Luego que se reactivara el conflicto portuario en San Antonio, por la no reincorporación de 200 trabajadores una vez finalizado el paro nacional que se extendió por casi un mes, anoche se logró llegar a un acuerdo que evitó que nuevamente se extendiera la movilización a nivel país.
El acuerdo consiste en la reincorporación de los trabajadores en cuestión, además de la implementación de una mesa de dialogo que trabaje en el mecanismo de pago retroactivo de las horas de colación y otros problemas que afectan a los trabajadores del terminal.
La rápida reacción de los puertos del país en apoyo al terminal de San Antonio dejó de manifiesto el nivel de unidad que alcanzó el gremio, luego de casi un mes de movilizaciones y que contrasta con lo vivido en años anteriores, cuando las paralizaciones portuarias se efectuaban por separado.
Precisamente este espíritu de unidad es el que rescata el sector y el cual pretenden mantener en el futuro para alcanzar reformas que reglamenten de manera definitiva el trabajo en los puertos del país.
Eduardo Araya, vocero de los trabajadores del Puerto de San Antonio, afirmó que “pese a las distancias, la reacción de los compañeros en el país fue bastante rápida, y que de no haber alcanzado un acuerdo en la noche, esta mañana amanecían todos los puertos del país paralizados nuevamente, eso demuestra que ahora somos un solo trabajador portuario”, afirmó.
Esta unidad es la que pretenden mantener ahora con una nueva administración y en donde se busca impulsar, por ejemplo, un estatuto particular para el trabajador portuario, similar al que existe para regular el trabajo campesino.
José Agurto, vocero de la Unión Portuaria del Biobío, aseguró que este tema se viene planteando desde hace muchos años y que debe ser elaborado con la participación de los trabajadores.
“Hemos pedido una reglamentación portuaria, no una ley. No podemos ser trabajadores movilizados cada tres meses. Los empleadores no cumplen con su parte, y necesitamos reglas que indiquen ello, establecidas en conjunto el Gobierno, las empresas y los trabajadores”.
Por su parte Joan Parra, vocero de la Unión Portuaria de Chile y vicepresidente de la Federación de Trabajadores Portuarios de Iquique, agregó que la actual legislación no especifica las condiciones del trabajo portuario. “Desde el 2000 cuando se privatizan los puertos, se hace una ley que no especifica contratos ni modo de trabajo, por lo que es necesario legislar y regular el sector portuario”.
Con el acuerdo alcanzado en San Antonio, desde esta madrugada todos los puertos del país funcionan normalmente, a la espera de los resultados que se consigan en las mesas de trabajo que ya se instalaron durante la jornada de ayer.
Durante este martes se desarrollará una reunión de los dirigentes pertenecientes a la Unión Portuaria Nacional para hacer un balance del último mes de movilizaciones y proyectar el trabajo de la Agrupación pensando en la administración de la presidenta electa Michelle Bachelet.
Luego que se reactivara el conflicto portuario en San Antonio, por la no reincorporación de 200 trabajadores una vez finalizado el paro nacional que se extendió por casi un mes, anoche se logró llegar a un acuerdo que evitó que nuevamente se extendiera la movilización a nivel país.
El acuerdo consiste en la reincorporación de los trabajadores en cuestión, además de la implementación de una mesa de dialogo que trabaje en el mecanismo de pago retroactivo de las horas de colación y otros problemas que afectan a los trabajadores del terminal.
La rápida reacción de los puertos del país en apoyo al terminal de San Antonio dejó de manifiesto el nivel de unidad que alcanzó el gremio, luego de casi un mes de movilizaciones y que contrasta con lo vivido en años anteriores, cuando las paralizaciones portuarias se efectuaban por separado.
Precisamente este espíritu de unidad es el que rescata el sector y el cual pretenden mantener en el futuro para alcanzar reformas que reglamenten de manera definitiva el trabajo en los puertos del país.
Eduardo Araya, vocero de los trabajadores del Puerto de San Antonio, afirmó que “pese a las distancias, la reacción de los compañeros en el país fue bastante rápida, y que de no haber alcanzado un acuerdo en la noche, esta mañana amanecían todos los puertos del país paralizados nuevamente, eso demuestra que ahora somos un solo trabajador portuario”, afirmó.
