En marzo el Servicio Sismológico de la Universidad de Chile recibirá de la ONEMI la transferencia de 3.800 millones de pesos que le permitirá reparar y conectar las estaciones que no están funcionando, comprar nuevos equipos y calibrarlos para su funcionamiento.
Según aseguró la Onemi a Radio Universidad de Chile, el convenio que va a ser visado por Contraloría va a potenciar la red de monitoreo ya que la entrega de 3.800 millones de pesos mejorará las comunicaciones, permitirá la instalación de instrumentos que redundará en la conexión de 24 estaciones y permitirá pagar al personal que labora ininterrumpidamente.
Para el director del Servicio Sismológico de la Universidad de Chile, Sergio Barrientos, la demora en la entrega de recursos se debe a que recién en enero se firmó un acuerdo con la ONEMI. Mientras, indicó, el Servicio ha funcionado con recursos propios que no son suficientes para cubrir las necesidades que tiene la red sismológica.
Respecto de los dineros que se liberarán, Barrientos señaló a nuestra emisora que el servicio “hubiese esperado que se hicieran efectivos meses atrás, y esperamos que éstos vuelvan a entregarse durante cuatro años, plazo suficiente para armar completamente la red de monitoreo y para que el equipamiento se afine completamente”.
Para el integrante de la Comisión Investigadora del terremoto y maremoto de la Cámara de Diputados, Pepe Auth (PPD), tanto la demora en la entrega de estos recursos como la reducción de 74 equipos en 2010 a 63 unidades que actualmente se encuentran operando, se debe a que la ONEMI ha sido errática en su relación con el Servicio Sismológico de la casa de estudios.
Al respecto, Auth indicó: “no entendemos que se haya tardado tanto el traspaso de la responsabilidad a la Universidad de Chile, que todavía no se terminen de trasladar los recursos para la administración de esta red, pues primero se les quitó los aparatos, luego volvieron a entregárselos, y que todavía esté en Contraloría el decreto para trasladar los recursos. No ha habido un liderazgo consolidado en la ONEMI, ha tenido varios directores, cosa muy usual en estos organismos durante este gobierno”.
El diputado Auth señaló además que el accionar de la ONEMI descompensa y anula el avance de la extensión horaria de sismología que fue puesto en marcha en agosto de 2010 y que se requiere un liderazgo estable en el organismo, que planifique, confíe y asocie a los actores responsables del monitoreo sísmico.
Sobre el eventual traspaso de la red a un centro independiente, tal como lo indica el proyecto de ley que se encuentra en trámite en la Cámara de Diputados y que creará una Agencia Nacional de Protección Civil, Auth aseveró que, en su opinión, los mejores sismólogos son los del Departamento de Sismología de la Universidad de Chile y que es por esto que ha recibido la responsabilidad del monitoreo, “pero no así los recursos adecuados”, finalizó.
En marzo el Servicio Sismológico de la Universidad de Chile recibirá de la ONEMI la transferencia de 3.800 millones de pesos que le permitirá reparar y conectar las estaciones que no están funcionando, comprar nuevos equipos y calibrarlos para su funcionamiento.
Según aseguró la Onemi a Radio Universidad de Chile, el convenio que va a ser visado por Contraloría va a potenciar la red de monitoreo ya que la entrega de 3.800 millones de pesos mejorará las comunicaciones, permitirá la instalación de instrumentos que redundará en la conexión de 24 estaciones y permitirá pagar al personal que labora ininterrumpidamente.
Para el director del Servicio Sismológico de la Universidad de Chile, Sergio Barrientos, la demora en la entrega de recursos se debe a que recién en enero se firmó un acuerdo con la ONEMI. Mientras, indicó, el Servicio ha funcionado con recursos propios que no son suficientes para cubrir las necesidades que tiene la red sismológica.
Respecto de los dineros que se liberarán, Barrientos señaló a nuestra emisora que el servicio “hubiese esperado que se hicieran efectivos meses atrás, y esperamos que éstos vuelvan a entregarse durante cuatro años, plazo suficiente para armar completamente la red de monitoreo y para que el equipamiento se afine completamente”.
