El Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile fue fundando en 1889, con el objetivo de formar al profesorado de la educación secundaria. La entidad llegó a tener una sede en Valparaíso en 1948, sin embargo, después de 92 años de funcionamiento, en 1981 – en plena dictadura militar – fue separado arbitrariamente de la casa de estudios, que de ahí en adelante careció de un lugar de formación de profesores.
Esta situación cambiaría en el mediano plazo, gracias al proyecto de creación de una Facultad de Educación que funcione, una vez más, al alero de nuestro plantel. Este es uno de los proyectos más relevantes que trazó el Rector Víctor Pérez en su segundo periodo a la cabeza de la universidad más antigua del país.
En esa línea, la prorectora de la U. de Chile y encargada de liderar este iniciativa, Rosa Devés, comentó a la tercera edición de Radio Análisis de nuestra emisora que “la educación no ha estado al centro de las estrategias de desarrollo de la universidad y pensamos que no podemos seguir así”.
Precisamente, el proyecto tiene dos ejes novedosos en la formación de estudiantes. El primero de ellos, se relaciona con la selección. La idea es que, una vez instalada la futura Facultad de Educación, el puntaje obtenido en la PSU no sea el único criterio que le permita a los postulantes ingresar a estas carreras, sino que se tomarán en cuenta aspectos como la vocación y el compromiso que se tiene con la labor de la enseñanza.
“En Chile somos muy buenos para regular la salida. Hay muchos programas de baja calidad con muchos estudiantes, que no han sido adecuadamente preparados que ingresan y luego colocamos pruebas en el egreso que muchas veces son injustas. Todos los buenos programas de educación en el mundo tienen selecciones donde se toma en cuenta la vocación y el compromiso con el aprendizaje”, afirmó la académica.
Un segundo aspecto importante será la integración teórico-práctica que se le quiere dar al proyecto. “Se requiere una formación mucho más vinculada al sistema escolar. Hoy no se puede formar a un profesor en el aula, lejos de la realidad nacional y de la escuela. Eso implica relaciones particulares de la universidad con las escuelas que no pueden ser circunstanciales. En algunas cosas, tiene que ser similar a la formación de los médicos. Nadie se puede imaginar hoy que los doctores se eduquen lejos del hospital. Queremos que no sea solo una práctica final, sino que haya una constante práctica en todos los años de estudio”, comentó la autoridad universitaria.
En esa línea, Rosa Devés explicó que “sabemos que para hacerlo bien tenemos que aprender de la escuela, de la investigación, de las mejores prácticas internacionales y en colaboración con otras universidades estatales. Este ya no es el escenario de la competencia, la educación es demasiado difícil para eso. Por lo mismo, esperamos generar alianzas fuertes con otras universidades estatales como la UMCE, así como con distintos establecimientos”.
Los avances
Este lunes, las autoridades de nuestra casa de estudios se reunieron con representantes del Magisterio, cita donde se mostró la disponibilidad para mantener una relación de colaboración mientras se concreta la Facultad de Educación.
El viernes pasado el Mineduc aprobó el proyecto para sentar las bases de esta iniciativa a través de un Convenio de Desempeño, cuya vigencia inicial es de tres años. En este acuerdo se incluye la implementación de tres programas inéditos en la “U”: la Educación Parvularia, la formación de profesores para Educación Básica y la enseñanza que de a luz a docentes que tengan la bidisciplina en química y biología.
Por otra parte, la prorectora comentó que ayer se inició formalmente el trabajo de un comité directivo, con presencia de decanos, Premios Nacionales y profesores muy destacados externos a para dar forma a este anhelo de nuestra universidad.
“Todas las familias saben que este país se juega en la educación. Y no podemos llamarnos Universidad de Chile si no abordamos esta materia en un contexto renovado”, concluyó la doctora en bioquímica.
El Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile fue fundando en 1889, con el objetivo de formar al profesorado de la educación secundaria. La entidad llegó a tener una sede en Valparaíso en 1948, sin embargo, después de 92 años de funcionamiento, en 1981 – en plena dictadura militar – fue separado arbitrariamente de la casa de estudios, que de ahí en adelante careció de un lugar de formación de profesores.
Esta situación cambiaría en el mediano plazo, gracias al proyecto de creación de una Facultad de Educación que funcione, una vez más, al alero de nuestro plantel. Este es uno de los proyectos más relevantes que trazó el Rector Víctor Pérez en su segundo periodo a la cabeza de la universidad más antigua del país.
En esa línea, la prorectora de la U. de Chile y encargada de liderar este iniciativa, Rosa Devés, comentó a la tercera edición de Radio Análisis de nuestra emisora que “la educación no ha estado al centro de las estrategias de desarrollo de la universidad y pensamos que no podemos seguir así”.
Precisamente, el proyecto tiene dos ejes novedosos en la formación de estudiantes. El primero de ellos, se relaciona con la selección. La idea es que, una vez instalada la futura Facultad de Educación, el puntaje obtenido en la PSU no sea el único criterio que le permita a los postulantes ingresar a estas carreras, sino que se tomarán en cuenta aspectos como la vocación y el compromiso que se tiene con la labor de la enseñanza.
“En Chile somos muy buenos para regular la salida. Hay muchos programas de baja calidad con muchos estudiantes, que no han sido adecuadamente preparados que ingresan y luego colocamos pruebas en el egreso que muchas veces son injustas. Todos los buenos programas de educación en el mundo tienen selecciones donde se toma en cuenta la vocación y el compromiso con el aprendizaje”, afirmó la académica.
