En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Erradicación de la Pobreza, organizaciones de la sociedad civil ligadas a la materia, solicitaron al Ejecutivo elaborar un proyecto de ley que cree un Instituto Nacional de Estadísticas Autónomo para que mida los niveles de pobreza en el país.

La Fundación Para la Superación de la Pobreza, Un Techo Para Chile, el Hogar de Cristo y América Solidaria pidieron, además, ser parte de  esta discusión legislativa.

Las organizaciones concordaron en la necesidad de contar con un organismo de alto nivel técnico, independiente y transparente; con presupuesto propio y autoridades nombradas bajo el sistema de Alta Dirección Pública.

Rodrigo Jordan, presidente de la Fundación para la Superación de la Pobreza, señaló que sólo una entidad autónoma puede resolver las tareas pendientes en la medición de este fenómeno, como la actualización de los datos, entre otras.

“La canasta de satisfactores de necesidades básicas que se encuentra vigente y sin modificación desde 1990, fue construida sobre la base de un patrón de consumo observado en la población del Gran Santiago en 1987 y 1988, es el único instrumento que no ha experimentado adecuaciones desde su origen, pese a las recomendaciones esgrimidas por diversos sectores. El nivel de bienestar de la población no podemos seguir midiéndolo con patrones de otro Chile”, aseguró Jordan.

La directora social del Hogar de Cristo, Verónica Monroy, explicó que otro de los elementos a mejorar en los estudios es la complementariedad de las variables, que dice relación con conocer la pobreza más allá de los ingresos, aclaró.

“Un adulto mayor que vive solo y que recibe una pensión mínima de 78 mil pesos, si vive solo técnicamente no es pobre. Sin embargo, un adulto mayor que está abandonado, que tiene alguna situación de dependencia o deterioro, que lo hace usar pañales o ser dependiente de algún tipo de medicamento, aún cuando reciba esos 78 mil pesos que técnicamente lo dejan fuera de la pobreza, es bien difícil que alguien pueda discutir que ese adulto mayor no es pobre. Eso porque estamos midiendo la pobreza a partir del dinero que tenemos o no tenemos en el bolsillo”, ejemplificó Monroy.

Por su parte, Benito Baranda, presidente de la Fundación América Solidaria, enfatizó que “mientras el país no cuente con una entidad autónoma para medir la pobreza, el Gobierno debe postergar la aplicación de la Encuesta Casen 2012”.

Esto, a raíz de la polémica suscitada por los resultados del sondeo anterior, donde se conocieron presiones desde el ministerio de Desarrollo Social ante la Cepal para que incluyera una variable que terminó por disminuir el índice de pobreza y que, finalmente, llevó a la entidad internacional a desvincularse de la medición.

Benito Baranda agregó que, contrario a lo que el Gobierno está proponiendo, el estudio no se debe ejecutar de forma anual, sino que cada dos años “como se había aplicado históricamente hasta que el Presidente Lagos la corrió a tres”, agregando además que “cada dos años no sirve para orientar políticas públicas, si los gobiernos tan cortos -de cuatro años-, quieren tener medidas para mostrar resultados este no es el instrumento”.

En tanto, diputados de oposición Jorge Burgos (DC) y Carlos Montes (PS), junto al RN Cristián Monckeberg, coincidieron en que no se debe efectuar la medición Casen 2012 mientras no exista una nueva entidad, autónoma del Ejecutivo.

En este sentido, el ministerio de Desarrollo Social ya informó que se encuentra trabajando en un proyecto de ley que crea una nueva institucionalidad “independiente del Gobierno de turno” para que realice las mediciones, pero del que no se tiene mayor detalle.