Para el integrante de la Comisión Investigadora del terremoto y maremoto de la Cámara de Diputados, Pepe Auth (PPD), tanto la demora en la entrega de estos recursos como la reducción de 74 equipos en 2010 a 63 unidades que actualmente se encuentran operando, se debe a que la ONEMI ha sido errática en su relación con el Servicio Sismológico de la casa de estudios.
Al respecto, Auth indicó: “no entendemos que se haya tardado tanto el traspaso de la responsabilidad a la Universidad de Chile, que todavía no se terminen de trasladar los recursos para la administración de esta red, pues primero se les quitó los aparatos, luego volvieron a entregárselos, y que todavía esté en Contraloría el decreto para trasladar los recursos. No ha habido un liderazgo consolidado en la ONEMI, ha tenido varios directores, cosa muy usual en estos organismos durante este gobierno”.
El diputado Auth señaló además que el accionar de la ONEMI descompensa y anula el avance de la extensión horaria de sismología que fue puesto en marcha en agosto de 2010 y que se requiere un liderazgo estable en el organismo, que planifique, confíe y asocie a los actores responsables del monitoreo sísmico.
Sobre el eventual traspaso de la red a un centro independiente, tal como lo indica el proyecto de ley que se encuentra en trámite en la Cámara de Diputados y que creará una Agencia Nacional de Protección Civil, Auth aseveró que, en su opinión, los mejores sismólogos son los del Departamento de Sismología de la Universidad de Chile y que es por esto que ha recibido la responsabilidad del monitoreo, “pero no así los recursos adecuados”, finalizó.
En marzo el Servicio Sismológico de la Universidad de Chile recibirá de la ONEMI la transferencia de 3.800 millones de pesos que le permitirá reparar y conectar las estaciones que no están funcionando, comprar nuevos equipos y calibrarlos para su funcionamiento.
Según aseguró la Onemi a Radio Universidad de Chile, el convenio que va a ser visado por Contraloría va a potenciar la red de monitoreo ya que la entrega de 3.800 millones de pesos mejorará las comunicaciones, permitirá la instalación de instrumentos que redundará en la conexión de 24 estaciones y permitirá pagar al personal que labora ininterrumpidamente.
Para el director del Servicio Sismológico de la Universidad de Chile, Sergio Barrientos, la demora en la entrega de recursos se debe a que recién en enero se firmó un acuerdo con la ONEMI. Mientras, indicó, el Servicio ha funcionado con recursos propios que no son suficientes para cubrir las necesidades que tiene la red sismológica.
Respecto de los dineros que se liberarán, Barrientos señaló a nuestra emisora que el servicio “hubiese esperado que se hicieran efectivos meses atrás, y esperamos que éstos vuelvan a entregarse durante cuatro años, plazo suficiente para armar completamente la red de monitoreo y para que el equipamiento se afine completamente”.
Para el integrante de la Comisión Investigadora del terremoto y maremoto de la Cámara de Diputados, Pepe Auth (PPD), tanto la demora en la entrega de estos recursos como la reducción de 74 equipos en 2010 a 63 unidades que actualmente se encuentran operando, se debe a que la ONEMI ha sido errática en su relación con el Servicio Sismológico de la casa de estudios.
Al respecto, Auth indicó: “no entendemos que se haya tardado tanto el traspaso de la responsabilidad a la Universidad de Chile, que todavía no se terminen de trasladar los recursos para la administración de esta red, pues primero se les quitó los aparatos, luego volvieron a entregárselos, y que todavía esté en Contraloría el decreto para trasladar los recursos. No ha habido un liderazgo consolidado en la ONEMI, ha tenido varios directores, cosa muy usual en estos organismos durante este gobierno”.
El diputado Auth señaló además que el accionar de la ONEMI descompensa y anula el avance de la extensión horaria de sismología que fue puesto en marcha en agosto de 2010 y que se requiere un liderazgo estable en el organismo, que planifique, confíe y asocie a los actores responsables del monitoreo sísmico.
Sobre el eventual traspaso de la red a un centro independiente, tal como lo indica el proyecto de ley que se encuentra en trámite en la Cámara de Diputados y que creará una Agencia Nacional de Protección Civil, Auth aseveró que, en su opinión, los mejores sismólogos son los del Departamento de Sismología de la Universidad de Chile y que es por esto que ha recibido la responsabilidad del monitoreo, “pero no así los recursos adecuados”, finalizó.
