Los anuncios que el gobierno ha hecho en torno a las reformas y cómo continuará avanzando o desechando estas iniciativas comprometidas durante el Programa de Gobierno han sido materia de preocupación para diferentes personeros del oficialismo.
Las posturas, muchas veces enfrentadas, han dejado al descubierto las “dos almas” que conviven en la Nueva Mayoría. La Constitución y el cómo o cuándo ésta debiera ver la luz, ha sido uno de los principales enfrentamientos. En ese sentido, el senador Pedro Araya se pliega a las voces que exigen el cumplimiento de esta promesa, al menos, en el sentido de iniciar el debate en lo que queda de Gobierno.
Por ello emplazó al Gobierno a centrarse en definir los contenidos de la nueva carta fundamental. Obviarlo, para él, sería un rotundo fracaso para el gobierno y la Nueva Mayoría, porque se estaría incumpliendo un compromiso con la ciudadanía. “Es importante conocer qué se está pensando en derecho de propiedad, en tema ambiental, en institucionalidad del país”, planteó.
La Reforma Laboral es otra de las preocupaciones del legislador, principalmente, lo que dice relación con regular materias como el subcontrato. En ese sentido, criticó al documento que se discute en el Senado, porque no resuelve la negociación colectiva de este tipo de trabajadores, pese a que es una práctica contractual que crece en Chile, ejemplo de ello es lo que pasa en Codelco.
Para Pedro Araya el que el presidente ejecutivo de la cuprífera estatal, Nelson Pizarro, se desligara de la situación de sus trabajadores con subcontrato es lamentable: “Lo que ha ocurrido con Codelco grafica lo que hemos señalado en el proyecto de Reforma Laboral: tenemos un forado en el proyecto que es la subcontratación. Si no lo resolvemos, la situación de Codelco se va a repetir en el sector forestal, en el retail, etc. Hay que trabajar en una norma que nos permita regular la negociación de los subcontratistas y los mandantes”, agregó.
Por la importancia que reviste equiparar las relaciones laborales, Pedro Araya insistió en que la Reforma Laboral debe estar aprobada antes que culmine este gobierno. A su juicio, el Gobierno tampoco puede renunciar a sacar adelante la Reforma Educacional y concretar un avance en el sector público de Salud.