La Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, el Consejo de Rectores, el Consorcio de Universidades Estatales y la Agrupación de Universidades Regionales presentarán una propuesta común a la subcomisión mixta que revisa las partidas de educación, para “fortalecer la educación pública”, la que tendrá un marcado énfasis en terminar con el financiamiento de instituciones privadas.
Se trata de una serie de demandas relativas al fortalecimiento de la educación pública y que dicen relación con incrementar el Aporte Fiscal Directo en un 10 por ciento, aumentar los aportes basales y regionales y acrecentar los fondos de inversión para la competitividad y los de investigación y desarrollo.
Según detalló el vicepresidente ejecutivo del Consejo de Rectores, Juan Manuel Zolezzi, el petitorio demanda, además, re-equilibrar los fondos para las universidades estatales y privadas.
“Establecer una relación 80 -20 en la participación de la educación pública y privada en el Presupuesto de la Educación Superior. Mayor aporte fiscal a los fondos solidarios de créditos universitarios y por ningún motivo estamos disponibles para aceptar fondos de entregas de recursos del Estado a las universidades privadas para destinarlas a infraestructura. Nosotros no vamos a permitir que los fondos del Estado vayan a apoyar las inmobiliarias de las universidades privadas”, indicó Zolezzi.
El rector de la Universidad de Santiago puntualizó que, junto a la Confech, quieren asegurar el aumento de la oferta de educación pública y los beneficios estudiantiles, por lo que propondrán a la subcomisión mixta que las becas de alimentación, mantención y aranceles de los estudiantes más vulnerables sean reajustadas en montos “razonables”, según precisó.
Por su parte, el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Gabriel Boric, enfatizó que están peleando por más recursos pero “no desde un punto de vista corporativo”.
“A nosotros no nos interesa defender a nuestras universidades en el estado en el que están. Defender la educación pública es apostar a transformarla y, por lo tanto, los nuevos recursos tienen que ir destinados a cambios dentro de los planteles. Eso implica rebaja de los aranceles para avanzar a la gratuidad y terminar de forma definitiva con el lucro en la educación. Acá no se puede y es impresentable que el Estado esté entregando fondos a privados para financiar inmobiliarias que sostienen el ilícito que es el lucro en la educación”, sentenció Boric.
El dirigente estudiantil remarcó que por ahora están enfocados en la discusión presupuestaria pero que el conflicto entre el movimiento estudiantil y el Gobierno “sigue abierto”.
“Hay muchos que quieren que se termine el año, patear las cosas, esconderlas debajo de alfombra y que nada pase, pero las movilizaciones van a seguir. Estamos en periodo de elecciones en las federaciones y una de las grandes discusiones que hay es cómo continuar las movilizaciones. Venimos de un año difícil en que el desafío era mantener abierto el conflicto educacional y creo que eso se logró. El próximo año va a ser clave en el desarrollo del país porque vamos a discutir en el marco de las elecciones presidenciales y ahí el movimiento estudiantil va a jugar un rol fundamental. Sin lugar a dudas, van a haber movilizaciones porque el gobierno ha mantenido una actitud intransigente que no puede continuar”, dijo.
Gabriel Boric añadió que un grupo importante de parlamentarios está de acuerdo con estas demandas, aunque se mostró escéptico en su inclusión y aprobación, afirmando que “ojalá los congresistas no se descuadren, tal y como ocurrió con el informe de lucro o el proyecto de ajuste tributario”.
La Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, el Consejo de Rectores, el Consorcio de Universidades Estatales y la Agrupación de Universidades Regionales presentarán una propuesta común a la subcomisión mixta que revisa las partidas de educación, para “fortalecer la educación pública”, la que tendrá un marcado énfasis en terminar con el financiamiento de instituciones privadas.
Se trata de una serie de demandas relativas al fortalecimiento de la educación pública y que dicen relación con incrementar el Aporte Fiscal Directo en un 10 por ciento, aumentar los aportes basales y regionales y acrecentar los fondos de inversión para la competitividad y los de investigación y desarrollo.
Según detalló el vicepresidente ejecutivo del Consejo de Rectores, Juan Manuel Zolezzi, el petitorio demanda, además, re-equilibrar los fondos para las universidades estatales y privadas.
“Establecer una relación 80 -20 en la participación de la educación pública y privada en el Presupuesto de la Educación Superior. Mayor aporte fiscal a los fondos solidarios de créditos universitarios y por ningún motivo estamos disponibles para aceptar fondos de entregas de recursos del Estado a las universidades privadas para destinarlas a infraestructura. Nosotros no vamos a permitir que los fondos del Estado vayan a apoyar las inmobiliarias de las universidades privadas”, indicó Zolezzi.
El rector de la Universidad de Santiago puntualizó que, junto a la Confech, quieren asegurar el aumento de la oferta de educación pública y los beneficios estudiantiles, por lo que propondrán a la subcomisión mixta que las becas de alimentación, mantención y aranceles de los estudiantes más vulnerables sean reajustadas en montos “razonables”, según precisó.
Por su parte, el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Gabriel Boric, enfatizó que están peleando por más recursos pero “no desde un punto de vista corporativo”.
