Niveles superiores a la norma para elementos como plomo, arsénico, mercurio y otros metales pesados se registraron en los exámenes que se hicieron luego de la exhumación realizada el cuatro de septiembre del 2012 a los primeros cuatro cuerpos de los ex trabajadores de Enami-Codelco, división Ventanas, región de Valparaíso.
Se identificaron rastros en los cuerpos de Gabriel Arroyo Román, Clemente Aguilera Romero, Raúl del Carmen Lagos Bastías y Héctor Segundo Torres Villalón, quienes fueron exhumados en el Cementerio de PuchuncavÍ, en el marco de una investigación que conduce el Fiscal Mauricio Dunner para determinar las causas del fallecimiento.
La tarea de la fiscalía ahora será establecer, a través de pericias toxicológicas, si es posible vincular causalmente la presencia de estos tóxicos en sus organismos con la causa oficial de muerte.
El presidente de la Asociación de Ex Funcionarios de Enami (Asofren), Luis Pino, señala que no tenían ninguna duda de que se detectaran estos componentes, ya que lo denunciaron a diversas autoridades durante años: “Sabíamos de mucho tiempo que está contaminada la gente, pero aquí las autoridades de Quintero y el Congreso saben de este tema, pero nunca quisieron meter mano. Le ha tocado a Sebastián Piñera dar a conocer esta situación tan caótica, un genocidio”.
La investigación implica la pericia de otras 11 personas, exhumadas en octubre de 2012 y en junio de este año. Además, utilizando la misma metodología de análisis y validación, la fiscalía indicó que avanzará en la extracción de restos de otros 14 ex trabajadores de Enami Ventanas que se encuentran en distintos cementerios de la zona e, incluso, en la Región de Coquimbo.
Para el abogado que conduce la causa, Raúl Meza, esto abre una serie de opciones en la vía jurídica, ya que de confirmarse el vínculo entre la presencia de estos metales y la causa de muerte, podría haber varias personas más en la misma situación, entre ellos civiles, no trabajadores de Codelco, quienes podrían llegar a tribunales. También en la vía administrativa, las autoridades podrían abrirse a una compensación y un plan de manejo más intenso, como ocurrió en el caso de los polimetales detectados en Arica.
Recordemos que este sector es considerado una zona saturada de contaminación ante la gran presencia de empresas en los alrededores y los varios casos de nubes tóxicas detectados, como en la localidad de La Greda, donde se debió trasladar una escuela ante la presencia de metales pesados.
Sobre los impactos se refirió Sergio Silva, Presidente del Sindicato del Puerto de Ventanas, quien señaló que “esta zona, todo el mundo sabe, está castigada en muchos ámbitos. Nuestra costa tiene agotamiento, y nos lleva a dejar las labores. La pregunta es si el cobre, y Codelco, cuánto ayuda a nuestra actividad, ya que sólo ha traído resultados negativos”.
Desde el Ministerio del Medioambiente indicaron que están conscientes de esta situación en la bahía de Quinteros y que existe un plan de mitigación para el sector. Además, indicaron que están trabajando en una serie de reglamentos como la norma del PPM 2,5 o la norma de fundiciones, para regular este tipo de casos. Sin embargo, desde la Seremi de Salud, responsable del monitoreo de la población, aún no se han referido al respecto.
Niveles superiores a la norma para elementos como plomo, arsénico, mercurio y otros metales pesados se registraron en los exámenes que se hicieron luego de la exhumación realizada el cuatro de septiembre del 2012 a los primeros cuatro cuerpos de los ex trabajadores de Enami-Codelco, división Ventanas, región de Valparaíso.
Se identificaron rastros en los cuerpos de Gabriel Arroyo Román, Clemente Aguilera Romero, Raúl del Carmen Lagos Bastías y Héctor Segundo Torres Villalón, quienes fueron exhumados en el Cementerio de PuchuncavÍ, en el marco de una investigación que conduce el Fiscal Mauricio Dunner para determinar las causas del fallecimiento.
La tarea de la fiscalía ahora será establecer, a través de pericias toxicológicas, si es posible vincular causalmente la presencia de estos tóxicos en sus organismos con la causa oficial de muerte.
El presidente de la Asociación de Ex Funcionarios de Enami (Asofren), Luis Pino, señala que no tenían ninguna duda de que se detectaran estos componentes, ya que lo denunciaron a diversas autoridades durante años: “Sabíamos de mucho tiempo que está contaminada la gente, pero aquí las autoridades de Quintero y el Congreso saben de este tema, pero nunca quisieron meter mano. Le ha tocado a Sebastián Piñera dar a conocer esta situación tan caótica, un genocidio”.
La investigación implica la pericia de otras 11 personas, exhumadas en octubre de 2012 y en junio de este año. Además, utilizando la misma metodología de análisis y validación, la fiscalía indicó que avanzará en la extracción de restos de otros 14 ex trabajadores de Enami Ventanas que se encuentran en distintos cementerios de la zona e, incluso, en la Región de Coquimbo.
