los sectores con mayor poder adquisitivo.
“Nosotros estamos diciendo que no vamos a negar la sal y el agua, vamos a apoyar la idea de legislar, pero tampoco vamos a votar a favor porque consideramos que este proyecto es malo. Esto está absolutamente claro y creemos que ha sido el Ejecutivo el que ha entrabado la discusión y no la oposición”, dijo.
Entre las indicaciones que el PPD espera incorporar está la liberación del pago de impuesto a la renta de quienes reciben ingresos entre 500 mil y un millón y medio de pesos, como una forma efectiva de respaldar a la clase media.
En el Partido Socialista son más tajantes al señalar que rechazarán el proyecto porque no es más que un mero maquillaje.
El presidente de esa colectividad y diputado, Osvaldo Andrade, dijo que en este tema el Gobierno vuelve a demostrar que está subordinado a los poderosos.
“El Gobierno le está negando la sal y el agua a los más pobres en Chile, le da sal y agua permanentemente a los empresarios, todo el mundo lo entiende, es un Gobierno de los empresarios. En este país la oposición está en disposición permanente de conversar con el Gobierno, y el Ejecutivo, que es quien más debería interesarle un esfuerzo de esa naturaleza, se niega sistemáticamente a esto. No estamos en condiciones de respaldar una iniciativa así por un tema básico de fondo, no podemos seguir en este país sólo respaldando a los más ricos”, señaló.
Por su parte, Carlos Montes, integrante de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, aseveró que las autoridades crearon la ilusión de una reforma histórica que no es tal.
“Hizo mucho ruido y pocas nueces. Aquí se abrió un debate que supuestamente iba a ser muy significativo pero al final no lo fue. Efectivamente aquí se abre un debate, central para el futuro del país, que tiene que ver con la elección presidencial porque tiene que ver con la desigualdad”, recalcó.
Los parlamentarios socialistas fueron respaldados por el economista, Hernán Frigolet, quien recordó que este ajuste tributario sólo recaudará un monto equivalente al 0,3 por ciento del Producto Interno Bruto y mejora solamente algunos mecanismos para evitar la elusión.
Este lunes está citada la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, para iniciar el debate sobre el proyecto. El martes la discusión debería pasar a la Sala y luego al Senado.
