La directiva de Renovación Nacional se reunió con el ministro del Interior, Jorge Burgos, y los ministros del comité político, por la agenda del llamado “proceso constituyente”.
El presidente de la colectividad, Cristian Monckeberg, aseguró que se van “tranquilos” del encuentro y que “están abiertos al debate”. Además, indicó que lo peor que podría pasar en el debate constitucional es que algunos sectores salgan triunfadores y otros derrotados, pues en su concepto lo ideal es que el resultado represente a todos los sectores del país.
Monckeberg defendió la idea de que el espacio legítimo de validación de una propuesta constitucional es el Congreso Nacional y luego una ratificación ciudadana a través de un plebiscito.
“El ministro nos dijo que en los próximos días la Presidenta va a señalar en qué consiste este famoso proceso constituyente que a nosotros nos merece bastantes dudas, más que certezas. Pero sí dio claridades, y esas claridades están en que habrá participación ciudadana, están contemplados los recursos en la Ley de Presupuestos. Y, segundo, que esto va a terminar en una propuesta en la que el Congreso va a fijar las normas de lo que va a ocurrir más adelante”.
Sin embargo, en representación del Movimiento por una Asamblea Constituyente, Matías Sagredo calificó de inconstitucional esta propuesta, pues en su concepto ni el Ejecutivo ni el Legislativo tienen la atribución de redactar, ni mucho menos aprobar una nueva Carta Magna.
“La Constitución no le entrega al Congreso la atribución de redactar ni aprobar una Nueva Constitución, solamente para hacer reformas. Por otro lado, la propuesta de ellos es completamente inválida porque el poder constituyente reside en el pueblo y no en el gobierno de turno ni en el Parlamento”.
Por su parte, Manuel Lobos, de Marca AC, rechazó también la vía bicameral para una nueva Constitución, a la vez que indicó que la mejor manera de dar estabilidad desde el punto de vista político, social y económico es resolver el proceso constituyente de cara a la ciudadanía, mediante una Asamblea Constituyente.
“En la medida que se sigan alejando de la ciudadanía para esta conversación, en la medida en que crean que es el poder político al margen de la ciudadanía quien va a establecer la nueva Constitución, inevitablemente esa cuestionada falta de certidumbre que señalan los actores políticos y económicos se va a sostener por muchas años”.
Durante esta semana continuarán los diálogos constitucionales entre el Ministro del Interior y los partidos políticos y movimientos interesados en una nueva Constitución y sus mecanismos.
Para los próximos días está agendada la visita de representantes de la UDI, a quienes Cristián Monckeberg recomendó voluntad de diálogo, pues “nada ganan con amurrarse”.
La directiva de Renovación Nacional se reunió con el ministro del Interior, Jorge Burgos, y los ministros del comité político, por la agenda del llamado “proceso constituyente”.
El presidente de la colectividad, Cristian Monckeberg, aseguró que se van “tranquilos” del encuentro y que “están abiertos al debate”. Además, indicó que lo peor que podría pasar en el debate constitucional es que algunos sectores salgan triunfadores y otros derrotados, pues en su concepto lo ideal es que el resultado represente a todos los sectores del país.
Monckeberg defendió la idea de que el espacio legítimo de validación de una propuesta constitucional es el Congreso Nacional y luego una ratificación ciudadana a través de un plebiscito.
“El ministro nos dijo que en los próximos días la Presidenta va a señalar en qué consiste este famoso proceso constituyente que a nosotros nos merece bastantes dudas, más que certezas. Pero sí dio claridades, y esas claridades están en que habrá participación ciudadana, están contemplados los recursos en la Ley de Presupuestos. Y, segundo, que esto va a terminar en una propuesta en la que el Congreso va a fijar las normas de lo que va a ocurrir más adelante”.
Sin embargo, en representación del Movimiento por una Asamblea Constituyente, Matías Sagredo calificó de inconstitucional esta propuesta, pues en su concepto ni el Ejecutivo ni el Legislativo tienen la atribución de redactar, ni mucho menos aprobar una nueva Carta Magna.
