Diario y Radio Universidad Chile

Año XVI, 28 de marzo de 2024


Escritorio

¿Qué hacer para enfrentar el aumento de la pobreza en los niños?

Medidas globales en salud, salarios, educación y vivienda, entre otros temas, deben ser implementadas según distintos especialistas para enfrentar los índices de pobreza infantil, que de acuerdo a la última encuesta Casen siguen aumentando como en los últimos seis años. “Los niños no están aislados”, afirman.

Rodrigo Alarcón López

  Martes 7 de agosto 2012 17:15 hrs. 
casen

Compartir en

Los datos de la encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (Casen) 2011 revelaron recientemente que mientras el promedio de la pobreza disminuyó a un 14,4 por ciento respecto a 2009, en la población infantil tuvo un aumento.

El índice se ha incrementado desde 2006, cuando marcó un 20,6 por ciento. En 2009 llegó a 22,1 y en la última medición alcanzó 22,8 por ciento. 1.007.000 niños chilenos son pobres.

Según detalló el Ministerio de Desarrollo Social, uno de cada cuatro niños menores de tres años es pobre y las regiones con peores índices son La Araucanía (32,9%), Biobío (30,8%), Valparaíso (26,6%), Los Ríos (25,7%) y Maule (25%).

Además, la obesidad en la población infantil aumentó un 49 por ciento en los últimos seis años y justamente el quintil más pobre es el más afectado. El sobrepeso en niños menores a cinco años alcanzó un 14 por ciento en la Casen 2011.

Osvaldo Torres, director ejecutivo de la Asociación Chilena Pro Naciones Unidas (Achnu), organización que promueve la protección de los derechos de niños y jóvenes en situación de pobreza y exclusión, recalcó que las estadísticas “no son una novedad”, porque siempre la pobreza infantil es mayor al promedio nacional.

Respecto a las soluciones para revertir la situación, sostuvo que una reforma tributaria que corrija la inequidad y el acceso a mejores puestos de trabajo para los hombres y mujeres más pobres ayudarían, indirectamente, a disminuir la pobreza entre los menores de edad: “Primero, hay que mejorar las condiciones de acceso a puestos de trabajo decentes a mujeres y hombres. No hay que olvidar que Chile tiene una de las tasas más bajas de empleabilidad de mujeres. El esfuerzo principal que habría que hacer es mejorar las condiciones de negociación de la fuerza de trabajo respecto al sector empresarial, para dotar así de salarios decentes a las familias que no tienen acceso a ingresos que le permitan salir de la pobreza”, indicó.

Por su parte, María Emilia Tijoux, académica de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile, cuestionó la forma en que el Gobierno dio a conocer estas cifras -el domingo pasado en el Día del Niño- y que aparezcan en forma “aislada”, para luego “desaparecer” en el día a día.

No obstante, María Emilia Tijoux señaló que las políticas públicas deben poner atención con urgencia en los niños de la calle: “En las políticas de Estado, es necesario que las instituciones no solo acojan o se los lleven, sino que también haya una formación particular a los profesionales que trabajan con niños, a los especialistas, porque ahí también hay una tremenda falla. Que no hubiese más niños en las calles muriendo, prostituyéndose o intentando sobrevivir a como dé lugar, es una cuestión urgente”, dijo.

Finalmente, David Órdenes, director ejecutivo de la Corporación Programa Poblacional La Caleta, también especializada en derechos y protección de menores, enfatizó que las políticas no pueden centrarse simplemente en el Ministerio de Desarrollo Social, sino que deben involucrar a todos los órganos del Estado.

Órdenes señaló que se debe “garantizar una intersectorialidad de todos los ministerios para que estos niños y niñas tengan salud, vivienda, educación, jardines infantiles como se merecen. Y sus madres y padres tengan realmente un trabajo digno, para que no se estén atendiendo solamente a través de un bono una vez al año de 40 mil pesos, sino que realmente tengan lo que necesiten y sean ellos los que realmente respondan por sus hijos e hijas”.

La encuesta Casen estableció además que en Chile viven 1.417.000 niños menores de cinco años, lo que según el ministerio de Desarrollo Social confirma el envejecimiento de los chilenos, ya que en 1990 la cifra sumaba 1.582.000 niños y desde entonces la población total ha aumentado en casi cuatro millones.

Síguenos en