“A nosotros no nos interesa defender a nuestras universidades en el estado en el que están. Defender la educación pública es apostar a transformarla y, por lo tanto, los nuevos recursos tienen que ir destinados a cambios dentro de los planteles. Eso implica rebaja de los aranceles para avanzar a la gratuidad y terminar de forma definitiva con el lucro en la educación. Acá no se puede y es impresentable que el Estado esté entregando fondos a privados para financiar inmobiliarias que sostienen el ilícito que es el lucro en la educación”, sentenció Boric.
El dirigente estudiantil remarcó que por ahora están enfocados en la discusión presupuestaria pero que el conflicto entre el movimiento estudiantil y el Gobierno “sigue abierto”.
“Hay muchos que quieren que se termine el año, patear las cosas, esconderlas debajo de alfombra y que nada pase, pero las movilizaciones van a seguir. Estamos en periodo de elecciones en las federaciones y una de las grandes discusiones que hay es cómo continuar las movilizaciones. Venimos de un año difícil en que el desafío era mantener abierto el conflicto educacional y creo que eso se logró. El próximo año va a ser clave en el desarrollo del país porque vamos a discutir en el marco de las elecciones presidenciales y ahí el movimiento estudiantil va a jugar un rol fundamental. Sin lugar a dudas, van a haber movilizaciones porque el gobierno ha mantenido una actitud intransigente que no puede continuar”, dijo.
Gabriel Boric añadió que un grupo importante de parlamentarios está de acuerdo con estas demandas, aunque se mostró escéptico en su inclusión y aprobación, afirmando que “ojalá los congresistas no se descuadren, tal y como ocurrió con el informe de lucro o el proyecto de ajuste tributario”.
La Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, el Consejo de Rectores, el Consorcio de Universidades Estatales y la Agrupación de Universidades Regionales presentarán una propuesta común a la subcomisión mixta que revisa las partidas de educación, para “fortalecer la educación pública”, la que tendrá un marcado énfasis en terminar con el financiamiento de instituciones privadas.
Se trata de una serie de demandas relativas al fortalecimiento de la educación pública y que dicen relación con incrementar el Aporte Fiscal Directo en un 10 por ciento, aumentar los aportes basales y regionales y acrecentar los fondos de inversión para la competitividad y los de investigación y desarrollo.
Según detalló el vicepresidente ejecutivo del Consejo de Rectores, Juan Manuel Zolezzi, el petitorio demanda, además, re-equilibrar los fondos para las universidades estatales y privadas.
“Establecer una relación 80 -20 en la participación de la educación pública y privada en el Presupuesto de la Educación Superior. Mayor aporte fiscal a los fondos solidarios de créditos universitarios y por ningún motivo estamos disponibles para aceptar fondos de entregas de recursos del Estado a las universidades privadas para destinarlas a infraestructura. Nosotros no vamos a permitir que los fondos del Estado vayan a apoyar las inmobiliarias de las universidades privadas”, indicó Zolezzi.
El rector de la Universidad de Santiago puntualizó que, junto a la Confech, quieren asegurar el aumento de la oferta de educación pública y los beneficios estudiantiles, por lo que propondrán a la subcomisión mixta que las becas de alimentación, mantención y aranceles de los estudiantes más vulnerables sean reajustadas en montos “razonables”, según precisó.
Por su parte, el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Gabriel Boric, enfatizó que están peleando por más recursos pero “no desde un punto de vista corporativo”.
“A nosotros no nos interesa defender a nuestras universidades en el estado en el que están. Defender la educación pública es apostar a transformarla y, por lo tanto, los nuevos recursos tienen que ir destinados a cambios dentro de los planteles. Eso implica rebaja de los aranceles para avanzar a la gratuidad y terminar de forma definitiva con el lucro en la educación. Acá no se puede y es impresentable que el Estado esté entregando fondos a privados para financiar inmobiliarias que sostienen el ilícito que es el lucro en la educación”, sentenció Boric.
El dirigente estudiantil remarcó que por ahora están enfocados en la discusión presupuestaria pero que el conflicto entre el movimiento estudiantil y el Gobierno “sigue abierto”.
“Hay muchos que quieren que se termine el año, patear las cosas, esconderlas debajo de alfombra y que nada pase, pero las movilizaciones van a seguir. Estamos en periodo de elecciones en las federaciones y una de las grandes discusiones que hay es cómo continuar las movilizaciones. Venimos de un año difícil en que el desafío era mantener abierto el conflicto educacional y creo que eso se logró. El próximo año va a ser clave en el desarrollo del país porque vamos a discutir en el marco de las elecciones presidenciales y ahí el movimiento estudiantil va a jugar un rol fundamental. Sin lugar a dudas, van a haber movilizaciones porque el gobierno ha mantenido una actitud intransigente que no puede continuar”, dijo.
Gabriel Boric añadió que un grupo importante de parlamentarios está de acuerdo con estas demandas, aunque se mostró escéptico en su inclusión y aprobación, afirmando que “ojalá los congresistas no se descuadren, tal y como ocurrió con el informe de lucro o el proyecto de ajuste tributario”.