Para el abogado que conduce la causa, Raúl Meza, esto abre una serie de opciones en la vía jurídica, ya que de confirmarse el vínculo entre la presencia de estos metales y la causa de muerte, podría haber varias personas más en la misma situación, entre ellos civiles, no trabajadores de Codelco, quienes podrían llegar a tribunales. También en la vía administrativa, las autoridades podrían abrirse a una compensación y un plan de manejo más intenso, como ocurrió en el caso de los polimetales detectados en Arica.
Recordemos que este sector es considerado una zona saturada de contaminación ante la gran presencia de empresas en los alrededores y los varios casos de nubes tóxicas detectados, como en la localidad de La Greda, donde se debió trasladar una escuela ante la presencia de metales pesados.
Sobre los impactos se refirió Sergio Silva, Presidente del Sindicato del Puerto de Ventanas, quien señaló que “esta zona, todo el mundo sabe, está castigada en muchos ámbitos. Nuestra costa tiene agotamiento, y nos lleva a dejar las labores. La pregunta es si el cobre, y Codelco, cuánto ayuda a nuestra actividad, ya que sólo ha traído resultados negativos”.
Desde el Ministerio del Medioambiente indicaron que están conscientes de esta situación en la bahía de Quinteros y que existe un plan de mitigación para el sector. Además, indicaron que están trabajando en una serie de reglamentos como la norma del PPM 2,5 o la norma de fundiciones, para regular este tipo de casos. Sin embargo, desde la Seremi de Salud, responsable del monitoreo de la población, aún no se han referido al respecto.
Niveles superiores a la norma para elementos como plomo, arsénico, mercurio y otros metales pesados se registraron en los exámenes que se hicieron luego de la exhumación realizada el cuatro de septiembre del 2012 a los primeros cuatro cuerpos de los ex trabajadores de Enami-Codelco, división Ventanas, región de Valparaíso.
Se identificaron rastros en los cuerpos de Gabriel Arroyo Román, Clemente Aguilera Romero, Raúl del Carmen Lagos Bastías y Héctor Segundo Torres Villalón, quienes fueron exhumados en el Cementerio de PuchuncavÍ, en el marco de una investigación que conduce el Fiscal Mauricio Dunner para determinar las causas del fallecimiento.
La tarea de la fiscalía ahora será establecer, a través de pericias toxicológicas, si es posible vincular causalmente la presencia de estos tóxicos en sus organismos con la causa oficial de muerte.
El presidente de la Asociación de Ex Funcionarios de Enami (Asofren), Luis Pino, señala que no tenían ninguna duda de que se detectaran estos componentes, ya que lo denunciaron a diversas autoridades durante años: “Sabíamos de mucho tiempo que está contaminada la gente, pero aquí las autoridades de Quintero y el Congreso saben de este tema, pero nunca quisieron meter mano. Le ha tocado a Sebastián Piñera dar a conocer esta situación tan caótica, un genocidio”.
La investigación implica la pericia de otras 11 personas, exhumadas en octubre de 2012 y en junio de este año. Además, utilizando la misma metodología de análisis y validación, la fiscalía indicó que avanzará en la extracción de restos de otros 14 ex trabajadores de Enami Ventanas que se encuentran en distintos cementerios de la zona e, incluso, en la Región de Coquimbo.
Para el abogado que conduce la causa, Raúl Meza, esto abre una serie de opciones en la vía jurídica, ya que de confirmarse el vínculo entre la presencia de estos metales y la causa de muerte, podría haber varias personas más en la misma situación, entre ellos civiles, no trabajadores de Codelco, quienes podrían llegar a tribunales. También en la vía administrativa, las autoridades podrían abrirse a una compensación y un plan de manejo más intenso, como ocurrió en el caso de los polimetales detectados en Arica.
Recordemos que este sector es considerado una zona saturada de contaminación ante la gran presencia de empresas en los alrededores y los varios casos de nubes tóxicas detectados, como en la localidad de La Greda, donde se debió trasladar una escuela ante la presencia de metales pesados.
Sobre los impactos se refirió Sergio Silva, Presidente del Sindicato del Puerto de Ventanas, quien señaló que “esta zona, todo el mundo sabe, está castigada en muchos ámbitos. Nuestra costa tiene agotamiento, y nos lleva a dejar las labores. La pregunta es si el cobre, y Codelco, cuánto ayuda a nuestra actividad, ya que sólo ha traído resultados negativos”.
Desde el Ministerio del Medioambiente indicaron que están conscientes de esta situación en la bahía de Quinteros y que existe un plan de mitigación para el sector. Además, indicaron que están trabajando en una serie de reglamentos como la norma del PPM 2,5 o la norma de fundiciones, para regular este tipo de casos. Sin embargo, desde la Seremi de Salud, responsable del monitoreo de la población, aún no se han referido al respecto.
