Por medio de un oficio enviado al Servicio de Impuestos Internos (SII) y al Instituto Nacional del Deporte (IND), el diputado Jaime Pilowsky, busca establecer un mayor grado de fiscalización respecto a la ley de donaciones deportivas, que entrega una serie de franquicias y beneficios tributarios a las personas y empresas que hagan aportes a las actividades relacionadas con el deporte.
Los particulares que realicen donaciones con fines deportivos pueden rebajar, como un crédito, una determinada parte de los montos efectivamente donados, del impuesto a la renta de primera categoría o global complementario.
El parlamentario se mostró preocupado al respecto, indicando que es indispensable “velar porque las franquicias se utilicen de buena manera y los recursos lleguen a los deportistas”.
“Lo más importante es que las franquicias que establece, en general la ley, puedan ser bien utilizadas. En la ley de donaciones se establece una franquicia, para que las empresas puedan descontar, parte de sus impuestos, cuando son aportes en materia deportiva. Lo que nos interesa es visualizar, a través del informe que hemos solicitado por la Cámara de Diputados, en nuestro rol fiscalizador, que esta franquicia esté utilizada adecuadamente”.
Las motivaciones para el envío de este oficio nacieron del mismo diputado, quien aseguró recibir reclamos por parte de deportistas, que creen que los recursos se estarían desviando con fines diferentes a los que establece la ley. Hecho que podría, no sólo, perjudicar al deporte, sino que al mismo tiempo, descontar tributos de donde no corresponde.
“Me ha llegado, por parte de algunos deportistas que me han planteado, en mi calidad de presidente de la comisión de deportes, que en muchas ocasiones lo que se hace es: establecer clubes deportivos, o instituciones asociadas a algunas empresas, que finalmente se utilizan para actividades que van vinculadas, más bien a fiestas de final de año, en algunas ocasiones, y no para actividades deportivas propiamente tal”.
Los planteamientos establecidos por los deportistas podrían tener sentido, si se considera que hubo 1.861 postulaciones para el Concurso 2014 de Donaciones con fines deportivos, acogidos al sistema de franquicia tributaria; y que el monto de los recursos donados se eleva a los 29 mil millones de pesos, además de ser el “Deporte Laboral” la modalidad más favorecida.
Esta situación podría ser aún más compleja, ya que según fuentes, cercanas Instituto Nacional del Deporte, indicaron que no habría “una cabeza” encargada de fiscalizar la situación.
Las instituciones oficiadas tienen el plazo de un mes para emitir una respuesta, que sería analizada por la comisión y luego dada a conocer a la opinión pública.
Por medio de un oficio enviado al Servicio de Impuestos Internos (SII) y al Instituto Nacional del Deporte (IND), el diputado Jaime Pilowsky, busca establecer un mayor grado de fiscalización respecto a la ley de donaciones deportivas, que entrega una serie de franquicias y beneficios tributarios a las personas y empresas que hagan aportes a las actividades relacionadas con el deporte.
Los particulares que realicen donaciones con fines deportivos pueden rebajar, como un crédito, una determinada parte de los montos efectivamente donados, del impuesto a la renta de primera categoría o global complementario.
El parlamentario se mostró preocupado al respecto, indicando que es indispensable “velar porque las franquicias se utilicen de buena manera y los recursos lleguen a los deportistas”.
“Lo más importante es que las franquicias que establece, en general la ley, puedan ser bien utilizadas. En la ley de donaciones se establece una franquicia, para que las empresas puedan descontar, parte de sus impuestos, cuando son aportes en materia deportiva. Lo que nos interesa es visualizar, a través del informe que hemos solicitado por la Cámara de Diputados, en nuestro rol fiscalizador, que esta franquicia esté utilizada adecuadamente”.
