Incorporación de buses al Transantiago: "No sirve si no se mejoran las condiciones del sistema"

Una nueva flota de 800 buses se integra al Transantiago y según las autoridades “incorporan mejoras en la comodidad interior, mayor seguridad en la conducción y elevados estándares en el control de emisiones contaminantes”. No obstante, dirigentes y expertos aseguraron que la medida es deficiente y poco rigurosa en materia de diseño.

Una nueva flota de 800 buses se integra al Transantiago y según las autoridades “incorporan mejoras en la comodidad interior, mayor seguridad en la conducción y elevados estándares en el control de emisiones contaminantes”. No obstante, dirigentes y expertos aseguraron que la medida es deficiente y poco rigurosa en materia de diseño.

Como un “dolor de cabeza” calificó el Presidente Sebastián Piñera el sistema de transporte público, por lo que recalcó la necesidad de “enfrentarlo y superarlo”.

En esa línea, Piñera señaló que “el Transantiago forma parte de las tareas primordiales de su mandato”, por lo que junto al ministro de la cartera, Pedro Errázuriz, presentaron la incorporación de 800 buses al sistema de transporte, los que forman parte del plan “Renuevo mi micro”.

Además, el mandatario señaló que “las regiones también necesitan un mejor transporte público”, por lo que además, el proyecto “ha renovado 800 buses en las regiones de nuestro país”, manifestando que “al igual que en Santiago, en regiones el proyecto pretende llegar a los mil 400 buses nuevos”.

En tanto, Oscar Olivos, presidente de la Asociación Gremial de Trabajadores del Transporte, criticó la medida oficialista, aclarando que “no se trata de poner más o menos buses, sino que de mejorar las condiciones en que opera el sistema público de pasajeros”.

Olivos recalcó que “el problema es como ordenamos el sistema operativo”, por lo que de no mejorar la calidad del transporte, “más buses sólo incrementará el fracaso del Transantiago”.

“Si tú pones muchos buses nuevos en un sistema que está colapsado, no va a servir de nada. Falta una infraestructura que permita desarrollar un sistema integrado de transporte, que era la idea original del Transantiago. Necesitamos vías exclusivas, zonas pagas exclusivas, para que el pasajero no tenga que estar pagando arriba del bus y evitar la evasión. Si tuviéramos las zonas pagas exclusivas habría un término de la evasión que es lo que hoy más afecta al sistema”, explicó el dirigente.

En esa materia, Sergio Jara, académico de Ingeniería de Transporte de la Universidad de Chile, señaló que “todo aumento de flota se va a traducir en aumento de frecuencias, siempre que el rediseño de troncales y alimentadores sea un poquito más racional de lo que se ha hecho hasta ahora. El aumento de flota tiene que ir en los lugares donde las frecuencias estén más bajas, en los recorridos más largos, donde los tiempos de ciclo son más largos, por lo que se requiere una flota más alta”, dijo.

Respecto del anuncio del Presidente Piñera, consistente en los 370 mil millones de pesos de subsidio permanente al transporte público, aprobados por el Parlamento, el mandatario aclaró que se pretende llegar al mismo número de micros en regiones.

No obstante, Jara, indicó que antes de realizar implementaciones de ese tipo a lo largo del país, es necesario realizar estudios demográficos: “Se tiene que pensar que las dimensiones de Santiago son completamente distintas a las ciudades más grandes del resto del país, donde los diseños son de otro tipo y las formas de operación también”, sostuvo.

“En Santiago hablamos de seis millones de habitantes y en la zona metropolitana de Concepción estamos hablando de un poquito arriba del millón. La dimensión es muy distinta y el tipo de diseño de transporte público es muy distinto, tampoco tienen sistema de metro, por lo que son los buses los que tienen que servir”, añadió el experto.

Si bien Piñera valoró la incorporación de la nueva flota de buses, ya que según él “pondrá en igualdad de condiciones a la ciudad de Santiago y al resto de las regiones”, tanto la sociedad civil y sindical coincidieron que no basta con insertar nuevos buses, sino que rediseñar el sistema de transporte público para no caer en más despilfarros y medidas inocuas.





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