Turnos de hasta 10 horas, poco tiempo de descanso y escasos días libres son algunas de las principales causas de la sobrecarga laboral que los gendarmes de Valparaíso acusan sufrir.
Según indicó el presidente en la región de Valparaíso de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), Luis Vásquez, a ello se suma la falta de personal, lo que ha llevado a una “situación crítica” que ha traído fuertes consecuencias.
“Como secuela de los turnos inhumanos, de la gran cantidad de horas que trabaja el personal, al no tener la posibilidad de descanso, han aumentado gradualmente las enfermedades psicológicas por estrés laboral y la tasa de suicidios de nuestro personal de Gendarmerías. En dos años llevamos 30 suicidios a nivel nacional y más de 40 intentos de suicidios que no han sido atendidos por el nivel central”, detalló el dirigente.
En este sentido, para Luis Vásquez, hay un responsable directo por no implementar políticas de prevención y mejoramiento de la gestión al interior de los penales.
“Hay un principio fundamental en derecho administrativo que la responsabilidad no se delega. El responsable de lo que está sucediendo en Gendamería es la autoridad máxima, el director Luis Masferrer, en cuanto a la dotación de personal, a proveer de los recursos necesarios o redistribuir el personal que se encuentra ya en el servicio para la atención oportuna, en una lógica de prevención hacia el personal de Gendarmería”, denunció Vásquez.
Para evitar nuevos intentos de suicidio, los trabajadores de La Ligua, Petorca, Quillota, San Felipe, Los Andes, San Antonio, Casa Blanca, Limache y Valparaíso se declararon en “estado de alerta”, a la espera que el director de la institución atienda sus demandas.
El petitorio de los funcionarios se basa en el aumento en 350 funcionarios la plantilla total de la región, mejorar los horarios y establecer una política de personal, con psicólogos y asistentes sociales al servicio de los funcionarios.
Boris González, dirigente de Santiago Sur de Anfup, que alberga a la ex Penitenciaria, afirmó que los suicidios y la gran cantidad de licencias médicas “no obedecen sólo a las deficientes condiciones de trabajo”, pues también tendrían que ver “con las políticas de traslado de personal, especialmente en lo que tiene que ver con que aquí un funcionario que egresa de la escuela, que vive en Arica, lo están destinando a Punta Arenas. Parte con un asunto de criterio, el desarraigo familiar incide en el quiebre y en que se produzcan ciertos fenómenos como los suicidios, se destruyen familias por este tipo de manejo institucional”, sostuvo.
Los funcionarios de Valparaíso anunciaron que comenzarán una ronda de socialización de sus demandas con las autoridades de Gendarmería, parlamentarios y el Ejecutivo y que, de no mediar solución, iniciarán movilizaciones.
Turnos de hasta 10 horas, poco tiempo de descanso y escasos días libres son algunas de las principales causas de la sobrecarga laboral que los gendarmes de Valparaíso acusan sufrir.
Según indicó el presidente en la región de Valparaíso de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), Luis Vásquez, a ello se suma la falta de personal, lo que ha llevado a una “situación crítica” que ha traído fuertes consecuencias.
“Como secuela de los turnos inhumanos, de la gran cantidad de horas que trabaja el personal, al no tener la posibilidad de descanso, han aumentado gradualmente las enfermedades psicológicas por estrés laboral y la tasa de suicidios de nuestro personal de Gendarmerías. En dos años llevamos 30 suicidios a nivel nacional y más de 40 intentos de suicidios que no han sido atendidos por el nivel central”, detalló el dirigente.
En este sentido, para Luis Vásquez, hay un responsable directo por no implementar políticas de prevención y mejoramiento de la gestión al interior de los penales.
“Hay un principio fundamental en derecho administrativo que la responsabilidad no se delega. El responsable de lo que está sucediendo en Gendamería es la autoridad máxima, el director Luis Masferrer, en cuanto a la dotación de personal, a proveer de los recursos necesarios o redistribuir el personal que se encuentra ya en el servicio para la atención oportuna, en una lógica de prevención hacia el personal de Gendarmería”, denunció Vásquez.
