La imagen de un niño, de nacionalidad siria, de no más de tres años, tumbado boca abajo en una playa cercana a la localidad turca de Bodrum, es el aterrador resumen de la cada vez más patente crisis migratoria que Europa vive en estas semanas.
Los fallecidos se habían embarcado en dos botes en las costas turcas, con el objetivo de alcanzar la isla griega de Kos, y luego seguir camino al puerto ateniense de Pireo, tal como lo han hecho otros miles de refugiados que después siguen camino a Europa del norte.
De acuerdo a información del diario El Mundo de España, la identidad del niño ahogado sería Aylan Kurdi, mientras que a algunos metros de él yacía el cadáver de su hermano, Galip, de cinco años, situación que ha remecido las conciencias en el Viejo Mundo.
Justin Forsyth, de la fundación internacional Save the Children, señaló que “esta trágica imagen de un niño que perdió su vida escapando desde Siria es estremecedora y es un recuerdo de los peligros que estos niños y sus familias están tomando en búsqueda de una vida mejor. Esta difícil situación de los niños debería hacer que la Unión Europea concentre sus mentes y esfuerzos de reunirse y acordar un plan para hacer frente a la crisis de refugiados”.
Muchos de quienes abordan estas frágiles embarcaciones son desplazados desde Siria por la brutal ocupación de sus pueblos por parte del Estado Islámico, así como afganos, pakistaníes que llegan a pagar hasta 1.800 euros a traficantes de personas que les consigan lugar en alguno de estos botes, que siguen la ruta Bodrum-Kos que es una de las más cortas entre Turquía y Grecia, la cual sólo el último mes ha sido recorrida por más de 2 mil refugiados.
Mientras que unos 15 mil refugiados esperan en la isla griega de Lesbos el paso hacia el Pireo, el gobierno griego ha señalado que están tomando medidas de emergencia para facilitar el flujo de personas, tal como sostiene el ministro de Migraciones, Yiannis Mouzalas, quien indicó que estas disposiciones buscan mejorar las condiciones de vida tanto de los refugiados como de los residentes de las islas del Egeo que han recibido estas oleadas migratorias.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) calcula que alrededor de 205 mil refugiados con destino a Europa han entrado a Grecia a través de las islas del Egeo, sólo este año, siendo el 69 por ciento de ellos sirios, mientras que un 18 por ciento son afganos, y el resto iraquíes y somalíes.
En este sentido, el gobierno de Islandia anunció la posibilidad de ampliar su plan de acogida a refugiados sirios, luego que parte de la ciudadanía islandesa realizara peticiones al Ejecutivo a través de las redes sociales, por lo que se hará un aumento del número de personas de nacionalidad siria que serán recibidas, de las 50 originalmente previstas, aunque aún no existe una cifra determinada.