Luego de los  reparos que muchos sectores expresaron contra  los procedimientos represivos de la policía uniformada durante la movilización estudiantil del miércoles, el general director de  Carabineros, Gustavo González,  indicó que  analizarán profundamente sus protocolos de trabajo, sobre todo luego de la quema de tres buses del Transantiago.

“Nosotros vamos a evaluar primero todo lo que ocurrió, después podría dar una idea de autocrítica. Estamos averiguando qué pasó con las fuerzas policiales en ese momento porque no estaban cerca, estaban en otros lugares, con esos 20 focos que teníamos. A lo mejor hubo un despliegue en otro lugar y por eso se aprovechó para hacer ese tipo de hechos. Hablar de una reingeniería… yo creo que sí, hay que cambiar nuestros protocolos de actuación y ver lo que está ocurriendo. Es indudable que hay más violencia y nosotros la hemos podido detectar. Hay focos que hay que suplir con alguna medida especial de carácter policial que, por supuesto, no las puedo revelar aquí”, dijo.

Sin embargo, pese a  las sospechas de montaje que generó la quema de las máquinas en medio de la marcha estudiantil que intentó desplazarse por la Alameda sin autorización de la Intendencia, el Gobierno en pleno salió a rechazar esa tesis y a responsabilizar a los dirigentes estudiantiles  de convocar a marchas ilegales.

Al tema se refirieron, el Presidente Sebastián Piñera, el vocero de Gobierno, Andrés Chadwick,  la intendenta metropolitana, Cecilia Pérez,  y el ministro de transporte, Pedro Pablo Errázuriz, pero la más tajante fue la titular del Trabajo, Evelyn Matheii , que incluso  cuestionó abiertamente el papel de la justicia.

“Es una actitud criminal. Yo espero que los pillen y los lleven a la justicia, pero que no caigan en la misma sala de (Luciano) Pitronello, porque capaz que terminen los jueces felicitando a los niños por estar quemando buses. Realmente aquí necesitamos una actitud más firme. No hay derecho, no hay ningún derecho de poner la vida de estos conductores, que son trabajadores, en riesgo, porque algunos dicen que están luchando por la calidad de la educación”, subrayó.

Los dirigentes estudiantiles, en tanto,  aseguraron que las causas de cualquier hecho violento están vinculadas, en primer término, con la frustración de quienes hace más de un año no reciben respuesta de parte de las autoridades

Dicha aseveración fue refutada por el ministro de educación, Harald Beyer.

“El segundo día, que yo estuve en mi oficina, ellos fueron a dejar una carta y yo los invité a dialogar. Yo los he invitado durante todo el primer semestre y ellos nunca quisieron dialogar con nosotros, nunca tuvieron voluntad, y lo que hoy día escuchamos son imposiciones: ‘retire los proyectos’, ‘no avance en construir una educación de calidad’, eso es lo que estamos escuchando”, recalcó

El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC), Noam Titelman, señaló  que la solución a la violencia es simple.

“Porque a todos nos interesa que la violencia no se perpetúe, que podamos a vivir en una democracia de verdad, donde nuestros problemas sean resueltos en diálogo, hemos hecho un llamado a que el ministro abra sus espacios, a que responda frente al emplazamiento que hemos hecho. No queremos más violencia, queremos transformaciones en nuestro sistema educacional para que sea más justo”, señaló.

En tanto, el vocero de la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones), Cristopher Saravia,  coincidió con las ideas planteadas por el dirigente universitario y llamó al Gobierno a debatir sobre educación.

Por su parte, el senador Guido Girardi (PPD), responsabilizó a La Moneda de no facilitar las instancias de negociación, indicando que esa es la principal causa de que se provoquen hechos violentos.

De todas formas, el parlamentario instó a que se investigue la posibilidad de que hayan ocurrido montajes policiales durante la manifestación.