La repatriación de capitales nunca estuvo en el corazón de la Reforma Tributaria, sin embargo fue uno de los puntos clave para que la Alianza accediera a firmar el Protocolo de Acuerdo consensuado entre el Senado y el Ejecutivo.
Según uno de sus principales promotores, el senador Juan Pablo Letelier (PS), la medida podría recaudar alrededor de mil 200 millones de dólares si es que se aprueba tal cual como está, con una tasa de retorno del 8 por ciento.
“Se introducirá una regulación transitoria (un año) para la declaración de rentas capitales que se encuentran en el exterior, siguiendo los más estrictos estándares de la OCDE sobre la materia”, dice el protocolo.
La iniciativa fue analizada con anterioridad. El último intento fue en el contexto del terremoto y la necesidad de ingresos extras para la reconstrucción. Esto no fructificó en el gobierno de Sebastián Piñera y tuvo en el ministro de Defensa Jorge Burgos, entonces diputado, a uno de sus principales detractores.
El temor de entonces y ahora es el mismo, que el incentivo a regularizar la situación tributaria de estos dineros de dudoso origen se transforme en el blanqueo de activos provenientes de paraísos fiscales, donde más de un político y empresario chileno tiene puestos sus dineros para invertir eludiendo el recaudo chileno.
Hasta el momento todo indica que “esto va a pasar colado”, sostuvo el diputado Pablo Lorenzini (DC), ya que aprobarán la reforma global, teniendo que aceptar algunos resquicios alcanzados en el polémico protocolo.
Esto ya está zanjado, a juicio del senador Carlos Montes, quien duda que haya votos suficientes en la Sala de la Cámara de Diputados para objetar el artículo que hace referencia a la repatriación de capitales.
“Nosotros nunca estuvimos de acuerdo con esto”, afirmó el senador Carlos Montes, aludiendo también a sus pares de la Nueva Mayoría que integraron la Comisión de Hacienda del Senado. “Ese fue un acuerdo entre el ministro Arenas y (Juan Pablo) Letelier”, sostuvo, traspasando la responsabilidad a los protagonistas de esta indicación incorporada.
Según el senador “esto puede acarrear problemas y sanciones de organismos internacionales”, cuestión que respalda también el diputado Lorenzini, ya que contraviene acuerdos suscritos por Chile.
Según Letelier, se crearía un registro se capitales que ingresen durante el período de apertura, sin embargo distintos especialistas han advertido las dificultades que existen para controlar el origen de los dineros que pueden provenir del lavado de dinero, el contrabando de armas, el narcotráfico.
Otras voces han sido críticas con las medidas ya que “premia” a quienes en algún momento debieron pagar impuestos y no lo hicieron.
La repatriación de capitales nunca estuvo en el corazón de la Reforma Tributaria, sin embargo fue uno de los puntos clave para que la Alianza accediera a firmar el Protocolo de Acuerdo consensuado entre el Senado y el Ejecutivo.
Según uno de sus principales promotores, el senador Juan Pablo Letelier (PS), la medida podría recaudar alrededor de mil 200 millones de dólares si es que se aprueba tal cual como está, con una tasa de retorno del 8 por ciento.
“Se introducirá una regulación transitoria (un año) para la declaración de rentas capitales que se encuentran en el exterior, siguiendo los más estrictos estándares de la OCDE sobre la materia”, dice el protocolo.
La iniciativa fue analizada con anterioridad. El último intento fue en el contexto del terremoto y la necesidad de ingresos extras para la reconstrucción. Esto no fructificó en el gobierno de Sebastián Piñera y tuvo en el ministro de Defensa Jorge Burgos, entonces diputado, a uno de sus principales detractores.
El temor de entonces y ahora es el mismo, que el incentivo a regularizar la situación tributaria de estos dineros de dudoso origen se transforme en el blanqueo de activos provenientes de paraísos fiscales, donde más de un político y empresario chileno tiene puestos sus dineros para invertir eludiendo el recaudo chileno.
