Desde el año pasado que el Colegio Médico viene denunciando la alta presencia de contaminación por metales en el agua, aire y suelo en localidades de la región de Arica y Parinacota. De hecho, el monitoreo se inició en 1998.
El presidente del departamento de Medioambiente de la asociación, Andrei Tchernitchin, dio a conocer muestras de laboratorio que revelan índices a noviembre de 2013, donde se encontraron con cerca de dos millones de toneladas de residuos con altas cantidades de arsénico, plomo, níquel, boro, y una serie de otros elementos tóxicos.
Estarían afectados el Valle de Azapa, Putre, Pocapilla en la Laguna Cotacotami, donde nace el río Lauca, entre otros sectores.
Los residuos pesquisados estarían muy por sobre la norma, lo que según el doctor Tchernitchin, académico de la Universidad de Chile obliga la instalación de plantas de tratamiento y la entrega de agua potable.
En este sentido el especialista explicó que “creemos que la prioridades actuales son arsénico, plomo, manganeso y otros polimetales, y que hay soluciones colocando plantas de tratamientos. En los pueblos muy pequeños no se justificaría una planta de tratamiento, sino que a sus habitantes se les entregue agua potable para poder cocinar y para consumir como agua, porque de lo contrario se producen efectos”.
El toxicólogo explicó los diversos efectos, los que se condicen con las denuncias que la comunidad viene haciendo desde hace años: mutaciones, altos índices de cáncer, malformaciones fetales y otras enfermedades.
Especialmente preocupante resulta la alta presencia de plomo en el suelo, que afecta el desempeño escolar, genera conductas agresivas y delictivas.
Según Tchernitchin, del plomo y del arsénico se desprenden varias “lacras de la sociedad”: “También produce cambios en la personalidad, como por ejemplo, conductas agresivas y también se ha relacionado con conductas delictivas en quienes fueron expuestos pre natalmente a plomo, además, produce infertilidad, abortos espontáneos y hay una relación entre exposición pre natal o post natal temprana al plomo y tendencia a la drogadicción más tarde en la vida. Varias lacras de nuestra sociedad son producidos por exposición temprana a tóxicos metálicos”.
Otro elemento altamente preocupante y que no tiene una norma que rija en Chile, pero sí en la Organización Mundial de la Salud (OMS, es el Boro, que en Arica está altamente vigente.
Esto llamó a la comunidad a programar manifestaciones, según anunció el vocero de la Coordinadora Regional de Conflictos Socioambientales de Arica y Parinacota, Aníbal Díaz.
“La comunidad entera, va a tener que asumir un rol de protesta en torno a esta catástrofe ambiental, por lo que estamos convocando a una movilización el 29 de marzo en Arica para que toda la comunidad salga a repudiar este grave daño a la salud humana, especialmente a los niños y mujeres”, anunció el dirigente.
Díaz, añadió que el Estado ha negado sistemáticamente la contaminación ambiental en la región producto de actividades mineras, de las cuales, algunas todavía están ejercicio, como la mina Choquelimpie, con capitales ligados al grupo Angelini.
El dirigente acusó que se ha ocultado información, por lo cual mantienen desde el año pasado una demanda contra El Estado.
Desde el año pasado que el Colegio Médico viene denunciando la alta presencia de contaminación por metales en el agua, aire y suelo en localidades de la región de Arica y Parinacota. De hecho, el monitoreo se inició en 1998.
El presidente del departamento de Medioambiente de la asociación, Andrei Tchernitchin, dio a conocer muestras de laboratorio que revelan índices a noviembre de 2013, donde se encontraron con cerca de dos millones de toneladas de residuos con altas cantidades de arsénico, plomo, níquel, boro, y una serie de otros elementos tóxicos.
Estarían afectados el Valle de Azapa, Putre, Pocapilla en la Laguna Cotacotami, donde nace el río Lauca, entre otros sectores.
Los residuos pesquisados estarían muy por sobre la norma, lo que según el doctor Tchernitchin, académico de la Universidad de Chile obliga la instalación de plantas de tratamiento y la entrega de agua potable.
En este sentido el especialista explicó que “creemos que la prioridades actuales son arsénico, plomo, manganeso y otros polimetales, y que hay soluciones colocando plantas de tratamientos. En los pueblos muy pequeños no se justificaría una planta de tratamiento, sino que a sus habitantes se les entregue agua potable para poder cocinar y para consumir como agua, porque de lo contrario se producen efectos”.
El toxicólogo explicó los diversos efectos, los que se condicen con las denuncias que la comunidad viene haciendo desde hace años: mutaciones, altos índices de cáncer, malformaciones fetales y otras enfermedades.
Especialmente preocupante resulta la alta presencia de plomo en el suelo, que afecta el desempeño escolar, genera conductas agresivas y delictivas.