Un segundo aspecto importante será la integración teórico-práctica que se le quiere dar al proyecto. “Se requiere una formación mucho más vinculada al sistema escolar. Hoy no se puede formar a un profesor en el aula, lejos de la realidad nacional y de la escuela. Eso implica relaciones particulares de la universidad con las escuelas que no pueden ser circunstanciales. En algunas cosas, tiene que ser similar a la formación de los médicos. Nadie se puede imaginar hoy que los doctores se eduquen lejos del hospital. Queremos que no sea solo una práctica final, sino que haya una constante práctica en todos los años de estudio”, comentó la autoridad universitaria.
En esa línea, Rosa Devés explicó que “sabemos que para hacerlo bien tenemos que aprender de la escuela, de la investigación, de las mejores prácticas internacionales y en colaboración con otras universidades estatales. Este ya no es el escenario de la competencia, la educación es demasiado difícil para eso. Por lo mismo, esperamos generar alianzas fuertes con otras universidades estatales como la UMCE, así como con distintos establecimientos”.
Los avances
Este lunes, las autoridades de nuestra casa de estudios se reunieron con representantes del Magisterio, cita donde se mostró la disponibilidad para mantener una relación de colaboración mientras se concreta la Facultad de Educación.
El viernes pasado el Mineduc aprobó el proyecto para sentar las bases de esta iniciativa a través de un Convenio de Desempeño, cuya vigencia inicial es de tres años. En este acuerdo se incluye la implementación de tres programas inéditos en la “U”: la Educación Parvularia, la formación de profesores para Educación Básica y la enseñanza que de a luz a docentes que tengan la bidisciplina en química y biología.
Por otra parte, la prorectora comentó que ayer se inició formalmente el trabajo de un comité directivo, con presencia de decanos, Premios Nacionales y profesores muy destacados externos a para dar forma a este anhelo de nuestra universidad.
“Todas las familias saben que este país se juega en la educación. Y no podemos llamarnos Universidad de Chile si no abordamos esta materia en un contexto renovado”, concluyó la doctora en bioquímica.
El Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile fue fundando en 1889, con el objetivo de formar al profesorado de la educación secundaria. La entidad llegó a tener una sede en Valparaíso en 1948, sin embargo, después de 92 años de funcionamiento, en 1981 – en plena dictadura militar – fue separado arbitrariamente de la casa de estudios, que de ahí en adelante careció de un lugar de formación de profesores.
Esta situación cambiaría en el mediano plazo, gracias al proyecto de creación de una Facultad de Educación que funcione, una vez más, al alero de nuestro plantel. Este es uno de los proyectos más relevantes que trazó el Rector Víctor Pérez en su segundo periodo a la cabeza de la universidad más antigua del país.
En esa línea, la prorectora de la U. de Chile y encargada de liderar este iniciativa, Rosa Devés, comentó a la tercera edición de Radio Análisis de nuestra emisora que “la educación no ha estado al centro de las estrategias de desarrollo de la universidad y pensamos que no podemos seguir así”.
Precisamente, el proyecto tiene dos ejes novedosos en la formación de estudiantes. El primero de ellos, se relaciona con la selección. La idea es que, una vez instalada la futura Facultad de Educación, el puntaje obtenido en la PSU no sea el único criterio que le permita a los postulantes ingresar a estas carreras, sino que se tomarán en cuenta aspectos como la vocación y el compromiso que se tiene con la labor de la enseñanza.
“En Chile somos muy buenos para regular la salida. Hay muchos programas de baja calidad con muchos estudiantes, que no han sido adecuadamente preparados que ingresan y luego colocamos pruebas en el egreso que muchas veces son injustas. Todos los buenos programas de educación en el mundo tienen selecciones donde se toma en cuenta la vocación y el compromiso con el aprendizaje”, afirmó la académica.
Un segundo aspecto importante será la integración teórico-práctica que se le quiere dar al proyecto. “Se requiere una formación mucho más vinculada al sistema escolar. Hoy no se puede formar a un profesor en el aula, lejos de la realidad nacional y de la escuela. Eso implica relaciones particulares de la universidad con las escuelas que no pueden ser circunstanciales. En algunas cosas, tiene que ser similar a la formación de los médicos. Nadie se puede imaginar hoy que los doctores se eduquen lejos del hospital. Queremos que no sea solo una práctica final, sino que haya una constante práctica en todos los años de estudio”, comentó la autoridad universitaria.
En esa línea, Rosa Devés explicó que “sabemos que para hacerlo bien tenemos que aprender de la escuela, de la investigación, de las mejores prácticas internacionales y en colaboración con otras universidades estatales. Este ya no es el escenario de la competencia, la educación es demasiado difícil para eso. Por lo mismo, esperamos generar alianzas fuertes con otras universidades estatales como la UMCE, así como con distintos establecimientos”.
Los avances
Este lunes, las autoridades de nuestra casa de estudios se reunieron con representantes del Magisterio, cita donde se mostró la disponibilidad para mantener una relación de colaboración mientras se concreta la Facultad de Educación.
El viernes pasado el Mineduc aprobó el proyecto para sentar las bases de esta iniciativa a través de un Convenio de Desempeño, cuya vigencia inicial es de tres años. En este acuerdo se incluye la implementación de tres programas inéditos en la “U”: la Educación Parvularia, la formación de profesores para Educación Básica y la enseñanza que de a luz a docentes que tengan la bidisciplina en química y biología.
Por otra parte, la prorectora comentó que ayer se inició formalmente el trabajo de un comité directivo, con presencia de decanos, Premios Nacionales y profesores muy destacados externos a para dar forma a este anhelo de nuestra universidad.
“Todas las familias saben que este país se juega en la educación. Y no podemos llamarnos Universidad de Chile si no abordamos esta materia en un contexto renovado”, concluyó la doctora en bioquímica.
