A inicios de junio comenzaron las conversaciones con el renovado directorio de la empresa EFE y las autoridades de Gobierno, que tenían como finalidad realizar un trabajo conjunto para la construcción armónica de un proyecto complejo, que busca aumentar en un 80% el flujo de pasajeros entre la capital regional de O’Higgins y la Estación Central, en Santiago, pasando por trece comunas.
En una primera reunión los alcaldes plantearon su propuesta de túnel subterráneo y la empresa se dio quince días para responder. Como informamos en Radio Universidad de Chile esa fecha se fue aplazando.
Este martes 15 por por la tarde, previo al feriado de la Virgen del Carmen, la empresa se pronunció. Desde EFE señalaron a nuestra emisora que “el costo de soterrar una parte del trazado implicaría una inversión adicional para el proyecto, estimada (a nivel de diseño preliminar), en a lo menos mil millones de dólares y además desechar la inversión ya efectuada. Este escenario hace inviable el proyecto”.
La empresa fue clara en señalar que su prioridad, desde que tomó el proyecto en mayo, ha sido escuchar a los alcaldes y a la comunidad, desde su propia mirada y realidad, y que continuarán “con una política de puertas abiertas con los municipios, la comunidad y los técnicos, de modo de construir en conjunto y según sus necesidades, las soluciones de conectividad que permitan mejorar la situación que enfrentan hoy”, señalaron.
Sin embargo, por ahora, priman las desconfianzas. El alcalde de la comuna de El Bosque, el socialista Sadi Melo, afirmó que pedirán por Ley de Transparencia las razones del aumento del costo del proyecto en general, que pasó de 270 millones de dólares a 430 millones, un tema que ya se había anticipado en la prensa, pero además adelantó otras gestiones que realizarán para confirmar si existen “segundas intenciones en este proyecto”.
“Vamos a preguntar a propósito de cuánto es el negocio de la carga que existe hoy día en Ferrocarriles. Con qué empresa se contrata, cuántos montos significa eso para el Estado de Chile, porque, yo me he ido formando la impresión técnica de que este proyecto tiene un fundamento en términos del traslado de pasajeros, pero sin embargo, yo creo que lo que está en juego es, claramente, el negocio de la carga”, afirmó el alcalde.
El jefe comunal sostuvo que si no se soterran al menos las zonas más críticas de las comunas y se reducen las externalidades negativas, cientos de ciudadanos se van a ver afectados por un negocio. “Así, el lugar de Santiago que tiene la peor calidad de vida va a seguir siendo impactado en segregación, en ruido, en temas ambientales, en una falta de vinculación entre las comunas”, señaló.
Por otro lado, los parlamentarios que han respaldado la iniciativa ciudadana no habían sido informados formalmente de esta decisión. Se trata del diputado socialista Daniel Melo, Presidente de la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara Baja, su par por la comuna de San Bernardo, Leonardo Soto, el diputado del Movimiento Amplitud, Pedro Browne, el diputado y presidente del partido comunista Guillermo Teillier y el senador socialista Carlos Montes.
El diputado Soto indicó que hace tiempo sabían que los recursos de EFE podrían no ser suficientes, pero afirmó que habían levantado una propuesta de financiamiento que también habría sido rechazada en la reunión de ese martes por el Ministerio de Transportes.
“Era pedir a nuestro gobierno que pusiera los subsidios necesarios para mejorar esta obra de transporte público, hacerse cargo de ciertas externalidades, un subsidio concordante con las necesidades con los peatones de la zona sur de Santiago, lo que respondía también al contraste con otro proyecto de conectividad, la Autopista Vespucio Oriente, que también está en una fase de diseño y pronta en ejecución y que sí recibe subsidios del Estado, 400 millones de dólares”.
El parlamentario añadió que, en la llamada “AVO”, no se reembolsa el subsidio del Estado y que la vía, que beneficiará a particulares, sí será subterránea. En ese sentido, lamentó la diferencia en las decisiones de la autoridad. “Creemos que se deben poner los recursos donde corresponde y beneficiar a la gente que lo necesita, no a los más ricos del país”, afirmó y añadió: “Me parece decepcionante que el Ministro de Transportes haya dicho a los alcaldes que va a mantener este modelo tal como está”.
Las autoridades locales y los parlamentarios se reunirán la próxima semana para analizar cómo enfrentarán esta situación. Por su parte los ciudadanos han mantenido movilizaciones durante todo este tiempo, incluso sin haber sido informados de la inviabilidad de la propuesta de túnel, la que fue ampliamente aprobada en plebiscitos comunales y otras instancias. José Medel, presidente de la Junta de Vecinos de La Victoria, se refirió a las razones que los mantienen, afirmó, “en plena batalla”.
“Nosotros no nos vamos a quedar tranquilos pro supuesto y tenemos una movilización para este sábado a las 12 del día en el callejón Lo Ovalle con la calle Maipú, porque nos vamos a seguir movilizando. No vamos a quedarnos quietos porque no queremos el tren cómo está. Tenemos la panamericana por un lado, la línea por el otro, parecemos un gueto”, dijo el dirigente vecinal.
El dirigente sostuvo que mantener el tren en las condiciones actuales les implica asumir resignadamente la construcción de iniciativas que “vienen a profundizar las desigualdades en la capital” y a “tener una ciudad para ricos y otra para pobres”.