“La Constitución no le entrega al Congreso la atribución de redactar ni aprobar una Nueva Constitución, solamente para hacer reformas. Por otro lado, la propuesta de ellos es completamente inválida porque el poder constituyente reside en el pueblo y no en el gobierno de turno ni en el Parlamento”.
Por su parte, Manuel Lobos, de Marca AC, rechazó también la vía bicameral para una nueva Constitución, a la vez que indicó que la mejor manera de dar estabilidad desde el punto de vista político, social y económico es resolver el proceso constituyente de cara a la ciudadanía, mediante una Asamblea Constituyente.
“En la medida que se sigan alejando de la ciudadanía para esta conversación, en la medida en que crean que es el poder político al margen de la ciudadanía quien va a establecer la nueva Constitución, inevitablemente esa cuestionada falta de certidumbre que señalan los actores políticos y económicos se va a sostener por muchas años”.
Durante esta semana continuarán los diálogos constitucionales entre el Ministro del Interior y los partidos políticos y movimientos interesados en una nueva Constitución y sus mecanismos.
Para los próximos días está agendada la visita de representantes de la UDI, a quienes Cristián Monckeberg recomendó voluntad de diálogo, pues “nada ganan con amurrarse”.
La directiva de Renovación Nacional se reunió con el ministro del Interior, Jorge Burgos, y los ministros del comité político, por la agenda del llamado “proceso constituyente”.
El presidente de la colectividad, Cristian Monckeberg, aseguró que se van “tranquilos” del encuentro y que “están abiertos al debate”. Además, indicó que lo peor que podría pasar en el debate constitucional es que algunos sectores salgan triunfadores y otros derrotados, pues en su concepto lo ideal es que el resultado represente a todos los sectores del país.
Monckeberg defendió la idea de que el espacio legítimo de validación de una propuesta constitucional es el Congreso Nacional y luego una ratificación ciudadana a través de un plebiscito.
“El ministro nos dijo que en los próximos días la Presidenta va a señalar en qué consiste este famoso proceso constituyente que a nosotros nos merece bastantes dudas, más que certezas. Pero sí dio claridades, y esas claridades están en que habrá participación ciudadana, están contemplados los recursos en la Ley de Presupuestos. Y, segundo, que esto va a terminar en una propuesta en la que el Congreso va a fijar las normas de lo que va a ocurrir más adelante”.
Sin embargo, en representación del Movimiento por una Asamblea Constituyente, Matías Sagredo calificó de inconstitucional esta propuesta, pues en su concepto ni el Ejecutivo ni el Legislativo tienen la atribución de redactar, ni mucho menos aprobar una nueva Carta Magna.
“La Constitución no le entrega al Congreso la atribución de redactar ni aprobar una Nueva Constitución, solamente para hacer reformas. Por otro lado, la propuesta de ellos es completamente inválida porque el poder constituyente reside en el pueblo y no en el gobierno de turno ni en el Parlamento”.
Por su parte, Manuel Lobos, de Marca AC, rechazó también la vía bicameral para una nueva Constitución, a la vez que indicó que la mejor manera de dar estabilidad desde el punto de vista político, social y económico es resolver el proceso constituyente de cara a la ciudadanía, mediante una Asamblea Constituyente.
“En la medida que se sigan alejando de la ciudadanía para esta conversación, en la medida en que crean que es el poder político al margen de la ciudadanía quien va a establecer la nueva Constitución, inevitablemente esa cuestionada falta de certidumbre que señalan los actores políticos y económicos se va a sostener por muchas años”.
Durante esta semana continuarán los diálogos constitucionales entre el Ministro del Interior y los partidos políticos y movimientos interesados en una nueva Constitución y sus mecanismos.
Para los próximos días está agendada la visita de representantes de la UDI, a quienes Cristián Monckeberg recomendó voluntad de diálogo, pues “nada ganan con amurrarse”.
