“Queremos hacer un gesto hacia la comunidad, estamos viendo qué documentos son los que tenemos aquí para ver la posibilidad de entregarlos. Pero cualquier decisión que se tome, nosotros la consultamos con los funcionarios de regiones”.
Esas fueron las palabras de la presidenta de Anercich, Nelly Díaz, mostrando la posibilidad que se flexibilice la paralización de los trabajadores del servicio para poder atender los diversos problemas que se han generado para los usuarios.
Sin embargo, en el fondo se sigue sin dar señales de avance. La ministra de Justicia, Javiera Blanco, reapareció después de un día de absoluto silencio medial, y llamó a los trabajadores a reconsiderar la propuesta que se hizo hace algunos días: un bono que se comenzaría a pagar a fines de 2016 y se entregaría en su totalidad en 2017.
La Secretaria de Estado hizo hincapié en que inicialmente la dirigencia de los trabajadores había considerado positivamente la propuesta: “Las puertas de este Ministerio están abiertas, esperando que podamos arribar a la firma de este acuerdo concertado con los trabajadores”
La estrategia del desgaste y de la austeridad económica comienza a pasar la cuenta sobre el gabinete y el Gobierno. El presidente de la ANEF, Raúl de la Puente, lamentó que el Ejecutivo no solucionara el conflicto antes del inicio de la negociación con la mesa del sector público, evitando ensuciar estas conversaciones. “Se lo dijimos al gobierno. Lo del Registro Civil no tenía que ser contaminado con el reajuste. La obstinación del gobierno de no negociar, nos tiene en esta situación”, explicó.
Por otra parte, en cuanto a responsabilidades políticas, los efectos del paro comienzan a esparcirse. Si bien antes el cuestionado fue el Subsecretario del Interior, por deslizar la posibilidad de aplicar la Ley de Seguridad del Estado, ahora el senador Pedro Araya cuestionó al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, por desligarse del conflicto, y mantener la intransigente postura de la austeridad económica. “
Los trabajadores sostendrán una nueva asamblea durante esta tarde, para ver cómo responden a la ofensiva del Gobierno, que no quiere moverse de su única propuesta.
“Queremos hacer un gesto hacia la comunidad, estamos viendo qué documentos son los que tenemos aquí para ver la posibilidad de entregarlos. Pero cualquier decisión que se tome, nosotros la consultamos con los funcionarios de regiones”.
Esas fueron las palabras de la presidenta de Anercich, Nelly Díaz, mostrando la posibilidad que se flexibilice la paralización de los trabajadores del servicio para poder atender los diversos problemas que se han generado para los usuarios.
Sin embargo, en el fondo se sigue sin dar señales de avance. La ministra de Justicia, Javiera Blanco, reapareció después de un día de absoluto silencio medial, y llamó a los trabajadores a reconsiderar la propuesta que se hizo hace algunos días: un bono que se comenzaría a pagar a fines de 2016 y se entregaría en su totalidad en 2017.
La Secretaria de Estado hizo hincapié en que inicialmente la dirigencia de los trabajadores había considerado positivamente la propuesta: “Las puertas de este Ministerio están abiertas, esperando que podamos arribar a la firma de este acuerdo concertado con los trabajadores”
La estrategia del desgaste y de la austeridad económica comienza a pasar la cuenta sobre el gabinete y el Gobierno. El presidente de la ANEF, Raúl de la Puente, lamentó que el Ejecutivo no solucionara el conflicto antes del inicio de la negociación con la mesa del sector público, evitando ensuciar estas conversaciones. “Se lo dijimos al gobierno. Lo del Registro Civil no tenía que ser contaminado con el reajuste. La obstinación del gobierno de no negociar, nos tiene en esta situación”, explicó.
Por otra parte, en cuanto a responsabilidades políticas, los efectos del paro comienzan a esparcirse. Si bien antes el cuestionado fue el Subsecretario del Interior, por deslizar la posibilidad de aplicar la Ley de Seguridad del Estado, ahora el senador Pedro Araya cuestionó al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, por desligarse del conflicto, y mantener la intransigente postura de la austeridad económica. “
Los trabajadores sostendrán una nueva asamblea durante esta tarde, para ver cómo responden a la ofensiva del Gobierno, que no quiere moverse de su única propuesta.
“Queremos hacer un gesto hacia la comunidad, estamos viendo qué documentos son los que tenemos aquí para ver la posibilidad de entregarlos. Pero cualquier decisión que se tome, nosotros la consultamos con los funcionarios de regiones”.
Esas fueron las palabras de la presidenta de Anercich, Nelly Díaz, mostrando la posibilidad que se flexibilice la paralización de los trabajadores del servicio para poder atender los diversos problemas que se han generado para los usuarios.
Sin embargo, en el fondo se sigue sin dar señales de avance. La ministra de Justicia, Javiera Blanco, reapareció después de un día de absoluto silencio medial, y llamó a los trabajadores a reconsiderar la propuesta que se hizo hace algunos días: un bono que se comenzaría a pagar a fines de 2016 y se entregaría en su totalidad en 2017.
La Secretaria de Estado hizo hincapié en que inicialmente la dirigencia de los trabajadores había considerado positivamente la propuesta: “Las puertas de este Ministerio están abiertas, esperando que podamos arribar a la firma de este acuerdo concertado con los trabajadores”
La estrategia del desgaste y de la austeridad económica comienza a pasar la cuenta sobre el gabinete y el Gobierno. El presidente de la ANEF, Raúl de la Puente, lamentó que el Ejecutivo no solucionara el conflicto antes del inicio de la negociación con la mesa del sector público, evitando ensuciar estas conversaciones. “Se lo dijimos al gobierno. Lo del Registro Civil no tenía que ser contaminado con el reajuste. La obstinación del gobierno de no negociar, nos tiene en esta situación”, explicó.
Por otra parte, en cuanto a responsabilidades políticas, los efectos del paro comienzan a esparcirse. Si bien antes el cuestionado fue el Subsecretario del Interior, por deslizar la posibilidad de aplicar la Ley de Seguridad del Estado, ahora el senador Pedro Araya cuestionó al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, por desligarse del conflicto, y mantener la intransigente postura de la austeridad económica. “
Los trabajadores sostendrán una nueva asamblea durante esta tarde, para ver cómo responden a la ofensiva del Gobierno, que no quiere moverse de su única propuesta.
