Estudiantes se querellan por lesiones sufridas en ingreso de Carabineros a Casa Central
Dos alumnas de la Universidad de Chile se querellaron contra los miembros de Carabineros que resulten responsables, por las lesiones que sufrieron en el operativo de ingreso de Fuerzas Especiales a la Casa Central, realizado el 13 de junio y que dejó como saldo una veintena de estudiantes detenidos y similar cantidad de heridos. El presidente de la FECH, Andrés Fielbaum, destacó que los abusos policiales sean denunciados para “acabar con la impunidad”. Por su parte, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, le restó importancia al requerimiento, afirmando que “los tribunales tendrán que determinar”.
Jueves 4 de julio 2013 17:44 hrs.
Este jueves, las alumnas de la Universidad de Chile, Loreto Contreras y Antonia Ochoa, presentaron, en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, una querella contra quienes resulten responsables, por las lesiones que sufrieron el 13 de junio, cuando Fuerzas Especiales de Carabineros ingresó al edificio de Casa Central.
Ambas estudiantes, una del ICEI y otra de la Facultad de Filosofía y Humanidades, relataron lo sucedido ese día, cuando se encontraban al interior del recinto.
Una de las alumnas describió que “los estudiantes de la U. de Chile fuimos golpeados de forma desmedida, sin ningún criterio, habían compañeros en el suelo que fueron golpeado en la cabeza. Me pegaron un lumazo en el brazo, fue horrible, se me durmió desde el hombro hasta la punta del dedo y tenía un hematoma muy grande”.
En tantoo, la otra estudiante de nuestra universidad dijo “La molotov que dicen que fue lanzada desde dentro de la Casa Central, fue lanzada desde afuera, no fue desde dentro, eso es mentira y en ningún momento yo vi que entraron con intenciones de detener a personas, sólo de golpear y lanzar lacrimógenas. Yo fui golpeada en la cabeza con una luma que me provocó cortes y después termine con puntos en la Posta Central”.
Las querellas fueron ingresadas por Tomás Ramírez, abogado de la agrupación Defensa Secundarios, quien señaló que Carabineros es una institución jerarquizada y, por ende, “debería existir el registro del procedimiento, desde quiénes lo ordenaron hasta quienes lo efectuaron”.
La investigación iniciada por Carabineros ha arrojado como resultado la desvinculación del orden público, y no de la institución, de sólo un efectivo que participó del procedimiento.
Tomás Ramírez agregó que el requerimiento busca “conocer a los culpables y determinar las sanciones, en todas sus aristas”.
En este sentido, el abogado detalló que “existen distintos niveles de responsabilidad, una de ellas es la administrativa, y por lo tanto, cuando un Carabinero comete un delito debe ser removido de su cargo. En segundo lugar, existe una responsabilidad penal es que la que estamos persiguiendo en este momento y no sólo es individual, sino que también de la persona que da la orden. Luego hay una responsabilidad que también es civil por los perjuicios que se generan a las víctimas de estos delitos y una responsabilidad política. Todas esa responsabilidades ya sea persona, administrativa, institucional o política serán perseguidas en cada uno de los niveles que corresponde”.
Andrés Fielbaum, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), destacó la presentación del recurso ante los tribunales de Justicia, ya que, a su juicio, se ha hecho habitual que Carabineros actúe con fuerzas desmedida en las marchas y sobrepasando sus propios protocolos.
Por este hecho, y el ingreso al campus Juan Gómez Millas y la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, es que Fielbaum afirmó “es necesario terminar con la impunidad”.
En esa línea, el líder de la FECH afirmó que “por un lado, visibilizar que cuando denunciamos el abuso de parte de Carabineros que ha sido permanentemente negado por el Gobierno, es un abuso que tiene consecuencias concretas, que en este caso significó puntos en la cabeza, hematomas. Ha tenido consecuencias bien graves en otras marchas ha costado ojo de personas y por cierto también impedir una vez más que la violencia desmedida quede impune, asegurar que hechos como los vistos en Casa Central, que hemos visto todo este año, vuelvan a repetirse”.
Consultado por la presentación de las dos querellas, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, declaró que “los tribunales, con todas las pruebas disponibles, deberán determinar”.
Por esto, el titular de Interior aseguró que “si ellos sienten que fueron víctimas de alguna situación irregular, me parece que están en su legítimo derecho a presentar las querellas correspondientes. La presentación de una querella no desmiente nada, es sólo la opinión de quienes puedan sentirse objeto de una situación irregular o de algún tipo de acción contraria a la ley, es su visión y son los tribunales los que tendrán que determinar”.