Las motivaciones para el envío de este oficio nacieron del mismo diputado, quien aseguró recibir reclamos por parte de deportistas, que creen que los recursos se estarían desviando con fines diferentes a los que establece la ley. Hecho que podría, no sólo, perjudicar al deporte, sino que al mismo tiempo, descontar tributos de donde no corresponde.
“Me ha llegado, por parte de algunos deportistas que me han planteado, en mi calidad de presidente de la comisión de deportes, que en muchas ocasiones lo que se hace es: establecer clubes deportivos, o instituciones asociadas a algunas empresas, que finalmente se utilizan para actividades que van vinculadas, más bien a fiestas de final de año, en algunas ocasiones, y no para actividades deportivas propiamente tal”.
Los planteamientos establecidos por los deportistas podrían tener sentido, si se considera que hubo 1.861 postulaciones para el Concurso 2014 de Donaciones con fines deportivos, acogidos al sistema de franquicia tributaria; y que el monto de los recursos donados se eleva a los 29 mil millones de pesos, además de ser el “Deporte Laboral” la modalidad más favorecida.
Esta situación podría ser aún más compleja, ya que según fuentes, cercanas Instituto Nacional del Deporte, indicaron que no habría “una cabeza” encargada de fiscalizar la situación.
Las instituciones oficiadas tienen el plazo de un mes para emitir una respuesta, que sería analizada por la comisión y luego dada a conocer a la opinión pública.
Por medio de un oficio enviado al Servicio de Impuestos Internos (SII) y al Instituto Nacional del Deporte (IND), el diputado Jaime Pilowsky, busca establecer un mayor grado de fiscalización respecto a la ley de donaciones deportivas, que entrega una serie de franquicias y beneficios tributarios a las personas y empresas que hagan aportes a las actividades relacionadas con el deporte.
Los particulares que realicen donaciones con fines deportivos pueden rebajar, como un crédito, una determinada parte de los montos efectivamente donados, del impuesto a la renta de primera categoría o global complementario.
El parlamentario se mostró preocupado al respecto, indicando que es indispensable “velar porque las franquicias se utilicen de buena manera y los recursos lleguen a los deportistas”.
“Lo más importante es que las franquicias que establece, en general la ley, puedan ser bien utilizadas. En la ley de donaciones se establece una franquicia, para que las empresas puedan descontar, parte de sus impuestos, cuando son aportes en materia deportiva. Lo que nos interesa es visualizar, a través del informe que hemos solicitado por la Cámara de Diputados, en nuestro rol fiscalizador, que esta franquicia esté utilizada adecuadamente”.
Las motivaciones para el envío de este oficio nacieron del mismo diputado, quien aseguró recibir reclamos por parte de deportistas, que creen que los recursos se estarían desviando con fines diferentes a los que establece la ley. Hecho que podría, no sólo, perjudicar al deporte, sino que al mismo tiempo, descontar tributos de donde no corresponde.
“Me ha llegado, por parte de algunos deportistas que me han planteado, en mi calidad de presidente de la comisión de deportes, que en muchas ocasiones lo que se hace es: establecer clubes deportivos, o instituciones asociadas a algunas empresas, que finalmente se utilizan para actividades que van vinculadas, más bien a fiestas de final de año, en algunas ocasiones, y no para actividades deportivas propiamente tal”.
Los planteamientos establecidos por los deportistas podrían tener sentido, si se considera que hubo 1.861 postulaciones para el Concurso 2014 de Donaciones con fines deportivos, acogidos al sistema de franquicia tributaria; y que el monto de los recursos donados se eleva a los 29 mil millones de pesos, además de ser el “Deporte Laboral” la modalidad más favorecida.
Esta situación podría ser aún más compleja, ya que según fuentes, cercanas Instituto Nacional del Deporte, indicaron que no habría “una cabeza” encargada de fiscalizar la situación.
Las instituciones oficiadas tienen el plazo de un mes para emitir una respuesta, que sería analizada por la comisión y luego dada a conocer a la opinión pública.