Esta unidad es la que pretenden mantener ahora con una nueva administración y en donde se busca impulsar, por ejemplo, un estatuto particular para el trabajador portuario, similar al que existe para regular el trabajo campesino.
José Agurto, vocero de la Unión Portuaria del Biobío, aseguró que este tema se viene planteando desde hace muchos años y que debe ser elaborado con la participación de los trabajadores.
“Hemos pedido una reglamentación portuaria, no una ley. No podemos ser trabajadores movilizados cada tres meses. Los empleadores no cumplen con su parte, y necesitamos reglas que indiquen ello, establecidas en conjunto el Gobierno, las empresas y los trabajadores”.
Por su parte Joan Parra, vocero de la Unión Portuaria de Chile y vicepresidente de la Federación de Trabajadores Portuarios de Iquique, agregó que la actual legislación no especifica las condiciones del trabajo portuario. “Desde el 2000 cuando se privatizan los puertos, se hace una ley que no especifica contratos ni modo de trabajo, por lo que es necesario legislar y regular el sector portuario”.
Con el acuerdo alcanzado en San Antonio, desde esta madrugada todos los puertos del país funcionan normalmente, a la espera de los resultados que se consigan en las mesas de trabajo que ya se instalaron durante la jornada de ayer.
Durante este martes se desarrollará una reunión de los dirigentes pertenecientes a la Unión Portuaria Nacional para hacer un balance del último mes de movilizaciones y proyectar el trabajo de la Agrupación pensando en la administración de la presidenta electa Michelle Bachelet.
Luego que se reactivara el conflicto portuario en San Antonio, por la no reincorporación de 200 trabajadores una vez finalizado el paro nacional que se extendió por casi un mes, anoche se logró llegar a un acuerdo que evitó que nuevamente se extendiera la movilización a nivel país.
El acuerdo consiste en la reincorporación de los trabajadores en cuestión, además de la implementación de una mesa de dialogo que trabaje en el mecanismo de pago retroactivo de las horas de colación y otros problemas que afectan a los trabajadores del terminal.
La rápida reacción de los puertos del país en apoyo al terminal de San Antonio dejó de manifiesto el nivel de unidad que alcanzó el gremio, luego de casi un mes de movilizaciones y que contrasta con lo vivido en años anteriores, cuando las paralizaciones portuarias se efectuaban por separado.
Precisamente este espíritu de unidad es el que rescata el sector y el cual pretenden mantener en el futuro para alcanzar reformas que reglamenten de manera definitiva el trabajo en los puertos del país.
Eduardo Araya, vocero de los trabajadores del Puerto de San Antonio, afirmó que “pese a las distancias, la reacción de los compañeros en el país fue bastante rápida, y que de no haber alcanzado un acuerdo en la noche, esta mañana amanecían todos los puertos del país paralizados nuevamente, eso demuestra que ahora somos un solo trabajador portuario”, afirmó.
Esta unidad es la que pretenden mantener ahora con una nueva administración y en donde se busca impulsar, por ejemplo, un estatuto particular para el trabajador portuario, similar al que existe para regular el trabajo campesino.
José Agurto, vocero de la Unión Portuaria del Biobío, aseguró que este tema se viene planteando desde hace muchos años y que debe ser elaborado con la participación de los trabajadores.
“Hemos pedido una reglamentación portuaria, no una ley. No podemos ser trabajadores movilizados cada tres meses. Los empleadores no cumplen con su parte, y necesitamos reglas que indiquen ello, establecidas en conjunto el Gobierno, las empresas y los trabajadores”.
Por su parte Joan Parra, vocero de la Unión Portuaria de Chile y vicepresidente de la Federación de Trabajadores Portuarios de Iquique, agregó que la actual legislación no especifica las condiciones del trabajo portuario. “Desde el 2000 cuando se privatizan los puertos, se hace una ley que no especifica contratos ni modo de trabajo, por lo que es necesario legislar y regular el sector portuario”.
Con el acuerdo alcanzado en San Antonio, desde esta madrugada todos los puertos del país funcionan normalmente, a la espera de los resultados que se consigan en las mesas de trabajo que ya se instalaron durante la jornada de ayer.
Durante este martes se desarrollará una reunión de los dirigentes pertenecientes a la Unión Portuaria Nacional para hacer un balance del último mes de movilizaciones y proyectar el trabajo de la Agrupación pensando en la administración de la presidenta electa Michelle Bachelet.