Ambas querellas solicitan diligencias al Ministerio Público. Algunas de ellas son despachar, a la Brigada de Derechos Humanos de la PDI, una orden para investigar la identidad de los funcionarios de Carabineros que se encontraba en el lugar; la declaración de testigos; que la Posta Central envíe la información médica y que ésta sea corroborada por el Servicio Médico Legal.
Este jueves, las alumnas de la Universidad de Chile, Loreto Contreras y Antonia Ochoa, presentaron, en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, una querella contra quienes resulten responsables, por las lesiones que sufrieron el 13 de junio, cuando Fuerzas Especiales de Carabineros ingresó al edificio de Casa Central.
Ambas estudiantes, una del ICEI y otra de la Facultad de Filosofía y Humanidades, relataron lo sucedido ese día, cuando se encontraban al interior del recinto.
Una de las alumnas describió que “los estudiantes de la U. de Chile fuimos golpeados de forma desmedida, sin ningún criterio, habían compañeros en el suelo que fueron golpeado en la cabeza. Me pegaron un lumazo en el brazo, fue horrible, se me durmió desde el hombro hasta la punta del dedo y tenía un hematoma muy grande”.
En tantoo, la otra estudiante de nuestra universidad dijo “La molotov que dicen que fue lanzada desde dentro de la Casa Central, fue lanzada desde afuera, no fue desde dentro, eso es mentira y en ningún momento yo vi que entraron con intenciones de detener a personas, sólo de golpear y lanzar lacrimógenas. Yo fui golpeada en la cabeza con una luma que me provocó cortes y después termine con puntos en la Posta Central”.
Las querellas fueron ingresadas por Tomás Ramírez, abogado de la agrupación Defensa Secundarios, quien señaló que Carabineros es una institución jerarquizada y, por ende, “debería existir el registro del procedimiento, desde quiénes lo ordenaron hasta quienes lo efectuaron”.
La investigación iniciada por Carabineros ha arrojado como resultado la desvinculación del orden público, y no de la institución, de sólo un efectivo que participó del procedimiento.
Tomás Ramírez agregó que el requerimiento busca “conocer a los culpables y determinar las sanciones, en todas sus aristas”.
En este sentido, el abogado detalló que “existen distintos niveles de responsabilidad, una de ellas es la administrativa, y por lo tanto, cuando un Carabinero comete un delito debe ser removido de su cargo. En segundo lugar, existe una responsabilidad penal es que la que estamos persiguiendo en este momento y no sólo es individual, sino que también de la persona que da la orden. Luego hay una responsabilidad que también es civil por los perjuicios que se generan a las víctimas de estos delitos y una responsabilidad política. Todas esa responsabilidades ya sea persona, administrativa, institucional o política serán perseguidas en cada uno de los niveles que corresponde”.
Andrés Fielbaum, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), destacó la presentación del recurso ante los tribunales de Justicia, ya que, a su juicio, se ha hecho habitual que Carabineros actúe con fuerzas desmedida en las marchas y sobrepasando sus propios protocolos.
Por este hecho, y el ingreso al campus Juan Gómez Millas y la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, es que Fielbaum afirmó “es necesario terminar con la impunidad”.
En esa línea, el líder de la FECH afirmó que “por un lado, visibilizar que cuando denunciamos el abuso de parte de Carabineros que ha sido permanentemente negado por el Gobierno, es un abuso que tiene consecuencias concretas, que en este caso significó puntos en la cabeza, hematomas. Ha tenido consecuencias bien graves en otras marchas ha costado ojo de personas y por cierto también impedir una vez más que la violencia desmedida quede impune, asegurar que hechos como los vistos en Casa Central, que hemos visto todo este año, vuelvan a repetirse”.
Consultado por la presentación de las dos querellas, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, declaró que “los tribunales, con todas las pruebas disponibles, deberán determinar”.
Por esto, el titular de Interior aseguró que “si ellos sienten que fueron víctimas de alguna situación irregular, me parece que están en su legítimo derecho a presentar las querellas correspondientes. La presentación de una querella no desmiente nada, es sólo la opinión de quienes puedan sentirse objeto de una situación irregular o de algún tipo de acción contraria a la ley, es su visión y son los tribunales los que tendrán que determinar”.
