Este lunes, representantes de diversas organizaciones de profesionales del ámbito de la salud se reunieron con el ministro de la cartera, Jaime Mañalich, para oficializar la propuesta sobre los cupos para la formación de 443 nuevos especialistas.
Se trata de una iniciativa que busca complementar la reciente promulgación de la ley que mejora las condiciones de los médicos, contexto en el que si bien han aumentado la cantidad de becas por año, según los expertos que participan de este proceso, aún existe una inequidad en la concentración de los especialistas.
De hecho, en diciembre del año pasado el propio ministro Mañalich recibió un documento titulado “La realidad de las especialidades médicas en Chile: búsqueda de soluciones, cobertura y calidad”, a través del cual las organizaciones manifiestan la necesidad de solucionar el problema de la falta de especialistas, así como la calidad de éstos, en el sistema de salud público.
Con los recursos económicos ya asegurados a través del presupuesto de 2014, el ministro de Salud, junto con manifestar su satisfacción por esta nueva instancia, destacando que ya se han generado 370 cupos del total, se refirió también al trabajo de la comisión.
“Estamos muy contentos porque se nos ha hecho entrega del listado completo de los nuevos cupos para nuevos especialistas. Este comité se transforma en algo regular mediante un decreto ministerial, es un trabajo que va a sesionar al menos una vez por mes”, indicó.
Entre los objetivos que se propuso la comisión aparece la posibilidad de resolver la forma en que las 443 becas cuenten efectivamente con cupos en las distintas universidades del país; asegurar a los becados su instalación laboral en el servicio público, por un periodo de seis años, luego de finalizar su formación; además de la realización de un levantamiento de las capacidades de formación de médicos que existen en todas las regiones del país, así como determinar la necesidad de instalar nuevas facultades de medicina.
Como medidas para mitigar la falta de especialistas y la mala distribución de estos en el país, los expertos propusieron incrementar los ingresos de los profesionales, así como el reconocimiento de los jefes de servicio.
Una de las organizaciones integrantes de esta comisión es el Colegio Médico, cuyo presidente, doctor Enrique Paris, se refirió al origen del déficit de especialistas en la salud pública: “El déficit se arrastra por años, cuando las patologías AUGE requieren más especialistas. Se comenzó a contratar especialistas en el sistema privado, lo que se vio como una oferta laboral llamativa, mucha gente se salió del sistema público. El 60% de los médicos trabaja en el sistema privado, y el restante al sistema público, que es el que abarca al 80% de la población”.
Según el doctor Paris, en Chile existe una tasa de 1,8 médicos por cada mil habitantes, pero las necesidades apuntan a aumentarla a 3,8. Eso sí, considerando que se requiere una distribución en todo el país y no concentrados en las Regiones Metropolitana, Biobío y Valparaíso, donde trabajan el 57% de los especialistas.
En esa misma línea, la doctora Gloria López, presidenta de la Asociación de Sociedades Científicas–Médicas de Chile (Asocimed), otra de las instancias que participa de la comisión, también destacó la necesidad de fortalecer la salud pública.
Para la académica de la Universidad de Chile existen dos elementos fundamentales que permiten explicar el problema de la falta de especialistas, ya que “derivado de la necesidad de tecnología y del deterioro de la mayoría de hospitales públicos, muchas especialistas han migrado a los servicios privados, donde cuentan con tecnología. La mayoría de los especialistas atiende a la minoría de los pacientes de isapres”.
A las anteriores organizaciones se suma la Asociación de Facultades de Medicina de Chile (Asofamech), todas las cuales debieran reunirse mensualmente para mantener un seguimiento del proceso, el que además considera el financiamiento de tutores y profesores, el reforzamiento de las actividades de las Escuelas de Educación Médica de las distintas facultades, así como el potenciamiento de las universidades regionales, ya sea abriendo cupos de formación de especialistas, como también colaborando con las universidad tradicionales.