Hasta el momento todo indica que “esto va a pasar colado”, sostuvo el diputado Pablo Lorenzini (DC), ya que aprobarán la reforma global, teniendo que aceptar algunos resquicios alcanzados en el polémico protocolo.
Esto ya está zanjado, a juicio del senador Carlos Montes, quien duda que haya votos suficientes en la Sala de la Cámara de Diputados para objetar el artículo que hace referencia a la repatriación de capitales.
“Nosotros nunca estuvimos de acuerdo con esto”, afirmó el senador Carlos Montes, aludiendo también a sus pares de la Nueva Mayoría que integraron la Comisión de Hacienda del Senado. “Ese fue un acuerdo entre el ministro Arenas y (Juan Pablo) Letelier”, sostuvo, traspasando la responsabilidad a los protagonistas de esta indicación incorporada.
Según el senador “esto puede acarrear problemas y sanciones de organismos internacionales”, cuestión que respalda también el diputado Lorenzini, ya que contraviene acuerdos suscritos por Chile.
Según Letelier, se crearía un registro se capitales que ingresen durante el período de apertura, sin embargo distintos especialistas han advertido las dificultades que existen para controlar el origen de los dineros que pueden provenir del lavado de dinero, el contrabando de armas, el narcotráfico.
Otras voces han sido críticas con las medidas ya que “premia” a quienes en algún momento debieron pagar impuestos y no lo hicieron.
La repatriación de capitales nunca estuvo en el corazón de la Reforma Tributaria, sin embargo fue uno de los puntos clave para que la Alianza accediera a firmar el Protocolo de Acuerdo consensuado entre el Senado y el Ejecutivo.
Según uno de sus principales promotores, el senador Juan Pablo Letelier (PS), la medida podría recaudar alrededor de mil 200 millones de dólares si es que se aprueba tal cual como está, con una tasa de retorno del 8 por ciento.
“Se introducirá una regulación transitoria (un año) para la declaración de rentas capitales que se encuentran en el exterior, siguiendo los más estrictos estándares de la OCDE sobre la materia”, dice el protocolo.
La iniciativa fue analizada con anterioridad. El último intento fue en el contexto del terremoto y la necesidad de ingresos extras para la reconstrucción. Esto no fructificó en el gobierno de Sebastián Piñera y tuvo en el ministro de Defensa Jorge Burgos, entonces diputado, a uno de sus principales detractores.
El temor de entonces y ahora es el mismo, que el incentivo a regularizar la situación tributaria de estos dineros de dudoso origen se transforme en el blanqueo de activos provenientes de paraísos fiscales, donde más de un político y empresario chileno tiene puestos sus dineros para invertir eludiendo el recaudo chileno.
Hasta el momento todo indica que “esto va a pasar colado”, sostuvo el diputado Pablo Lorenzini (DC), ya que aprobarán la reforma global, teniendo que aceptar algunos resquicios alcanzados en el polémico protocolo.
Esto ya está zanjado, a juicio del senador Carlos Montes, quien duda que haya votos suficientes en la Sala de la Cámara de Diputados para objetar el artículo que hace referencia a la repatriación de capitales.
“Nosotros nunca estuvimos de acuerdo con esto”, afirmó el senador Carlos Montes, aludiendo también a sus pares de la Nueva Mayoría que integraron la Comisión de Hacienda del Senado. “Ese fue un acuerdo entre el ministro Arenas y (Juan Pablo) Letelier”, sostuvo, traspasando la responsabilidad a los protagonistas de esta indicación incorporada.
Según el senador “esto puede acarrear problemas y sanciones de organismos internacionales”, cuestión que respalda también el diputado Lorenzini, ya que contraviene acuerdos suscritos por Chile.
Según Letelier, se crearía un registro se capitales que ingresen durante el período de apertura, sin embargo distintos especialistas han advertido las dificultades que existen para controlar el origen de los dineros que pueden provenir del lavado de dinero, el contrabando de armas, el narcotráfico.
Otras voces han sido críticas con las medidas ya que “premia” a quienes en algún momento debieron pagar impuestos y no lo hicieron.