Ambas querellas solicitan diligencias al Ministerio Público. Algunas de ellas son despachar, a la Brigada de Derechos Humanos de la PDI, una orden para investigar la identidad de los funcionarios de Carabineros que se encontraba en el lugar; la declaración de testigos; que la Posta Central envíe la información médica y que ésta sea corroborada por el Servicio Médico Legal.
Este jueves, las alumnas de la Universidad de Chile, Loreto Contreras y Antonia Ochoa, presentaron, en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, una querella contra quienes resulten responsables, por las lesiones que sufrieron el 13 de junio, cuando Fuerzas Especiales de Carabineros ingresó al edificio de Casa Central.
Ambas estudiantes, una del ICEI y otra de la Facultad de Filosofía y Humanidades, relataron lo sucedido ese día, cuando se encontraban al interior del recinto.
Una de las alumnas describió que “los estudiantes de la U. de Chile fuimos golpeados de forma desmedida, sin ningún criterio, habían compañeros en el suelo que fueron golpeado en la cabeza. Me pegaron un lumazo en el brazo, fue horrible, se me durmió desde el hombro hasta la punta del dedo y tenía un hematoma muy grande”.
En tantoo, la otra estudiante de nuestra universidad dijo “La molotov que dicen que fue lanzada desde dentro de la Casa Central, fue lanzada desde afuera, no fue desde dentro, eso es mentira y en ningún momento yo vi que entraron con intenciones de detener a personas, sólo de golpear y lanzar lacrimógenas. Yo fui golpeada en la cabeza con una luma que me provocó cortes y después termine con puntos en la Posta Central”.
Las querellas fueron ingresadas por Tomás Ramírez, abogado de la agrupación Defensa Secundarios, quien señaló que Carabineros es una institución jerarquizada y, por ende, “debería existir el registro del procedimiento, desde quiénes lo ordenaron hasta quienes lo efectuaron”.
La investigación iniciada por Carabineros ha arrojado como resultado la desvinculación del orden público, y no de la institución, de sólo un efectivo que participó del procedimiento.
Tomás Ramírez agregó que el requerimiento busca “conocer a los culpables y determinar las sanciones, en todas sus aristas”.
En este sentido, el abogado detalló que “existen distintos niveles de responsabilidad, una de ellas es la administrativa, y por lo tanto, cuando un Carabinero comete un delito debe ser removido de su cargo. En segundo lugar, existe una responsabilidad penal es que la que estamos persiguiendo en este momento y no sólo es individual, sino que también de la persona que da la orden. Luego hay una responsabilidad que también es civil por los perjuicios que se generan a las víctimas de estos delitos y una responsabilidad política. Todas esa responsabilidades ya sea persona, administrativa, institucional o política serán perseguidas en cada uno de los niveles que corresponde”.
Andrés Fielbaum, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), destacó la presentación del recurso ante los tribunales de Justicia, ya que, a su juicio, se ha hecho habitual que Carabineros actúe con fuerzas desmedida en las marchas y sobrepasando sus propios protocolos.
Por este hecho, y el ingreso al campus Juan Gómez Millas y la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, es que Fielbaum afirmó “es necesario terminar con la impunidad”.
En esa línea, el líder de la FECH afirmó que “por un lado, visibilizar que cuando denunciamos el abuso de parte de Carabineros que ha sido permanentemente negado por el Gobierno, es un abuso que tiene consecuencias concretas, que en este caso significó puntos en la cabeza, hematomas. Ha tenido consecuencias bien graves en otras marchas ha costado ojo de personas y por cierto también impedir una vez más que la violencia desmedida quede impune, asegurar que hechos como los vistos en Casa Central, que hemos visto todo este año, vuelvan a repetirse”.
Consultado por la presentación de las dos querellas, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, declaró que “los tribunales, con todas las pruebas disponibles, deberán determinar”.
Por esto, el titular de Interior aseguró que “si ellos sienten que fueron víctimas de alguna situación irregular, me parece que están en su legítimo derecho a presentar las querellas correspondientes. La presentación de una querella no desmiente nada, es sólo la opinión de quienes puedan sentirse objeto de una situación irregular o de algún tipo de acción contraria a la ley, es su visión y son los tribunales los que tendrán que determinar”.
Ambas querellas solicitan diligencias al Ministerio Público. Algunas de ellas son despachar, a la Brigada de Derechos Humanos de la PDI, una orden para investigar la identidad de los funcionarios de Carabineros que se encontraba en el lugar; la declaración de testigos; que la Posta Central envíe la información médica y que ésta sea corroborada por el Servicio Médico Legal.
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