La Comisión Nacional de Acreditación (CNA) destacó entre sus cifras del año 2012 que se adoptaron 165 decisiones en la materia, se recibieron más de 700 consultas y más de 100 solicitudes vía ley de Transparencia, aumentó el registro de pares evaluadores y se acreditaron 34 doctorados, 54 magísteres y 14 especialidades médicas.
Un 89% del total de matrículas de educación superior autónoma están en instituciones acreditadas, al igual que un 44,4% de los Centros de Formación Técnica; un 60% de los Institutos Profesionales y un 82,8% de las Universidades.
La secretaria ejecutiva, Paula Beale, entregó estas cifras durante la cuenta pública de la CNA, pero el grueso de la ceremonia se concentró en el discurso del nuevo presidente, Matko Koljatic, quien reconoció desprolijidades relacionadas con acuerdos para acreditaciones extendidas, potenciales conflictos de interés de las agencias de acreditación y las denuncias conocidas y aseguró que la probidad del organismo fue pasada a llevar.
Pero Koljatic basó sus palabras en las proyecciones de su gestión, para la cual, una de las bases es el aseguramiento de la transparencia al funcionar.
“La transparencia se puede expresar en la CNA en que nosotros hagamos público cómo se tomaron las decisiones, de modo de que no haya ninguna duda de qué es lo que pasó. Ahora, el hecho de que cuando las instituciones nos hacen llegar sus antecedentes, hay algunos que si son propiedad de ellos y esa información no la podemos entregar, pero la forma en que nosotros tomamos la decisión sobre la acreditación debe ser muy transparente”, expresó.
Koljatic aseguró además que hay una tarea en curso de una nueva CNA, donde un nuevo código de ética es necesario. También se están implementando nuevos reglamentos e instructivos y hay planes de mejoramiento en marcha.
Además, reconoció que hubo desvinculaciones por conflictos de interés, aunque se apresuró a señalar que “estos son temas muy ingratos, hablemos del futuro y no del pasado”.
El presidente de la CNA está optimista sobre lo que viene, pese a la incertidumbre por la nueva Agencia Nacional de Calidad de la educación que discute el Parlamento.
Ante esto, el ex presidente de la Comisión, Patricio Basso, se mostró absolutamente en contra de mantener la CNA. “Creo que hay que terminarla y hacer una nueva ley, porque el problema de Chile no es el aseguramiento de la calidad, el problema es que esta nunca se ha medido en universidades, institutos y CFT y por lo tanto requerimos una medición de calidad mínima para que puedan seguir subsistiendo”.
“Para eso se requiere una ley diferente, que no es la que está en el Congreso que sigue midiendo mejoramiento de la calidad, y una CNA diferente donde no estén las mismas personas que han sido elegidas por quienes van a ser acreditados”, manifestó.
Basso, quien fue crucial en la denuncia de lucro en diversas casas de estudio, desatando el caso de la Universidad del Mar, lamentó que el Gobierno no esté considerando, por ejemplo, nuevas formas de elección de miembros en sus proyectos de ley, rechazando que se mantenga un estilo “corporativista”.