Para evitar nuevos intentos de suicidio, los trabajadores de La Ligua, Petorca, Quillota, San Felipe, Los Andes, San Antonio, Casa Blanca, Limache y Valparaíso se declararon en “estado de alerta”, a la espera que el director de la institución atienda sus demandas.
El petitorio de los funcionarios se basa en el aumento en 350 funcionarios la plantilla total de la región, mejorar los horarios y establecer una política de personal, con psicólogos y asistentes sociales al servicio de los funcionarios.
Boris González, dirigente de Santiago Sur de Anfup, que alberga a la ex Penitenciaria, afirmó que los suicidios y la gran cantidad de licencias médicas “no obedecen sólo a las deficientes condiciones de trabajo”, pues también tendrían que ver “con las políticas de traslado de personal, especialmente en lo que tiene que ver con que aquí un funcionario que egresa de la escuela, que vive en Arica, lo están destinando a Punta Arenas. Parte con un asunto de criterio, el desarraigo familiar incide en el quiebre y en que se produzcan ciertos fenómenos como los suicidios, se destruyen familias por este tipo de manejo institucional”, sostuvo.
Los funcionarios de Valparaíso anunciaron que comenzarán una ronda de socialización de sus demandas con las autoridades de Gendarmería, parlamentarios y el Ejecutivo y que, de no mediar solución, iniciarán movilizaciones.
Turnos de hasta 10 horas, poco tiempo de descanso y escasos días libres son algunas de las principales causas de la sobrecarga laboral que los gendarmes de Valparaíso acusan sufrir.
Según indicó el presidente en la región de Valparaíso de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), Luis Vásquez, a ello se suma la falta de personal, lo que ha llevado a una “situación crítica” que ha traído fuertes consecuencias.
“Como secuela de los turnos inhumanos, de la gran cantidad de horas que trabaja el personal, al no tener la posibilidad de descanso, han aumentado gradualmente las enfermedades psicológicas por estrés laboral y la tasa de suicidios de nuestro personal de Gendarmerías. En dos años llevamos 30 suicidios a nivel nacional y más de 40 intentos de suicidios que no han sido atendidos por el nivel central”, detalló el dirigente.
En este sentido, para Luis Vásquez, hay un responsable directo por no implementar políticas de prevención y mejoramiento de la gestión al interior de los penales.
“Hay un principio fundamental en derecho administrativo que la responsabilidad no se delega. El responsable de lo que está sucediendo en Gendamería es la autoridad máxima, el director Luis Masferrer, en cuanto a la dotación de personal, a proveer de los recursos necesarios o redistribuir el personal que se encuentra ya en el servicio para la atención oportuna, en una lógica de prevención hacia el personal de Gendarmería”, denunció Vásquez.
Para evitar nuevos intentos de suicidio, los trabajadores de La Ligua, Petorca, Quillota, San Felipe, Los Andes, San Antonio, Casa Blanca, Limache y Valparaíso se declararon en “estado de alerta”, a la espera que el director de la institución atienda sus demandas.
El petitorio de los funcionarios se basa en el aumento en 350 funcionarios la plantilla total de la región, mejorar los horarios y establecer una política de personal, con psicólogos y asistentes sociales al servicio de los funcionarios.
Boris González, dirigente de Santiago Sur de Anfup, que alberga a la ex Penitenciaria, afirmó que los suicidios y la gran cantidad de licencias médicas “no obedecen sólo a las deficientes condiciones de trabajo”, pues también tendrían que ver “con las políticas de traslado de personal, especialmente en lo que tiene que ver con que aquí un funcionario que egresa de la escuela, que vive en Arica, lo están destinando a Punta Arenas. Parte con un asunto de criterio, el desarraigo familiar incide en el quiebre y en que se produzcan ciertos fenómenos como los suicidios, se destruyen familias por este tipo de manejo institucional”, sostuvo.
Los funcionarios de Valparaíso anunciaron que comenzarán una ronda de socialización de sus demandas con las autoridades de Gendarmería, parlamentarios y el Ejecutivo y que, de no mediar solución, iniciarán movilizaciones.