Según Tchernitchin, del plomo y del arsénico se desprenden varias “lacras de la sociedad”: “También produce cambios en la personalidad, como por ejemplo, conductas agresivas y también se ha relacionado con conductas delictivas en quienes fueron expuestos pre natalmente a plomo, además, produce infertilidad, abortos espontáneos y hay una relación entre exposición pre natal o post natal temprana al plomo y tendencia a la drogadicción más tarde en la vida. Varias lacras de nuestra sociedad son producidos por exposición temprana a tóxicos metálicos”.
Otro elemento altamente preocupante y que no tiene una norma que rija en Chile, pero sí en la Organización Mundial de la Salud (OMS, es el Boro, que en Arica está altamente vigente.
Esto llamó a la comunidad a programar manifestaciones, según anunció el vocero de la Coordinadora Regional de Conflictos Socioambientales de Arica y Parinacota, Aníbal Díaz.
“La comunidad entera, va a tener que asumir un rol de protesta en torno a esta catástrofe ambiental, por lo que estamos convocando a una movilización el 29 de marzo en Arica para que toda la comunidad salga a repudiar este grave daño a la salud humana, especialmente a los niños y mujeres”, anunció el dirigente.
Díaz, añadió que el Estado ha negado sistemáticamente la contaminación ambiental en la región producto de actividades mineras, de las cuales, algunas todavía están ejercicio, como la mina Choquelimpie, con capitales ligados al grupo Angelini.
El dirigente acusó que se ha ocultado información, por lo cual mantienen desde el año pasado una demanda contra El Estado.
Desde el año pasado que el Colegio Médico viene denunciando la alta presencia de contaminación por metales en el agua, aire y suelo en localidades de la región de Arica y Parinacota. De hecho, el monitoreo se inició en 1998.
El presidente del departamento de Medioambiente de la asociación, Andrei Tchernitchin, dio a conocer muestras de laboratorio que revelan índices a noviembre de 2013, donde se encontraron con cerca de dos millones de toneladas de residuos con altas cantidades de arsénico, plomo, níquel, boro, y una serie de otros elementos tóxicos.
Estarían afectados el Valle de Azapa, Putre, Pocapilla en la Laguna Cotacotami, donde nace el río Lauca, entre otros sectores.
Los residuos pesquisados estarían muy por sobre la norma, lo que según el doctor Tchernitchin, académico de la Universidad de Chile obliga la instalación de plantas de tratamiento y la entrega de agua potable.
En este sentido el especialista explicó que “creemos que la prioridades actuales son arsénico, plomo, manganeso y otros polimetales, y que hay soluciones colocando plantas de tratamientos. En los pueblos muy pequeños no se justificaría una planta de tratamiento, sino que a sus habitantes se les entregue agua potable para poder cocinar y para consumir como agua, porque de lo contrario se producen efectos”.
El toxicólogo explicó los diversos efectos, los que se condicen con las denuncias que la comunidad viene haciendo desde hace años: mutaciones, altos índices de cáncer, malformaciones fetales y otras enfermedades.
Especialmente preocupante resulta la alta presencia de plomo en el suelo, que afecta el desempeño escolar, genera conductas agresivas y delictivas.
Según Tchernitchin, del plomo y del arsénico se desprenden varias “lacras de la sociedad”: “También produce cambios en la personalidad, como por ejemplo, conductas agresivas y también se ha relacionado con conductas delictivas en quienes fueron expuestos pre natalmente a plomo, además, produce infertilidad, abortos espontáneos y hay una relación entre exposición pre natal o post natal temprana al plomo y tendencia a la drogadicción más tarde en la vida. Varias lacras de nuestra sociedad son producidos por exposición temprana a tóxicos metálicos”.
Otro elemento altamente preocupante y que no tiene una norma que rija en Chile, pero sí en la Organización Mundial de la Salud (OMS, es el Boro, que en Arica está altamente vigente.
Esto llamó a la comunidad a programar manifestaciones, según anunció el vocero de la Coordinadora Regional de Conflictos Socioambientales de Arica y Parinacota, Aníbal Díaz.
“La comunidad entera, va a tener que asumir un rol de protesta en torno a esta catástrofe ambiental, por lo que estamos convocando a una movilización el 29 de marzo en Arica para que toda la comunidad salga a repudiar este grave daño a la salud humana, especialmente a los niños y mujeres”, anunció el dirigente.
Díaz, añadió que el Estado ha negado sistemáticamente la contaminación ambiental en la región producto de actividades mineras, de las cuales, algunas todavía están ejercicio, como la mina Choquelimpie, con capitales ligados al grupo Angelini.
El dirigente acusó que se ha ocultado información, por lo cual mantienen desde el año pasado una demanda contra El Estado.
